lunes, 30 de abril de 2012
lunes, 16 de abril de 2012
Escuchando al presidente Correa en su "Enlace" sabatino
Hace mucho tiempo era un rito que teníamos con mi esposa. Luego me aburrió pero hace pocas semanas lo he retomado. Esta vez es con más curiosidad sobre la entrega de su Parte de Labores semanal, el contenido y enfoque del mismo y el nuevo elemento que se desprende: la comparación con las noticias de los diarios de oposición, sobre todo El Universo y El Comercio (reconozco que no leo La Hora, está muy alejado de mis gustos).
Los "enlaces" duran aproximadamente 3 horas cada uno y se los realiza en diferentes partes del país o del extranjero. Están divididos en varias secciones: canciones, entrada del Presidente, Reporte comentado de Labores (el más largo y que incluye lista de actividaes, comentarios y chistes sobre puntos claves o polémicos y explicaciones administrativas o de conceptos económicos)*, segmentos contra-informativos (Agencia Informativa Lengua Noticias, La mentira de la Semana/Queremos la Verdad/Mentira comprobada), acotaciones de otros miembros del gobierno, sketches de dos personajes de teatro (uno montuvio el otro serrano), informe final y lectura de la traducción al quechua de lo medular del enlace. Canciones finales y despedida. Fragmentos de canciones también le sirven al presidente a lo largo de su larga intervención para ponerle color y un tone menos serio al evento (desde barras a Emelec, pasando por Venceremos, pasillos a diversas ciudades y canciones de "la nueva canción latinoamericana", sin olvidar los canturreos que el mismo presidente hace o los enfoques a guapas asistentes).
Cada sábado escucho con interés y pongo atención a lo medular. Al día siguiente y durante la semana constato ya sin sorpresa la manera en que los temas de discusión e interés del "enlace" son simplemente ocultados, manipulados o criticados por la prensa opositora sin citar textualmente lo dicho. Sean temas de actualidad, rectificaciones o aclaraciones hechas por el presidente, la oposición pierde la valiosa oportunidad de entablar un debate racional, apropiado, aleccionador. Muy por el contrario, se aprovecha de que la audiciencia cada vez lee toda la noticia en un periódico y de que los medios oficiales no tienen alcance a la gente y riegan noticias sin base real ni contextualizada. Al final, el presidente tiene razón en acusarlos una y otra vez de mentirosos y de insistir en que es "prohibido olvidar" (en EEUU se olvidaron de la bonanza del período Clinton y votaron por Bush, ahora se olvidaron de que la crisis fue causada por 8 años de administración Bush y republicana y lo acusan a Obama de la falta de empleos). Pero el presidente Correa pierde la oportunidad de insistir en que la oposición, por el bien del país, lleve a cabo un debate basado en premisas reales, no en rumores, chismes, temores o mentiras. Es un juego muy viejo que, es sabido, no conduce sino a mantener el atraso humano en general.
Sería inútil enumerar lo que el presidente señala como importante en sus sabtinas, nada de eso será retomado por la prensa opositora ni sus voceros. Debo decir también que es una sorpresa para mí constatar la falta de valentía y honradez moral de la oposición y sus jueguitos para rehuir el dabate, esa cobardía no los lleva a ningún lado, y a sus lectores o a quienes confían en ella, tampoco...Quizá deba decir lo mismo sobre muchos de los que trabajan para AP, que se han festinado y festinan de diferentes maneras los millones del Estado. Esto es un hecho que el mismo presidente Correa debe denunciar, pues es a él a quien le toca enfrentar esa lacra, o a los cuerpos policiales encargados de investigaciones, o a los "whistle blowers" que de repente aparecen, con la honestidad en la mano.
