tag:blogger.com,1999:blog-60849152195644308052024-03-09T17:41:34.274-08:00Literatura y otros asuntosFernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comBlogger224125tag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-65277849657109774762024-03-09T17:40:00.000-08:002024-03-09T17:40:39.892-08:00Una guerra que Ecuador sigue perdiendo<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiEtwqbk-29i6JUCQGMQaBVWaANTZXTm0t1AjO0OPVqaDiWpKohu8OGTxvOi51-ne376xxfTjR-cj9gv7bxB_9Fs7adi0JhXxdJGaNRL2YLCv-Z0myomVRLSdgg788ApDHcDvlmrRxFrCSXmcJGhM1oM8u4gG_3tDG_3UJVesCqyG97gNmQLlxxBaJqR3HJ" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="316" data-original-width="419" height="302" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiEtwqbk-29i6JUCQGMQaBVWaANTZXTm0t1AjO0OPVqaDiWpKohu8OGTxvOi51-ne376xxfTjR-cj9gv7bxB_9Fs7adi0JhXxdJGaNRL2YLCv-Z0myomVRLSdgg788ApDHcDvlmrRxFrCSXmcJGhM1oM8u4gG_3tDG_3UJVesCqyG97gNmQLlxxBaJqR3HJ=w400-h302" width="400" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div>Como muchos lo veían venir, mientras no haya una política global contra la delincuencia, ésta seguirá reinando en Guayaquil y Ecuador. El siempre aludido aunque "secreto" Plan Fénix de Noboa, ha servido de muy poco para la ciudadanía, que del escándalo y temor a la violencia ha pasado al silencio a aceptación de la extorsión y los secuestros. Sin embargo, ha permitido que los delincuentes prioricen otras plataformas de trabajo y recuperen por un lado lo que perdieron por otro. Veamos qué ha ocurrido en realidad luego del tan promocionado, y ya común, desfile de militares por las calles y carreteras del país, dizque que combatiendo el crimen.<p></p><p>Pasado el muy bien publicitado despliegue militar y las injustificadas, precipitadas y siempre ingenuas alabanzas a los que nunca han logrado nada, es hora de ver la realidad: entre Enero y Febrero en Guayaquil hubo más de 3.600 robos de autos. ¿Cómo se explica este número fantástico? Porque no se registró otro tipo de crímenes por el toque de queda y el repliegue de las fuerzas del bajo mundo. En ese mismo período, se esfumaron los líderes de las bandas, incluído el famoso "Fito", y aún no se sabe nada de ellos. Otro ratero y asesino de alto vuelo, Daniel Salcedo, hoy en una cárcel de Quito, en algún momento saldrá libre porque un juez, con la amenaza de firmar su boleta o velar a su familia, hará que el reino del crimen vuelva a sus altos niveles en Ecuador, además de recibir una alta suma de dinero, luego del susto.</p><p>¿Cómo esta pirueta rocambolesca ha sido posible? Porque en Ecuador esos dizque "combates contra la delincuencia" nunca son sostenibles, nunca terminan en nada ni bajan el crimen. Bajan una modalidad de ataque, pero nunca bajan el crimen en general. ¿Y Noboa? Noboa hizo dos cosas: logró aumentar el IVA al consumo, dizque para pagar por la seguridad (cosa que vemos ahora como falsa), ampliar su marco de relaciones internacionales (se va volviendo experto en diplomacia) y eliminar un decreto contra el nepotismo que él mismo creó y firmó en los primeros días de su presidencia. ¿Por qué lo hizo? Porque obviamente piensa meter a sus parientes y amigos por la puerta trasera y, si hay reclamo, esconderse bajo el manto de la legalidad, esa palabra que sirve para cometer las peores cosas en Ecuador.</p><p>¿Cambiará Ecuador algún día? ¿Volverá a ser el país de relativa tranquilidad que fue en los 70s, 90s? No. Por lo menos no mientras existan los carteles, que controlan más del 10% de la economía mexicana, mantienen la de Bolivia y Perú, y son ya fuerza legítima y económica en Colombia, país en donde sigue creyendo que sus ingresos vienen de la importación de café, flores y cantantes. No cambiará mientras hayan Correas que abren las puertas al narcotráfico internacional con la excusa de lucha anti-imperialista, mientras existan Noboas que dicen una cosa y hacen otra, o Topics que se auto promocionan como anti-crimen mientras, por detrás, hacen negocios con los criminales, como claramente se perfila desde la investigaciones de la Fiscalía de Ecuador, gracias a la única mujer valiente que da la cara en la lucha y, por ello, la tienen bajo amenaza de muerte: Diana Salazar Méndez.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjlaNLZMd-zh4oVRXtkQPZNqtuO9PEikrCRNzF_6TqLhDPdKq5qUFRnZHedQ1vwAE3tt8cBnqUpDQ3GQi1vCvgTKNYGpU0mUWqa-2SnC5nGbMPr3iZG4FoTFFrnCBAiBrdNV2f-eTH0oe1nDyexgT43qBDTW1p0n0YIAaBdyQCzEhY0nwE-2NXx27Rztfk6" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="384" data-original-width="618" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjlaNLZMd-zh4oVRXtkQPZNqtuO9PEikrCRNzF_6TqLhDPdKq5qUFRnZHedQ1vwAE3tt8cBnqUpDQ3GQi1vCvgTKNYGpU0mUWqa-2SnC5nGbMPr3iZG4FoTFFrnCBAiBrdNV2f-eTH0oe1nDyexgT43qBDTW1p0n0YIAaBdyQCzEhY0nwE-2NXx27Rztfk6=w400-h249" width="400" /></a></div><br />¿Se acabará el reino de los carteles y la delincuencia en Ecuador algún día? Para eso habrá mucho riesgo que correrse y no es evidente que haya más héroes que la Fiscal. Cómo hacerlo no es difícil, no se requiere de planes secretos ni propaganda sino de gente decidida y organizada, de un Bukele real (Noboa no le ha llegado ni a los tobillos) que no calcule ser presidente en un año ni andar viajando por todos lados, sacándose fotos y creyendo que tener a Ecuador con un "riesgo país" de 1.230 (solo menos peor que Argentina) es haber alcanzado el cielo. <p></p><p>Hacerlo significa limpiar las cortes y juzgados de los jueces, abogados y tinterillos que trabajan para los narcos y otros criminales, problema que, como es evidente en el mundo por el caso "Purga", existe desde los niveles más altos de la función judicial. Incluye también eliminar a los miembros de la fuerza pública que siguen trabajando (y son miles) para los mismo malhechores, desde la policía y SNAI hasta los militares y fuerzas armadas en general. Una política más global para destruir a las organizaciones criminales significa, además, sacar de sus curules a los congresistas de pandillas que se colaron gracias al correísmo y al social-cristianismo (ser de izquierda o de derecha nunca fue un obstáculo para el reclutamiento de políticos, al final gente sin bandera) y construir mega cárceles en las que se prime la seguridad de la ciudadanía, no el confort de los presos o la aprobación de las familias de los criminales, como es la última moda. </p><p>Mientras eso no ocurra, a prepararse nomás para los cambios de rutina de los delincuentes. Hoy es extorsión y secuestro, mañana volverán los robos y las muertes. Así ocurre con un presidente de cartón en un gobierno de cartón.