Los enlaces sabatinos entretienen un poco y dan la otra cara de la información. No concuerdo en varias cosas con el presidente y su estilo no es precisamente lo que pega en la clase media o media-alta, pero esas son cuestiones de gusto. Lo de fondo se impone: la manipulación informativa y el olvido son dos armas con las que debe contar cualquier enemigo listo para caer sobre el dinero del Estado. Lo sé porque en Ecuador es así y en EE.UU también.
* Los interesados pueden revisar en el sitio de la Presidencia de la República del Ecuador (sea en su Facebook o internet abierta, el blog del presidente llamado "Economía en bicicleta", que agrupa estas partes dedicadas a la economía)
Los "enlaces" duran aproximadamente 3 horas cada uno y se los realiza en diferentes partes del país o del extranjero. Están divididos en varias secciones: canciones, entrada del Presidente, Reporte comentado de Labores (el más largo y que incluye lista de actividaes, comentarios y chistes sobre puntos claves o polémicos y explicaciones administrativas o de conceptos económicos)*, segmentos contra-informativos (Agencia Informativa Lengua Noticias, La mentira de la Semana/Queremos la Verdad/Mentira comprobada), acotaciones de otros miembros del gobierno, sketches de dos personajes de teatro (uno montuvio el otro serrano), informe final y lectura de la traducción al quechua de lo medular del enlace. Canciones finales y despedida. Fragmentos de canciones también le sirven al presidente a lo largo de su larga intervención para ponerle color y un tone menos serio al evento (desde barras a Emelec, pasando por Venceremos, pasillos a diversas ciudades y canciones de "la nueva canción latinoamericana", sin olvidar los canturreos que el mismo presidente hace o los enfoques a guapas asistentes).
Cada sábado escucho con interés y pongo atención a lo medular. Al día siguiente y durante la semana constato ya sin sorpresa la manera en que los temas de discusión e interés del "enlace" son simplemente ocultados, manipulados o criticados por la prensa opositora sin citar textualmente lo dicho. Sean temas de actualidad, rectificaciones o aclaraciones hechas por el presidente, la oposición pierde la valiosa oportunidad de entablar un debate racional, apropiado, aleccionador. Muy por el contrario, se aprovecha de que la audiciencia cada vez lee toda la noticia en un periódico y de que los medios oficiales no tienen alcance a la gente y riegan noticias sin base real ni contextualizada. Al final, el presidente tiene razón en acusarlos una y otra vez de mentirosos y de insistir en que es "prohibido olvidar" (en EEUU se olvidaron de la bonanza del período Clinton y votaron por Bush, ahora se olvidaron de que la crisis fue causada por 8 años de administración Bush y republicana y lo acusan a Obama de la falta de empleos). Pero el presidente Correa pierde la oportunidad de insistir en que la oposición, por el bien del país, lleve a cabo un debate basado en premisas reales, no en rumores, chismes, temores o mentiras. Es un juego muy viejo que, es sabido, no conduce sino a mantener el atraso humano en general.
Sería inútil enumerar lo que el presidente señala como importante en sus sabtinas, nada de eso será retomado por la prensa opositora ni sus voceros. Debo decir también que es una sorpresa para mí constatar la falta de valentía y honradez moral de la oposición y sus jueguitos para rehuir el dabate, esa cobardía no los lleva a ningún lado, y a sus lectores o a quienes confían en ella, tampoco...Quizá deba decir lo mismo sobre muchos de los que trabajan para AP, que se han festinado y festinan de diferentes maneras los millones del Estado. Esto es un hecho que el mismo presidente Correa debe denunciar, pues es a él a quien le toca enfrentar esa lacra, o a los cuerpos policiales encargados de investigaciones, o a los "whistle blowers" que de repente aparecen, con la honestidad en la mano.
Los enlaces sabatinos entretienen un poco y dan la otra cara de la información. No concuerdo en varias cosas con el presidente y su estilo no es precisamente lo que pega en la clase media o media-alta, pero esas son cuestiones de gusto. Lo de fondo se impone: la manipulación informativa y el olvido son dos armas con las que debe contar cualquier enemigo listo para caer sobre el dinero del Estado. Lo sé porque en Ecuador es así y en EE.UU también.
* Los interesados pueden revisar en el sitio de la Presidencia de la República del Ecuador (sea en su Facebook o internet abierta, el blog del presidente llamado "Economía en bicicleta", que agrupa estas partes dedicadas a la economía)
lunes, 9 de abril de 2012
De cómo en El Comercio de Quito escriben de manera racista sobre el presidente Obama
[Este "editorial" fue publicado en El Comercio de Quito, aquí se nota el racismo que llevan muchos de esos "intelectuales" y dizque analistas políticos, pero sobre esto nadie dice nada. El presidente de la nación más poderosamente del mundo es llamado aquí casi con ternura: "moreno", "Gran Jefe negrito", "don Obama", etc, como lo hacen con los jugadores de fútbol (aunque éste "sí sopla"). Racismo y del bueno, del que nadie ubica inmediatamente... Ah! diarios "independientes"! Ah! Libertad de expresión, derecho inalienable!]
Obama sí sopla
Jorge Ribadeneira A
Domingo 08/04/2012
El moreno presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, va a llegar orondo a la Cumbre de las Américas porque a estas alturas es ya el favorito para continuar en la Casa Blanca hasta el 2016, algo que no sucedía cuando en el año de desgracia del 2010 los republicanos y su Tea Party le dieron una paliza y se apoderaron de la Cámara de Representantes, dejándole apenas el Senado con un voto de mayoría. Pero hoy, mirando las encuestas y analizando las perspectivas, don Obama murmura “voy a ganar” . La derrota del 2010 vino de mano de la crisis y del creciente desempleo. Obama tuvo, entre otras cosas, la mala suerte de heredar el poder de míster Bush, uno de los peores –talvez el peor- presidente de los Estados Unidos de América, quien le dejó no solo la desastrosa guerra del Iraq sino una pésima imagen mundial y los elementos para un amargo problema económico. El nuevo gobernante –que se había dado el gusto de vencer a doña Hillary Clinton y de ser el primer Gran Jefe negrito de la potencia- puso también una cuota de novatada y los dos primeros años fueron muy tristes. Inclusive los republicanos triunfantes le acusaron de “izquierdista” -y le acusan todavía- a Obama, afirmando que su agenda afectaba los principios de libertad, con mínima interferencia del Gobierno, que habían inspirado el progreso de los Estados Unidos. Igualmente dijeron que era adversario de las petroleras y preconizaba fórmulas para reemplazarlas. A todo ello se sumaba el desempleo. Pero el panorama fue mejorando paulatinamente. Obama cumplió con su oferta de terminar la guerra de Iraq, su gobierno se adjudicó un punto con la liquidación de Bin Laden, el líder de Al Qaeda, mejoró el empleo, igualmente hubo pasos positivos en el tema económico. Pero, además, le cayó una lotería. La elección del candidato republicano se convirtió en un caos y las perspectivas del posible triunfador, Mitt Romney, fueron bajando con el paso de los días, cuando fue presentado como un millonario que había pagado bajos impuestos. Una última encuesta del Washington Post y de la televisora ABC presentó a Obama como posible vencedor de las elecciones de noviembre con un 52% por un 42% para el republicano Romney. Aparecieron también favorables a Obama las encuestas sobre el voto latino y hasta el voto judío. El Presidente mejoró por todo lado y le volvió la sonrisa. ¿Y doña Hillary? Hizo una declaración interesante. Dijo que no va a intervenir en la campaña presidencial, en homenaje a las características de su alta función política actual, como secretaria de Estado. Pero su esposo, el ex presidente Bill Clinton, sí anuncia que estará muy cerca de Obama durante la campaña. Mientras tanto, suben de nivel las versiones de que Hillary se va perfilando como la candidata presidencial demócrata para el año 2016, con el apoyo total de Bill…y de Obama. Es decir, con obvias perspectivas de triunfo.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com.ec/jorge_ribadeneira/Obama-sopla_0_677932273.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com
Obama sí sopla
Jorge Ribadeneira A
Domingo 08/04/2012