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjzthUWqlJp5H9XkyIDgegc8RgFbkS63E5kACV-nLm1Pv3XtL5vuGbVyNXLVDIin-4qr4-zcax3RcwxaObfEk357pnkleejrd_vuxv3T_a84Ltu-YGub_X3T5yihhHs5Z8WnD3fk0IKF_60fpRjjBvfuL4olOY69_cnTRUd3KWpIQrCvCbvjV9mmuJf-PFB" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="389" data-original-width="459" height="339" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjzthUWqlJp5H9XkyIDgegc8RgFbkS63E5kACV-nLm1Pv3XtL5vuGbVyNXLVDIin-4qr4-zcax3RcwxaObfEk357pnkleejrd_vuxv3T_a84Ltu-YGub_X3T5yihhHs5Z8WnD3fk0IKF_60fpRjjBvfuL4olOY69_cnTRUd3KWpIQrCvCbvjV9mmuJf-PFB=w400-h339" width="400" /></a></div><br /><br /><p></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-19223665668358088082024-01-24T17:34:00.000-08:002024-01-24T17:34:01.150-08:00Ecuador: Una guerra que recién empieza<p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkaXLDCkB91lxl0dZTE_6fOnU-IqYJFgidZ8sfdT-wfN8NqnU-NhZr_BMdSEcbfwB60kqbs1XEonwi-chAT6qUlEJmBIvFgnVE9HDGkE7uE1Trn6eiBaIp_djugYf1qbMKTepUIChmlRQalioibBeVyd9GEEiDMyUIoJ8KgfjV_YYttnyinKfLRy2PSSvS/s1296/nobo.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="700" data-original-width="1296" height="216" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkaXLDCkB91lxl0dZTE_6fOnU-IqYJFgidZ8sfdT-wfN8NqnU-NhZr_BMdSEcbfwB60kqbs1XEonwi-chAT6qUlEJmBIvFgnVE9HDGkE7uE1Trn6eiBaIp_djugYf1qbMKTepUIChmlRQalioibBeVyd9GEEiDMyUIoJ8KgfjV_YYttnyinKfLRy2PSSvS/w400-h216/nobo.webp" width="400" /></a></div><br /><p>De la impunidad ya aceptada para dar con los culpables del asesinato de Villavicencio o de saber quiénes estuvieron detrás de la toma de <i>TC Televisión</i> a manos de unos pandilleros (a la postre empleados del Cartel de Sinaloa o del Cartel Jalisco Nueva Generación), Ecuador hoy recién entra a su etapa de adultez estatal vías violencia contra el crimen internacional: Los militares están en las calles asumiendo un desafío para el que no estaban preparados y la policía, esa semi-aliada de la ilegalidad y el abuso diario, los sigue callada.</p><p>En las presentes circunstancias, el joven presidente Noboa se convierte poco a poco -y a pesar de la oposición o sus propios juegos para favorecer a su clase social- es un líder que los ecuatorianos empiezan a conocer, respetar y apoyar. Es una noticia feliz porque demuestra que la derecha ecuatoriana es aún capaz de producir cuadros políticos dignos, formados, informados e inteligentes (algo así como lo que vemos en el ideal Bukele en El Salvador y el llamativo Milei en Argentina) que quieren forjar una vida digna para todos. </p><p>En las presentes circunstancias, el ejército ecuatoriano -cuyo rol siempre fue visto como negativo por estar a favor de las élites y las dictaduras- puede escribir una página de gloria con el apoyo del pueblo porque defiende, como institución, a ese pueblo frente a un enemigo que quiere llevarse a todo un país, una mafia internacional y crimen organizado, que es una peste, una maldición justamente llamada <i>terrorista</i>. </p><p>Las Fuerzas Armadas de Ecuador, que no estaban preparadas para el desafío, van aprendiendo en la marcha cómo pelear contra un enemigo que no sigue sus formalidades y puede engañarlos de muchas maneras: tácticas, objetivos, inhibición de fuerza o concesión. Ha sorprendido, por ejemplo, el empeño militar en transformar asesinos y peligrosos delincuentes en patriotas: los hacen limpiar sus celdas, los visten, los hacen cantar el himno (cosa reservada en El Salvador solo a presos de baja peligrosidad) y a escuchar canciones militares y los retan como madres devotas. Ya tenemos delincuentes patriotas. Mientras el trabajo del ejército es muy encomendable, hay que señalar que ni siquiera el 1% del del crimen organizado ha sido aprehendido. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEitEmskNIok2enFIQYqRXfDO-E1YK6SpaqiYjGqT4II8fj4haUsa0sDCxtzlzyHtoSG1uFLadl1h0g_HJWaQzh8PpQn5v4YjrS6nIzqqQ37IofOcCcglfJpHdOCvDNaixmG4g14bHS2Yv4rmdn6IhnC9GB2fY_-9bTT68c6HwFSDh8OEGZCdVDRXbMGVPaP/s259/rica.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="194" data-original-width="259" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEitEmskNIok2enFIQYqRXfDO-E1YK6SpaqiYjGqT4II8fj4haUsa0sDCxtzlzyHtoSG1uFLadl1h0g_HJWaQzh8PpQn5v4YjrS6nIzqqQ37IofOcCcglfJpHdOCvDNaixmG4g14bHS2Yv4rmdn6IhnC9GB2fY_-9bTT68c6HwFSDh8OEGZCdVDRXbMGVPaP/w400-h300/rica.jpeg" width="400" /></a></div><p>¿Cuál será el destino final? Difícil saber o predecir, sobre todo porque el trabajo de los militares depende de jueces civiles altamente corruptos, desde hace mucho infiltrados por los narcos. Entre una historia militar que nunca ha sido escrita ni realzada y cuyas fuentes son secreto nacional (tal es el cruel destino de los héroes del 41, del Cenepa y Tiwinza), las semanas que vienen decidirán el destino de Ecuador: ¿será un país entregado a los narcotraficantes, al caos político y al oportunismo individual, o logrará pujar y salir del túnel en que se encuentra?</p><p>Los gringos, tan expertos en asuntos internacionales, han percibido con toda claridad lo grave del asunto. Por eso su apuro en apoyar el gobierno de Noboa: el escandaloso hallazgo de más de 20 toneladas ya embaladas, listas para el envío a Europa, en una bodega cerca de Vinces, cuyo valor pasa los mil millones de dólares, habla de una red bien montada que usa aerolíneas, hacendados, ingenieros, campesinos y quién sabe quiénes más. Esa inversión es muy grande para que los carteles permitan que las Fuerzas Armadas y Noboa la arruinen. Por eso, la guerra en Ecuador recién comienza.