El moreno presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, va a llegar orondo a la Cumbre de las Américas porque a estas alturas es ya el favorito para continuar en la Casa Blanca hasta el 2016, algo que no sucedía cuando en el año de desgracia del 2010 los republicanos y su Tea Party le dieron una paliza y se apoderaron de la Cámara de Representantes, dejándole apenas el Senado con un voto de mayoría. Pero hoy, mirando las encuestas y analizando las perspectivas, don Obama murmura “voy a ganar” . La derrota del 2010 vino de mano de la crisis y del creciente desempleo. Obama tuvo, entre otras cosas, la mala suerte de heredar el poder de míster Bush, uno de los peores –talvez el peor- presidente de los Estados Unidos de América, quien le dejó no solo la desastrosa guerra del Iraq sino una pésima imagen mundial y los elementos para un amargo problema económico. El nuevo gobernante –que se había dado el gusto de vencer a doña Hillary Clinton y de ser el primer Gran Jefe negrito de la potencia- puso también una cuota de novatada y los dos primeros años fueron muy tristes. Inclusive los republicanos triunfantes le acusaron de “izquierdista” -y le acusan todavía- a Obama, afirmando que su agenda afectaba los principios de libertad, con mínima interferencia del Gobierno, que habían inspirado el progreso de los Estados Unidos. Igualmente dijeron que era adversario de las petroleras y preconizaba fórmulas para reemplazarlas. A todo ello se sumaba el desempleo. Pero el panorama fue mejorando paulatinamente. Obama cumplió con su oferta de terminar la guerra de Iraq, su gobierno se adjudicó un punto con la liquidación de Bin Laden, el líder de Al Qaeda, mejoró el empleo, igualmente hubo pasos positivos en el tema económico. Pero, además, le cayó una lotería. La elección del candidato republicano se convirtió en un caos y las perspectivas del posible triunfador, Mitt Romney, fueron bajando con el paso de los días, cuando fue presentado como un millonario que había pagado bajos impuestos. Una última encuesta del Washington Post y de la televisora ABC presentó a Obama como posible vencedor de las elecciones de noviembre con un 52% por un 42% para el republicano Romney. Aparecieron también favorables a Obama las encuestas sobre el voto latino y hasta el voto judío. El Presidente mejoró por todo lado y le volvió la sonrisa. ¿Y doña Hillary? Hizo una declaración interesante. Dijo que no va a intervenir en la campaña presidencial, en homenaje a las características de su alta función política actual, como secretaria de Estado. Pero su esposo, el ex presidente Bill Clinton, sí anuncia que estará muy cerca de Obama durante la campaña. Mientras tanto, suben de nivel las versiones de que Hillary se va perfilando como la candidata presidencial demócrata para el año 2016, con el apoyo total de Bill…y de Obama. Es decir, con obvias perspectivas de triunfo.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com.ec/jorge_ribadeneira/Obama-sopla_0_677932273.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com
sábado, 7 de abril de 2012
De porqué los intelectuales (y artistas) no apoyan a Correa
1- Porque se creen superiores a Correa. De hecho, les da envidia no ser ellos los que hablan cada sábado para miles de personas, siendo ellos más inteligentes que mi coronel Lucio Correa;
2- Porque algún negocio les salió mal: no les dieron la beca que querían, no consiguieron el puesto que pidieron, no los invitaron al festival de arte o feria de libros o, sencillamente, porque perdieron el trabajo que ya tenían (y lo perdieron gracias al que consideran inferior)
3- Porque los intelectuales son una dizque élite que se ve a sí misma como la crema de la inteligencia y lamentan que a la burguesía no le interese lo que ellos dicen o hacen (si así fuera, serían intelectuales y burgueses, una gloria para cualquier corazón inflado);
4- Porque les da verguenza que su nombre se vea asociado a un presidente que canta y baila y no ejerce auto-control en lo que dice (ah, y siempre se quejan de como se rie, como si mi coronel fuera culpable de eso);
5- Porque apoyar a Correa sería hablar bien de mi coronel, reconocer sus méritos o criticarlo constructivamente. Pero los intelectuales sólo pueden hablar bien de ellos mismos, de sus propios méritos (hay algunos inletectuales que no son pendejos y tienen su cualquier cosita por ahi), y su crítica siempre es para destruir lo bueno que se encuentre en otra parte que no sea la de ellos;
6- (La verdad no creo que haya más, pero si recuerdo otra causa o me la hacen saber, la incluiré presto en la lista)
pd: al final, y contradictoriamente, no sé si es de temer más a éstos o a los que dizque apoyan a mi coronel Lucio Correa, porque nadie está ahí por convicción política sino por arribismo, protagonismo o angurria por el dinero regalado... no hablo de excepciones, que toda regla la tiene.