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfJSFgTo1GHJOK4t-scAdqBsY7uqNQYCc2-0vbXD2JvHqXhttVFiDPdqpte0nNcjxM_GPXWl1sP2eILFUSmJAQRPyhCPtVy1AdvEv2QV_gK9GK02AxA6iu570wzft3us_9HmGBrCmhcI8_G9w8nF4BowFA4uvgKtHGIR2zUM8bmWNXxCd56mIVJrPl8kYa/s700/chiqui.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="402" data-original-width="700" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfJSFgTo1GHJOK4t-scAdqBsY7uqNQYCc2-0vbXD2JvHqXhttVFiDPdqpte0nNcjxM_GPXWl1sP2eILFUSmJAQRPyhCPtVy1AdvEv2QV_gK9GK02AxA6iu570wzft3us_9HmGBrCmhcI8_G9w8nF4BowFA4uvgKtHGIR2zUM8bmWNXxCd56mIVJrPl8kYa/w400-h230/chiqui.jpeg" width="400" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><br /></div><br /><br /></div><br /><br /><p></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-73792026461319090362023-10-03T08:33:00.002-07:002023-10-07T12:34:35.509-07:00Impunidad, encierro y nuevas elecciones<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhUMFGlahs8Kjc4KzGhPO9xYXIsoZi9vEW8ZsFb0v14-IT7Z4cN2doSrXT9y5eYwLt3S9cC5aqkvNVlUMOIiCBPbpaBPJ5dITtLvnT1qS2Gk4-PhnnwANXx1y90g_8BXKMSrwjk_RVaw7-dlsJZkaQpb8e5_8s2Nze3xNsXjSY8tpZbIVYynUM0CC4bGa0w" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="195" data-original-width="258" height="303" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhUMFGlahs8Kjc4KzGhPO9xYXIsoZi9vEW8ZsFb0v14-IT7Z4cN2doSrXT9y5eYwLt3S9cC5aqkvNVlUMOIiCBPbpaBPJ5dITtLvnT1qS2Gk4-PhnnwANXx1y90g_8BXKMSrwjk_RVaw7-dlsJZkaQpb8e5_8s2Nze3xNsXjSY8tpZbIVYynUM0CC4bGa0w=w400-h303" width="400" /></a></div><br />El asesinato de Villavicencio quedó en nada: habiendo detenido el mismo día del crimen a los presuntos asesinos, todo se volvió chismes, largas y ocultamiento de noticias. Inclusive los sacan en televisión y se asume que los autores intelectuales son gente muy poderosa que puede terminar con la vida de cualquiera. A los pocos ideas toma cuerpo la idea de que quienes mataron al denunciólogo fueron todos y nadie. Villavicencio acusó a todos y todos lo acusaron a él, por eso no es alocado pensar que él también tenía sus trapos sucios, como es costumbre en la vida diaria de Ecuador, un país regalado a los Carteles de la droga por Rafael Correa y los que lo sucedieron, incluyendo a Lasso.<p></p><p>Extrañamente, en Colombia le dieron cobertura nacional al crimen y regaron la noticia de que ellos ya sabían quiénes habían ordenado el crimen, pues tres políticos ecuatorianos estaban en contacto telefónico con los criminales. Se anunció la llegada de una comisión del FBI al Ecuador, junto a una delegación policial de Colombia, dado que los sicarios eran de ese país, para ayudar a sus vecinos. ¿Qué pasó con esa visita? Nunca se supo. Para cerrar, el gobierno de Estados Unidos ofrece hoy 5 millones a cambio de información sobre los involucrados en el asesinato. ¿O sea, EEUU ya no tiene la influencia en los medios de seguridad que tenía antes? ¿Por qué?</p><p>Lo que ocurrió en los días siguientes fueron disputas y acusaciones intra familiares y partidistas de los buscaron aprovecharse del trabajo de Villavicencio. Pero del crimen mismo, de las investigaciones, nunca más se volvió a hablar. Pero con el burocratismo usual, los candidatos prometían formar comisiones y veedurías una vez llegados a la presidencia. Nada más. Tampoco dijeron ni publicaron nada los medios de comunicación. Como se dice en Ecuador: "Aquí no ha pasado nada".</p><p>Luego vinieron supuestos días casi tranquilos. Cabecillas criminales que fueron llevados de sus cómodas celdas a una de mayor seguridad, pero sus empleados les recordaron al país nuevamente que ellos son los que mandan: secuestraron a guías y policías en las cárceles y lograron que les devolvieran a sus jefes a las celdas originales. En ese país sin presidente ni gobierno que es Ecuador, tampoco nadie dijo nada por eso. Al mismo tiempo, en una especie de tácito pacto con la sociedad (las bandas hablaron de una tregua), se dejaron de publicar y comentar sus fechorías, los secuestros, la extorsión que imponen a los ciudadanos. Tanto como para decir "el crimen ha bajado". Hoy, en Ecuador se siguen viviendo días de encierro pues es una sociedad sitiada en la cual uno ya no se extraña de nada.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgmPdYf1GfvX4xmku8ZxP1_zkHPC3SO9AuwtW_s_jBTqIC1gwfAn2C4dVHplCJYfLG08jyKVoLiE70i0gTqEGDIq8BAYXAzJzbjAecC4Lh3sYPUy_Mzn2NrwiTNj-748iKqwMzIG_5bmqp0708CAzrL7U9-x8i78n6mnMBT21pTt9IC5yqNWzKOWNFr3gEu" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="168" data-original-width="300" height="224" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgmPdYf1GfvX4xmku8ZxP1_zkHPC3SO9AuwtW_s_jBTqIC1gwfAn2C4dVHplCJYfLG08jyKVoLiE70i0gTqEGDIq8BAYXAzJzbjAecC4Lh3sYPUy_Mzn2NrwiTNj-748iKqwMzIG_5bmqp0708CAzrL7U9-x8i78n6mnMBT21pTt9IC5yqNWzKOWNFr3gEu=w400-h224" width="400" /></a></div><br />Y ahora se vienen las elecciones presidenciales. Según sus declaraciones, funciones en cargos públicos y último debate, tenemos por un lado a un candidato relativamente nuevo que, a veces, parece despistado. El arrastra y hereda los serios vacíos éticos de su padre sobre evasión de impuestos, bajos salarios y liquidaciones a los trabajadores, por citar unos pocos. Por otro lado, tenemos una correista más, ideológica e intelectualmente poco sofisticada pero propensa a la verborrea y repetición de consignas. Nada substancial ni nuevo. Ese es el Ecuador que toca en los próximos meses: un poco más a la deriva, un poco más de lo mismo, encerrado en sus fronteras y sin pronta salida a la crisis de años.<div><p></p><p>Y, como para no terminar de sorprendernos, se evidencia que la delincuencia resulta ser algo que ninguno de los dos candidatos quiere resolver. Ellos solo quieren vender más armas y equipos (esa solución que nunca solucionó nada en 40 años) o darle carta blanca a los criminales bajo el manto de los derechos humanos y la victimizacion social o problemas en la rama judicial. De nada le sirve a América Latina ni a Ecuador tener el ejemplo de Bukele si no tienen la decisión y las manos limpias para cambiar las cosas. Daniel Noboa y Luisa González en asuntos de delincuencia solo van por el teatro, los desfiles, la propaganda. Blablablá. No están para otra cosa. A eso súmenle la repetición de los mismos errores de ambos bando políticos. </p><p>No hay más que decir.