Conclusión: cuídate de los que se autodenominan intelectuales y artistas (sobre todo poetas)
(Un tratamiento más serio del tema debe empezar, según yo, con las palabras de un colega, Mike Morgan, Decano de la Facultad de Educación, aquí habla del "espacio sagrado" como condición previa a la reacción inmediata: "Before responding to someone, however, there is a sacred space to explore. This space is found within a purposeful pause before speaking. This space allows for mindful words and non-verbals that bring increased dignity and integrity to the communicative process. Sometimes, we fall into the trap of reacting without any space for mindful words and non-verbals. Reactive/reflexive communication, however, can erode the potential for effective communication. Developing a response within the sacred space is at the micro-level of communication and takes practice to improve, especially during stressful situations and crucial conversations."en su blog: http://ehhsdean.wordpress.com/)
2- Porque algún negocio les salió mal: no les dieron la beca que querían, no consiguieron el puesto que pidieron, no los invitaron al festival de arte o feria de libros o, sencillamente, porque perdieron el trabajo que ya tenían (y lo perdieron gracias al que consideran inferior)
3- Porque los intelectuales son una dizque élite que se ve a sí misma como la crema de la inteligencia y lamentan que a la burguesía no le interese lo que ellos dicen o hacen (si así fuera, serían intelectuales y burgueses, una gloria para cualquier corazón inflado);
4- Porque les da verguenza que su nombre se vea asociado a un presidente que canta y baila y no ejerce auto-control en lo que dice (ah, y siempre se quejan de como se rie, como si mi coronel fuera culpable de eso);
5- Porque apoyar a Correa sería hablar bien de mi coronel, reconocer sus méritos o criticarlo constructivamente. Pero los intelectuales sólo pueden hablar bien de ellos mismos, de sus propios méritos (hay algunos inletectuales que no son pendejos y tienen su cualquier cosita por ahi), y su crítica siempre es para destruir lo bueno que se encuentre en otra parte que no sea la de ellos;
6- (La verdad no creo que haya más, pero si recuerdo otra causa o me la hacen saber, la incluiré presto en la lista)
pd: al final, y contradictoriamente, no sé si es de temer más a éstos o a los que dizque apoyan a mi coronel Lucio Correa, porque nadie está ahí por convicción política sino por arribismo, protagonismo o angurria por el dinero regalado... no hablo de excepciones, que toda regla la tiene.