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjZKMK8W_BrX-eGmniE5n-MkKybwtxNHXMW_LN9XpNSpLtp91ejcGj--WNWUC61N4UM3766mHm0_G-p8GtNnHLR5oAbds6k6TqTZioYYjAP8djp6Aj5TtEVPbZXJOD0a1xXeSdE9Uq8QF2VpPgEa-gTdeP1cyowCBP1cBwBiVt-LUnGY3Khl6lp2z4yQQps" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="168" data-original-width="299" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjZKMK8W_BrX-eGmniE5n-MkKybwtxNHXMW_LN9XpNSpLtp91ejcGj--WNWUC61N4UM3766mHm0_G-p8GtNnHLR5oAbds6k6TqTZioYYjAP8djp6Aj5TtEVPbZXJOD0a1xXeSdE9Uq8QF2VpPgEa-gTdeP1cyowCBP1cBwBiVt-LUnGY3Khl6lp2z4yQQps=w400-h225" width="400" /></a></div><br />PD: A los pocos días de her escrito esta nota, se informa que los 6 sicarios colombianos implicados en el asesinato de Villavicencio, fueron ahorcados en la cárcel de Guayaquil. Para cubrir el hecho, los presos organizaron un motín. Para los que seguimos la dinámica del crimen en Guayaquil, esto era de esperarse. ¿Quién mató a Villavicencio? Todos y nadie. <br /><p></p><p><br /></p></div>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-743148458327399902023-08-17T14:02:00.005-07:002023-08-17T18:34:26.632-07:00¿Quién mató a Fernando Villavicencio?<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiIUKhFjOr0bibWI3PPXe3_6zLSgdVWlt9qufudFFRQtTKJ1H7n09rXTiuYqlDz1VvNJgQPnNA6zGTajwz0pVLXbVoPP1asqkEiqK4By5aekB35GSKzg-C9Yw63jNmdhP2vpjcXOQGzQYbI3KSTyV25kJ2O9f-fEFk-Raug70UCAvub5I-CQpkbRSkhHZ7Z" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="348" data-original-width="303" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiIUKhFjOr0bibWI3PPXe3_6zLSgdVWlt9qufudFFRQtTKJ1H7n09rXTiuYqlDz1VvNJgQPnNA6zGTajwz0pVLXbVoPP1asqkEiqK4By5aekB35GSKzg-C9Yw63jNmdhP2vpjcXOQGzQYbI3KSTyV25kJ2O9f-fEFk-Raug70UCAvub5I-CQpkbRSkhHZ7Z=w348-h400" width="348" /></a></div><p></p><p>Hace 10 días mataron a uno de los candidatos a la presidencia: el denunciólogo Fernando Villavicencio, quien a lo largo de su años vio crecer su fama en el sinnúmero de denuncias contra todos los que se encontraban haciendo negocios sucios, estafando al estado y a la gente. Por sus manos pasaron casos de empresarios, burócratas, pandillas de adinerados que usufruan desde tiempos coloniales el dinero de todos los ecuaotorianos, gente de nombres rimbombantes de peluconería y también delincuentes comunes, ex-pandilleros y ahora congresistas, etc.</p><p>Nadie escapó a sus denuncias: ni Correa, ni Nebot, ni Topic, ni Bucaram, ni Glass ni los Carteles mexicanos, ni los narcotraficantes locales, ni la policía nacional, ni los sicarios jefes de pandillas (Fito a la cabeza), nadie. Los rumores, sin embargo, dicen que él tampoco estaba con las manos limpias, ni su familia (un hermano con cuentas de millones). Así, entre su oficio basado en documentos (en Ecuador cualquiera forja documentos) y los chismes de siempre, de repente Villavicencio se vio atrapado en su labor por tener tantos enemigos. Y uno de ellos o varios o todos juntos lo mataron. Y eso beneficia a todos, en general. pero, en particular y puesto que era candidato a la presidencia, a los otros candidatos.</p><p>Su muerte es de novela triste, de caso policíaco no resuelto (otro más) en el que claramente se nota que está involucrada la policía, encargada de custodiarlo y que fue la que lo puso de tiro al blanco en una camioneta sin chofer, encerrado, para que le dispararan a quemarropa mientras ellos se tiraban al suelo (no abundo en otros detalles ya conocidos). Pero la policía es arma ejecutante, no el cerebro. Entonces, ¿quién planificó todo? ¿Para qué?</p><p>Villavicencio fue asesinado hace diez días el impacto en todos fue muy grave: desesperanza ttal, frustración, anonadamiento. Pero hoy parece que la gente ya se va olvidando, se va centrando en por quién votar, va pensando en cómo desquitarse de esa muerte y castigar a los que supone culpables. Entre estos, obviamente todos los acusados y mencionados antes y, a la vez, ninguno, pues no hay prueba dura de esa canallada. El que más ha hablado, de estos candidatos a la venganza personal, es Correa, quien inclusive ha acusado con nombre y apellido una ex-miembro de su propio gobierno (Paola Romo) y a un tal Carillo, sin olvidarse de la siempre culpable CIA. En silencio se encuentran Nebot y el mismo Topic, representante de la alianza socialcristiana-correismo (como en El Salvador, los supuestos opuestos se han aliado contra Bukele: la ultra-derechista ARENA y la marxista-leninista FMLN) quien vio subir un poco su candidatura luego del asesinato de Villavicencio.</p><p>En un afán de desquite popular, contra todo pronóstico, la delfin de Correa (que es el que sigue mandando entre su gente) ha visto bajar números a su favor, pero no tanto como para descontarla como finalista de la 1ra vuelta electoral (el otro sería Topic, también en negocios sucios con Correa y herederos). </p><p>Por la misma dinámica que sembró el caos post-asesinato, la candidatura de un joven Noboa ha comenzado a subir, y si no gana ahora lo hará luego porque es (por fin y gracias a Dios) una buena alternativa desde el centro-derecha, capaz de aglutinar a las grandes masas con su juventud, sencillez y sólido conocimiento del mundo económico y emoresarial. Una refrescante brisa luego de la profunda decadencia de los grupos políticos tradicionales con sus representantes de tercera categoría, como Moreno y Lasso.