Conclusión: cuídate de los que se autodenominan intelectuales y artistas (sobre todo poetas)
(Un tratamiento más serio del tema debe empezar, según yo, con las palabras de un colega, Mike Morgan, Decano de la Facultad de Educación, aquí habla del "espacio sagrado" como condición previa a la reacción inmediata: "Before responding to someone, however, there is a sacred space to explore. This space is found within a purposeful pause before speaking. This space allows for mindful words and non-verbals that bring increased dignity and integrity to the communicative process. Sometimes, we fall into the trap of reacting without any space for mindful words and non-verbals. Reactive/reflexive communication, however, can erode the potential for effective communication. Developing a response within the sacred space is at the micro-level of communication and takes practice to improve, especially during stressful situations and crucial conversations."en su blog: http://ehhsdean.wordpress.com/)
miércoles, 4 de abril de 2012
Recuerdos de Semana Santa
No son precisamente santos los recuerdos, cuanto tristes o nostálgicos.
Emparentada al fin de las vacaciones escolares, la Semana Santa era el aviso de que las cosas se reanudarían en un mes, que había que jugar más a prisa los partidos de índor, correr más, vivir más la vida porque había de empezar a cortar la indisciplina de quedarse en la calle, vagando con los amigos. O había que acomodar el horario porque algunos tenían que trabajar y estudiar a la vez, siendo niños o adolescentes. Y, en ese sentimiendo de cambio las lluvias eran menos frecuentes, hasta perderse en los primeros días del verano y el sol inaudito y entrañable del trópico, ya entrados en el ritmo de la vida escolar que iría de Mayo hasta Diciembre o los primeros días de Enero.
Algo similar ocurrió en la Católica, que nos dejaba libres los meses de Enero-Marzo en los cuales con mis amigos de adolescencia y alguno que otro de la universidad (Ramoncito, Jaime Franco, un serrano que alguna vez nos acompañó a beber unas cervezas a Jorge Martillo y a mí, pero que desapareció sin dejar rastro) salíamos a conquistar el mundo de esos años en nuestro Guayaquil querido.
Los días se Semana Santa eran también para irnos con el cholo Cepeda a algún pueblo playero o ciudad de la sierra: un viaje a Posorja, a la casa del cacho Bardales que, temprano en la mañana, a la voz de "descuenten hijueputas, a cargar agua" nos levantó de la cama. O eran días de, ya en la Católica, vagar por la ciudad vacía, tan hermosa y extraña, en un largo fin de semana en el cual se configuraba su otra geometría y emergía de ella la verdadera ciudad, esa que lejanamente aún se respira en las calles del norte (me refiero a la ciudad, a lo que hoy llaman Zona Rosa) pero existe siempre en "El Rincón de los Justos" y "Desde una oscura vigilia", dos libros maestros de Jorge Velasco que, según yo, siguen los gloriosos pasos de "Las cruces sobre el agua" y el único bloque de escritores que marcó la literatura ecuatoriana y ha sido referente internacional: el Grupo de Guayaquil y la Generación del 30 (Pablo Palacio incluído, para molestia de los amargados y resentidos con Guayaquil).
Así, el rito por la celebración de Muerte y Resurrección de Cristo, con sus misas y desfiles de niños, cambiado en los años de la adolescencia y la madurez, con el tiempo devino en una llamada de atención que nos decía las cosas cambian, todo cambia.
Y con los años mi vida cambió, así como los lugares en los que he vivido. Esos meses que corresponden a la estación de la lluvia (lo que con extrema libertad llamados en el trópico "el invierno") en mi vida se transformaron en meses de invierno, de nieve y frío, y de una primavera que nunca me ha convencido ni resultado atractiva (tiene mucho de inestable y sirve para que la gente se enferme, aunque beneficia a los demás seres vivos). Extrañamente, el verano que le sucede en el norte a esas dos estaciones, y que corresponde al verano seco y venteado de Guayaquil, a veces da paso a fuertes aunque breves aguaceros. En esos momentos, recuerdo con ansiedad la lluvia del trópico, esa que tanto estrago y marcas emocionales ha logrado en todos.