</p><p>Pero algo más ha ocurrido con el asesinato de Villavicencio: una tregua entre criminales que tiene visos de organización para atacar a la sociedad si su jefe (Fito) no es devuelto a su "celda" normal (un cuarto bien abastecido que parece habitación de hotel), la suspensión de la violencia diaria de ritmo agobiador al cual el país ya se estaba acostumbrando y, por lo tanto, el hecho de que la lucha contra la violencia delictiva que tiene al Ecuador en jaque desde hace años, haya pasado a segundo plano. Hoy mismo, en esa amnesia electoral que se vive siempre, poco se habla de ellos: Cuatro candidatos aparecen en una iglesia llevando la bandera del país al altar, escuchando misa y dándose abrazos de paz (Topic incluído, aunque ni siquiera cree en Dios; pero ya sabemos que un político es capaz de cualquier cosa por ganar una elección), otro aparece bailando salsa, otro cantando pasillos, la delfín de un coqueteo con un futbolista negro de Barcelona, otro riéndose de su apellido... Todos casi felices, como si nada malo pasara.</p><p>El dictador mexicano Porfirio Díaz dijo: "Pobre Mexico, tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos". Creo podríamos decir ahora: "Pobre Ecuador, tan lejos de Dios y tan cerca de los Carteles mexicanos".</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiBt952SE3EmN55fqTtYze3hG6dy3hby3jr63VlaoVViv6NKv-9MuRiocZ8evCKtEwCpiMsLXFzncCk1qkFynePQPQx75sF9EKg-9wn_7QZa4RryrQs93z_2tTxEY16aXPqhXARt-Shl6rTSt0hNHDTgcyIA1BJmdav4hXrRJzt6ERbsMRVxSyE3oHgS7V1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="321" data-original-width="601" height="214" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiBt952SE3EmN55fqTtYze3hG6dy3hby3jr63VlaoVViv6NKv-9MuRiocZ8evCKtEwCpiMsLXFzncCk1qkFynePQPQx75sF9EKg-9wn_7QZa4RryrQs93z_2tTxEY16aXPqhXARt-Shl6rTSt0hNHDTgcyIA1BJmdav4hXrRJzt6ERbsMRVxSyE3oHgS7V1=w400-h214" width="400" /></a></div><br />¿Quién mató a Fernando Villavicencio? Todos los que él denunció, la fantasía de lo que en Ecuador llaman "democracia", el dinero, los que lo querían, los indiferentes y la truculenta dinámica en la que vivimos diariamente en el sur.<div><br /></div><div>pd: Brama Kumaris, luego de leer este texto, me escribe: "Faltó la balacera que le acaban de dar a Daniel Noboa en Durán....suerte no lo mataron...justo la esperanza que mencionas casi se va al otro mundo y nos quedamos sin esperanza pues". </div><div><br /></div><div>Pero no fue contra él, fue balacera nomás, entre otros. O sea, no hay problema, no hay de qué preocuparse.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /></div>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-27049322940397685862023-07-06T12:26:00.002-07:002023-07-06T12:26:37.159-07:00Stanislavski, el novelista y el teórico (III)<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpTNPsgCh58xe1YJKOSkfKz8tpmvLc8Nkz2i4IZ8bYdrXlOzl3B3oF4Iq-DBlXKOaGxnYDM6qxEz8ho2Y-uIXfqAo_IS766soPfvqgbq4KG9kMyCUFl8DMdunjUlqmVJlAX4HbDmq7jO4GtIn7lF1sG7J7YplHz8gj80_UbNKLNGhc0dVGgMPk1k_eAo-o/s635/building.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="635" data-original-width="400" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpTNPsgCh58xe1YJKOSkfKz8tpmvLc8Nkz2i4IZ8bYdrXlOzl3B3oF4Iq-DBlXKOaGxnYDM6qxEz8ho2Y-uIXfqAo_IS766soPfvqgbq4KG9kMyCUFl8DMdunjUlqmVJlAX4HbDmq7jO4GtIn7lF1sG7J7YplHz8gj80_UbNKLNGhc0dVGgMPk1k_eAo-o/w253-h400/building.jpg" width="253" /></a></div><p>En su libro "Creando un personaje", el gran director ruso nos da en realidad una novela cuyos personajes son actores de teatro. Narrada en tercera persona por uno de ellos, quien a veces participa y otras solo escucha por accidente un diálogo, la obra nos lleva en cortos capítulos por los aspectos más importantes de los ensayos y la función del actor y el uso de técnicas apropiadas para hacer bien su trabajo. Incluyo aquí el enlace de la edición al español (1991; la inglesa, que es la que he manejado es de 1949):</p><p>https://www.scribd.com/document/376933217/Constantin-Stanislavski-Creando-Un-Personaje-pdf</p><p>Es un libro ejemplar, sencillo, didáctico y entretenido. Obra de consulta para actores, autores y directores...hasta donde les llegue el compromiso y el interés. No es un libro mágico que garantiza talento para todos, pero sí guía para los que lo tienen, y mucha discpilina para los que no lo tienen. Sin embargo, quizá por suerte, el conocimiento que riega no es exclusivo de estas páginas, pues los manuscritos y transcripciones se realizaron en varios tiempos; y es fácil notar que una edición cambia de título y contenido, según la editorial, los traductores y los fines. Así que Stanislavski se encuentra literalmente regado en toda su obra. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0xyPldKJdCEcl7TDNdafSdRe7SdE9YgNcm9Ay3H_H2lG06Az7ymFPc1L8LRDNzihV-8SxYFbILNzxRVxnaXriXpPvnP31AlGCwuri55NAtyoxFbuqnCfswVgwRRjFuRDjzDrgR6VCK_VfcIdrmWGcjxU7Q_6EsU2KLoaVbVPy7jDli3OaCD47r0mKkryY/s278/stanis%201.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="278" data-original-width="181" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0xyPldKJdCEcl7TDNdafSdRe7SdE9YgNcm9Ay3H_H2lG06Az7ymFPc1L8LRDNzihV-8SxYFbILNzxRVxnaXriXpPvnP31AlGCwuri55NAtyoxFbuqnCfswVgwRRjFuRDjzDrgR6VCK_VfcIdrmWGcjxU7Q_6EsU2KLoaVbVPy7jDli3OaCD47r0mKkryY/w260-h400/stanis%201.jpeg" width="260" /></a></div><br /><p>Estos bondadosos rasgos de calidad, sin embargo, no son la única muestra expresiva escrita del ruso. A ella hay que juntar la que revela al ensayista en primera persona con total dominio informativo de su tema: "Stanislavski on the Art of the Stage" (1961 en la edición inglesa). Aquí hay mucha sabiduría, repertorio estructurado, archivo temático y mentalidad enciclopédica. El tono es conversacional pero serio, sin llegar a ser aburrido. Los abundantes secretos del oficio corresponden a un hombre maduro que se acerca al final de su vida (profesional al menos) y sabe lo que dice. Se puede catalogar este libro de manual con aroma autobiográfico. Todos los aspectos del teatro aparecen concentrados en sus páginas: el actor, el escenario, el teatro (el dojo de aprendizaje actoril), el público, la obra como vida, la necesidad de sentirla, los detalles de la actuación y tanto más.</p><p>Estos días de terrible calor, me he aventurado a estas páginas por curiosidad, acaso responsabilidad académica, pero confieso que he vuelto a los 70s y a ver el inicio de mi generación desde otro ángulo. La gente que conocí aún hace teatro, pero el teatro que otros hacen no se compara con lo que ellos hicieron. Aún no hay otra obra mejor que la popular "Como e' la cosa", ni más tierna y delicada adapatación de "Cosas de mi tierra" que la hecha por El Jugalr. Nada como el gustillo aristocrático que a veces los animaba y nos daba obras picarescas de muy buen nivel y humor. </p><p>He visto hoy en algunos viejos y nuevos teatreros el apego extremo al gusto popular pero en detrimento de su propio talento, pues se quedaron -a petición del público- en un solo personaje, muchas veces vulgar, de mal gusto, superficial, repetitivo. Y son esos los que rellenan los programas de televisión desde hace muchos años. Aparecn en fotos haciendo muecas y, bueno, hay que tomarlos en serio porque el teatro es mueca (aunque más parece que su mueca es el teatro). </p><p>Me he aventurado, digo, por razones académicas: saber más del mundo del integrante mayor del cine: el personaje. Los demás, técnicas y libreto, serán quizá motivo de otro comentario, más adelante. Por ahora, esto es suficiente. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmw3hKecJ4SFXpOUxnNNpN-7U5T8uo533CxF7Sj5Iu7ETmKMq-BtzoV36LblJRyeOFfH7n2D40ZbLIQJoTIbqLZId3T6GzAeXkfaYI7JrRsmxpCAR4vYU6PP3gtcvbSbE6oM7hYI9virMQiSQRxx-FgvFD8zf88bWjmwBxVNwnf02nDZO-mhs6hjixmygx/s700/el%20jugalr.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="469" data-original-width="700" height="268" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmw3hKecJ4SFXpOUxnNNpN-7U5T8uo533CxF7Sj5Iu7ETmKMq-BtzoV36LblJRyeOFfH7n2D40ZbLIQJoTIbqLZId3T6GzAeXkfaYI7JrRsmxpCAR4vYU6PP3gtcvbSbE6oM7hYI9virMQiSQRxx-FgvFD8zf88bWjmwBxVNwnf02nDZO-mhs6hjixmygx/w400-h268/el%20jugalr.jpeg" width="400" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-56253999375337396912023-07-05T12:28:00.003-07:002023-07-05T12:28:41.905-07:00Del tablado a dos comedias románticas: Memorial de Stanislavski (II) <p><span style="font-size: medium;">Dos son los tonos de escritura del dramaturgo ruso: el sistemático y el informal, pero uno solo es su objetivo: crear un método de trabajo, un sistema que permita que los actores sean lo mejor. Este afán transcurre en un segudo período del contexto teatral que vivió, el que él llama "realismo espiritual" luego del "realismo material". Si el libro "Creating a Role" navega en ambas aguas, su "Stanislasvki's Legacy. Comments on Some Aspects of an Actor's Art and Life" es un suma de fragmentos sueltos y ensayos que, de todos modos, incluyen información expuesta de manera muy didáctica para que llegue a un público más amplio.</span></p><p><span style="font-size: medium;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: medium;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg5TUdn6eba41MpGOSlFiLStmfVf1_5ga8icNDrafiLNYdpCR8zT_S8dBA6Ivt3DHtU6Vgsu2y0EwU2qsKQW_Mqe2fvuHlLHjnrbEohS3C9uXkt0pwZV27Bpyyv1cFd7rDcfY2hQIPSKsOhsQwbTdSdWqiTfEhkRB-PER0oj-i9crz9aIwxEeyzx5stmpAg/s440/stanis%201.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="440" data-original-width="300" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg5TUdn6eba41MpGOSlFiLStmfVf1_5ga8icNDrafiLNYdpCR8zT_S8dBA6Ivt3DHtU6Vgsu2y0EwU2qsKQW_Mqe2fvuHlLHjnrbEohS3C9uXkt0pwZV27Bpyyv1cFd7rDcfY2hQIPSKsOhsQwbTdSdWqiTfEhkRB-PER0oj-i9crz9aIwxEeyzx5stmpAg/s320/stanis%201.jpg" width="218" /></a></span></div><span style="font-size: medium;"><br /> <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6cPXrCSBw0wTbtXJffe4VoAzfLUkxBd7InwxB2TW2CwGnVVtq8JA1vEvrH4v_YYpDIlPbajhXSHFH8E_hd7-Ucf2iPNdMEbcHBXYTkVwX2UDQ0Zv5mvyZqdrwY0Wd8CE-AXq0Ht5SUfiI1I9aWjCsQdZ7_i4Yxc6sBBFQMB6QKH9qg8BnvGxa0H0pQCSE/s425/stanis%202.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="425" data-original-width="300" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6cPXrCSBw0wTbtXJffe4VoAzfLUkxBd7InwxB2TW2CwGnVVtq8JA1vEvrH4v_YYpDIlPbajhXSHFH8E_hd7-Ucf2iPNdMEbcHBXYTkVwX2UDQ0Zv5mvyZqdrwY0Wd8CE-AXq0Ht5SUfiI1I9aWjCsQdZ7_i4Yxc6sBBFQMB6QKH9qg8BnvGxa0H0pQCSE/s320/stanis%202.jpg" width="226" /></a></div><br /></span><p></p><p><span style="font-size: medium;">Leyéndolos y cotejándolos con lo que me ha tocado vivir, puedo concluir que la universalidad del teatro es tal que las mismas preocupaciones registradas a fines del siglo XIX en Rusia eran muy parecidas a las que ocurrieron en Guayaquil en los 70s. Por ejemplo, el ferviente mundo teatrero que logró articular el argentino Ernesto Suárez, fundador del inolvidable <i>El Juglar, </i>es comparable al mundo del tablado que se describe en los libros mencionados. No importa que el director ruso se haya codeado con Tolstoi, Gorki o Chejov mientras que Ernesto tuvo que arrancar de cero, recogiendo periódicos y botellas con estudiantes secundarios para financiar obras y una sala. El amor por la profesión, la ilusión, el esmero, ese espíritu juvenil, estuvo en ambos tiempos y geografías.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Stanislasvi insiste en la inmersión total de los actores en la obra, su personaje, lo que ven y sienten el director y el autor. Esto ha dado lugar a cierta confusión entre "método de actuación" y formación de un canon de actuación: el ruso abrazó todo tipo de técnicas y las fue depurando, reciclando, esbozando. Es decir, si bien es cierto que hay textos con información específica de qué hacer y cómo hacerlo, hay también en ellos un llamado a ser observador de lo que ocurre, no simple repetidor de técnicas. Esa diferencia marca a un buen actor. Hoy, por ejemplo, vemos los medios saturados de gente que se lanza al tablado o a la pantalla de TikTok sin haber cumplido con los requisitos para hacerlo. Es algo que ocurre también con los malos cantantes: creen que las notas musicales son lo mismo que la melodía de la canción y, por eso, cuando se encuentran con especialistas, los eliminan, pues cantan solo en una nota, y generalmente sin "colores".