Hoy mismo es primavera en el norte, hace sol y el clima está templado. Existe, esta vez, la rutina del trabajo y la casa. Ha sido un gran cambio en el tiempo vivido. Ahora puedo ver en la distancia el pasado y sus detalles, los paseos por las calles de Guayaquil, acaso alguna rockola en un bar solitario, a mis amigos y parientes. Hoy es nuevamente el momento de espera porque junto con El Todopoderoso empezará el ciclo que nunca muere, aunque ajusta cuentas con todos.
Emparentada al fin de las vacaciones escolares, la Semana Santa era el aviso de que las cosas se reanudarían en un mes, que había que jugar más a prisa los partidos de índor, correr más, vivir más la vida porque había de empezar a cortar la indisciplina de quedarse en la calle, vagando con los amigos. O había que acomodar el horario porque algunos tenían que trabajar y estudiar a la vez, siendo niños o adolescentes. Y, en ese sentimiendo de cambio las lluvias eran menos frecuentes, hasta perderse en los primeros días del verano y el sol inaudito y entrañable del trópico, ya entrados en el ritmo de la vida escolar que iría de Mayo hasta Diciembre o los primeros días de Enero.
Algo similar ocurrió en la Católica, que nos dejaba libres los meses de Enero-Marzo en los cuales con mis amigos de adolescencia y alguno que otro de la universidad (Ramoncito, Jaime Franco, un serrano que alguna vez nos acompañó a beber unas cervezas a Jorge Martillo y a mí, pero que desapareció sin dejar rastro) salíamos a conquistar el mundo de esos años en nuestro Guayaquil querido.
Los días se Semana Santa eran también para irnos con el cholo Cepeda a algún pueblo playero o ciudad de la sierra: un viaje a Posorja, a la casa del cacho Bardales que, temprano en la mañana, a la voz de "descuenten hijueputas, a cargar agua" nos levantó de la cama. O eran días de, ya en la Católica, vagar por la ciudad vacía, tan hermosa y extraña, en un largo fin de semana en el cual se configuraba su otra geometría y emergía de ella la verdadera ciudad, esa que lejanamente aún se respira en las calles del norte (me refiero a la ciudad, a lo que hoy llaman Zona Rosa) pero existe siempre en "El Rincón de los Justos" y "Desde una oscura vigilia", dos libros maestros de Jorge Velasco que, según yo, siguen los gloriosos pasos de "Las cruces sobre el agua" y el único bloque de escritores que marcó la literatura ecuatoriana y ha sido referente internacional: el Grupo de Guayaquil y la Generación del 30 (Pablo Palacio incluído, para molestia de los amargados y resentidos con Guayaquil).
Así, el rito por la celebración de Muerte y Resurrección de Cristo, con sus misas y desfiles de niños, cambiado en los años de la adolescencia y la madurez, con el tiempo devino en una llamada de atención que nos decía las cosas cambian, todo cambia.
Y con los años mi vida cambió, así como los lugares en los que he vivido. Esos meses que corresponden a la estación de la lluvia (lo que con extrema libertad llamados en el trópico "el invierno") en mi vida se transformaron en meses de invierno, de nieve y frío, y de una primavera que nunca me ha convencido ni resultado atractiva (tiene mucho de inestable y sirve para que la gente se enferme, aunque beneficia a los demás seres vivos). Extrañamente, el verano que le sucede en el norte a esas dos estaciones, y que corresponde al verano seco y venteado de Guayaquil, a veces da paso a fuertes aunque breves aguaceros. En esos momentos, recuerdo con ansiedad la lluvia del trópico, esa que tanto estrago y marcas emocionales ha logrado en todos.
Hoy mismo es primavera en el norte, hace sol y el clima está templado. Existe, esta vez, la rutina del trabajo y la casa. Ha sido un gran cambio en el tiempo vivido. Ahora puedo ver en la distancia el pasado y sus detalles, los paseos por las calles de Guayaquil, acaso alguna rockola en un bar solitario, a mis amigos y parientes. Hoy es nuevamente el momento de espera porque junto con El Todopoderoso empezará el ciclo que nunca muere, aunque ajusta cuentas con todos.
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