</span></p><p><span style="font-size: medium;">El problema de la actuación y del personaje representado es un asunto muy complejo. Va desde cómo hablar y pararse en el escenario, qué hacer con las manos, qué gestos utilizar y cómo vestirse hasta tener una idea precisa de lo que quiere el personaje. Para los errores elementales basta ver cualquier video clip de la televisión local, para lo segundo hay que interrogarse sobre cuáles son los objetivos del personaje de cualquier película que a uno le guste. Ilustro con dos ejemplos:</span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjHYtoW3OIuoAH9qRQ_nl4wQJXRyaqNDpweY0-ERkrWYRUNVMe4CmnLPL3DsQ_cjCMF5sjmgMRGgjGa3Q33SLeCa0-_8vWIyQTMv-1-92z4VPKz5BW-yWrcKzJRm-hBhpTlcEAbSigxWcsZ1t437PKtcc_hUlaPuLXQfmFVxGmPI4Aa7mmZshPbWhb9C71Y/s1024/joe.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="512" data-original-width="1024" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjHYtoW3OIuoAH9qRQ_nl4wQJXRyaqNDpweY0-ERkrWYRUNVMe4CmnLPL3DsQ_cjCMF5sjmgMRGgjGa3Q33SLeCa0-_8vWIyQTMv-1-92z4VPKz5BW-yWrcKzJRm-hBhpTlcEAbSigxWcsZ1t437PKtcc_hUlaPuLXQfmFVxGmPI4Aa7mmZshPbWhb9C71Y/w400-h200/joe.jpeg" width="400" /></a></div><p></p><p><span style="font-size: medium;">El primero es la película "Meet Joe Black" con Anthony Hopkins y Brad Pitt. El británico es un millonario con pocos días de vida. El otro, La Muerte corporeizada. La obra es en gran parte una llamada de atención (hasta donde es posible hacerlo en una comedia romática) sobre el sentido de la vida. Me pregunto: ¿Cuál es el objetivo de La Muerte al estar en la tierra? Los esfuerzos por contestar esta pregunta son inconsistentes e insatisfactorios, pues La Muerte ha cruzado el umbral de la razón y la lógica. Mientras la actuación y las historias subyacentes la llevan de manera fresca y agradable, convincente, me queda la duda de esa exposición de ignorancia y curiosidad adolescente de La Muerte. Justamente lo contrario de lo que ocurre en "El séptimo sello" de Bergman que es un diálogo entre La Muerte y el caballero medieval. Esta falta de respuesta, cotejada con lo que pide Stanislasvki (que el actor sepa qué es lo que quiere el personaje) me hace dudar del logro actorial de Brad Pitt. No por el actor (ha demostrado hace mucho lo excelente que es) sino por la falta de coherencia del libreto, acaso su misma imposibilidad de negociación con las vistudes del actor. </span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjxZnZ1yTE7rHPCvHVkVmOJB4rRfBYc_MybchewSUy-8tjQjXI305pTGzdW79ZHEphGyoRRTuP0Soa6dZX6TvPlmffqIprSkS3o4ggz6Z4ApvYIOSxwWEMN3YVdhsml66hS5KA4PjXyPJtgglWRfDzVL21R2RcXgYyOBXCvCPHH0kv6i70XBMzhUQl_xfkn/s1366/tana.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1366" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjxZnZ1yTE7rHPCvHVkVmOJB4rRfBYc_MybchewSUy-8tjQjXI305pTGzdW79ZHEphGyoRRTuP0Soa6dZX6TvPlmffqIprSkS3o4ggz6Z4ApvYIOSxwWEMN3YVdhsml66hS5KA4PjXyPJtgglWRfDzVL21R2RcXgYyOBXCvCPHH0kv6i70XBMzhUQl_xfkn/w400-h225/tana.jpg" width="400" /></a></div><br /><span style="font-size: medium;">El segundo ejemplo es una comedia argentina que me hace dudar de si el actor sabe realmente cuál es el objetivo de su personaje, "qué es lo que quiere en la vida" por decirlo de manera familiar: "Busco novio para mi mujer" con la gran Valeria Bertuccelli y Adrián Suar. El argumento es corto y fácil: crisis de matrimonio. El lenguaje y el universo humano de Tana (personaje de Bertuccelli) es el que lleva al público de la mano: es desatada para hablar lo que piensa, siempre y en cualquier lugar. Aunque, no realmente. Ella es así en público y es rechazada por todos por obvias razones. Sin embargo, cuando la gente solo la oye hablar por radio, Tana resulta llamativa, interesante, crea expectativas y hasta se enamoran de ella. O sea, no es que la gente no la acepta como es (nadie acepta a gente grosera) sino que ella no participa de normas básicas de relaciones. ¿Por qué? ¿Qué quiere entonces? Luego de que Tana encuentra un trabajo, se vuelve agradable al trato y resulta encantadora para un pretendiente, un amante y su esposo, de quien al final no se divorcia y vuelve a iniciar un diálogo de dos adultos que se encuentran por primera vez. Pero no me queda claro qué mismo es lo que Tana quería lograr en su vida ni tampoco si su festiva agresividad verbal formará parte de su repertorio cuando esté con otras personas, como antes. </span><p></p><p><span style="font-size: medium;">En mi lectura, estos dos ejemplos exponen los desafíos del actor que ya codificaba Stanislavski. Esto no quiere decir que la obra final (teatro o película, acaso ópera) no va a gustar (muy por el contrario, como en estos dos ejemplos) sino que hay personajes que no tienen bien elaborado su universo íntimo (falencia del director o autore) y hay actores que tienen un trabajo muy arduo al tratar de ser esos personajes. Pero esta falta de justicia es la misma que enfrenta cualquier artista cuando se enfrenta a su obra y la considera "producto acabado" en vez de aceptar las ausencias como parte del juego mimético de representación de la vida. </span></p><p><span style="font-size: medium;"><br /></span></p><p><span style="font-size: medium;"> </span></p><p><span style="font-size: medium;"> </span></p><p><span style="font-size: medium;"><br /></span></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-25845112241685857922023-07-04T10:53:00.003-07:002023-07-05T11:17:30.017-07:00Teatro: El delirante mundo de Konstantin Stanislavski (I)<p><span style="font-size: medium;"><br /></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjg0T-zDr4FfUKPnV8mxfFhRTMzG5v-58c8izg2vdIowpeXcPiUrd9hw8DvrJaRUf-lDIlcI9f9gxXN29dnovFFfYF1Mv8ZKtz3RbinEIwU0ckYkfARyjGFI3qgfQqRrvohoSER6uJLHsqtNUqSLhM_FFx2IRt_8LoMAq1MDOl-XomysYfYKvWsruBhw3Xc/s413/413px-Konstantin_Stanislavski_in_1938.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="329" data-original-width="413" height="255" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjg0T-zDr4FfUKPnV8mxfFhRTMzG5v-58c8izg2vdIowpeXcPiUrd9hw8DvrJaRUf-lDIlcI9f9gxXN29dnovFFfYF1Mv8ZKtz3RbinEIwU0ckYkfARyjGFI3qgfQqRrvohoSER6uJLHsqtNUqSLhM_FFx2IRt_8LoMAq1MDOl-XomysYfYKvWsruBhw3Xc/s320/413px-Konstantin_Stanislavski_in_1938.jpg" width="320" /></a></div><p></p><p><span style="font-size: medium;">Ahora que me he adentrado en el mundo del cine (pues es un nuevo camino que espero explorar de la manera más responsable) y visto algunos de sus aspectos técnicos, propios del lenguaje de la imagen en movimiento, me gustaría comentar el del actor. La historia es como sigue.</span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/SZIisnBhQSs" width="320" youtube-src-id="SZIisnBhQSs"></iframe></div><span style="font-size: medium;"><br /></span><p></p><p><span style="font-size: medium;">Una de mis antiguas deudas es con el teatro, el cual tanto me dio como espectador adolescente. En los 70s vi grupos locales y nacionales, hice amistad con colegiales que se lanzaban a la tarima y leí lo poco que me cayó en las manos: Shakespeare (aún guardo sus dos volúmenes de la Grolier Jackson). Al poco tiempo, </span><span style="font-size: medium;"><span>Ibsen, O'Neil y Pirandello</span><span>, además de guiones de películas, de los cuales recuerdo con afecto "El séptimo sello" de Bergman, acaso algo de Strindberg. Y mucho después, todo lo que pude del </span><i>Siglo de Oro</i><span> español, sobre todo las incontables piezas de Lope de Vega. </span></span></p><p><span style="font-size: medium;">Pero el teatro real, para mí, estaba en las grandes películas que presentaban en festivales o sesiones clandestinas de algún centro cultural. Ahí vi películas de Bergman, la "Nueva ola" francesa y neorrealistas italianos y me abrieron a otro mundo. Esas imágenes planas eran la vida interna lanzada al mundo. Lo mío era una rústica, vital y alegre manera de entender el teatro, el cine y su relación con la literatura, por supuesto, pero era "mi manera" y eso bastaba.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Leer con ansias es vivir. Vivir la literatura, el personaje principal, es cambiar de vida. Es ser el otro y el siempre deseado. Todos los lectores apasionados por lo que leen son actores con derecho propio. Y eso nos emparenta con actores del teatro y del cine (solo los grandes actores de cine son grandes actores de teatro). Es un derecho humano democratizado, una liberación de la imaginación que, como muchos saben, siempre tiene notables consecuencias.</span></p><p><span style="font-size: medium;">En ese gozo de la imagen que es el teatro filmado, o sea el cine, encontramos como una de sus bases lo que llamamos "actuación" o "performance". Es decir, cuán convincentes han sido los actores en hacernos creer que los personajes del celuloide son reales, los podemos comprender, sabemos que existen. Ese puente de convencimiento, esa virtud de comunicar "lo real" de la obra, es la actuación misma. Y uno de sus mejores formuladores, ciertamente el más famoso de ellos en Estados Unidos, es el ruso Konstantin Stanislavski (1863-1938).</span></p><p><span style="font-size: medium;">La vida de este arduo y talentoso trabajador merece un capítulo aparte en la nunca escrita "Historia de la Revolución Rusa y las élites intelectuales", pues de su origen aristocrático dio un salto directo a la concentración total en el teatro y su estructuración como empresa de trabajo, proceso y resultado ("El método" como muchos lo llaman). Su búsqueda fue profesional, espiritual y filosófica. Por ello, rebasa inmediatamente el cerco de cualquier hermenéutica ortodoxa. Stanislavski está mucho más allá. Su mundo es el mundo de Bajtin, Chejov, Bulgakov; es una filología humana que tiene visos de psicoanálisis y terapia en acción. Veamos esto.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Su trilogía reflexiva contiene los libros: "Preparación del actor", "La construcción de un personaje" y "Creando un papel". En el tercero encontramos dos capítulos parelelos a lo que deben hacer los literatos: 1- Estudiar la obra (entenderla), 2- Sentirla (emocionalmente). El tercer capítulo es propiamente "vivir la obra", como actores ya, o lectores aventurados a ser personajes (como en el milenio pasado yo jugué a ser Horacio Oliveira y Franz Kafka) que necesariamente deben imponer su sello individual, la marca de su talento (imaginar la escena, en vez de recordar algo que los acerque a ella), que los hará diferentes de otros. Es lo que procuraron, por ejemplo, Paul Newman, Marlon Brando, Maryl Streep, Gena Rowland, Vincent D'Onofrio, Robert DeNiro. Todo esto con más o menos variaciones, más o menos énfasis en una parte en vez de otra. Al final, todo se concentra en la necesidad de saber qué es lo que quiere el personaje para poder entenderlo, seguirlo o cambiarlo. Mientras no se entienda al personaje, el resto parece inútil, como todo en la vida.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Stanislavski detalla su propio proceso de actuación, adopción y modificación del personaje, poniendo su aporte mental, emocional y corporal: miradas, gestos, expresiones faciales, vestimenta, etc, todo forma parte de un rico vocabulario que él detalla y que, una vez conocido, nos permite apreciar la actuación de mejor manera. In "Creating Role" (la edición que manejo es la traducción de Elizabeth Reynolds Hapgood de 1961), los capítulos finales son un agradable y minucioso análisis de "Otelo" (siempre Shakespeare) que Stanislasvki pone en boca del ficticio Tortsov, quien ha venido impartiendo clases de teatro a un grupo de estudiantes, como ocurre en los clásicos ("El banquete" de Platón viene a mi mente ahora). </span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/F575JJPRBjw" width="320" youtube-src-id="F575JJPRBjw"></iframe></div><br /><span style="font-size: medium;"><br /></span><p></p><p><span style="font-size: medium;"><br /></span></p><p><span style="font-size: medium;"><br /></span></p><p><span style="font-size: large;"><br /></span></p><h1 class="firstHeading mw-first-heading" id="firstHeading" style="background-color: white; border: 0px; flex-grow: 1; font-family: "Linux Libertine", Georgia, Times, serif; font-size: 1.8em; font-weight: normal; line-height: 1.375; margin: 0px; overflow-wrap: break-word; overflow: hidden; padding: 0px;"><span style="background-color: transparent; font-size: large;"> </span></h1>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-5537108702003242282023-06-16T07:08:00.000-07:002023-06-16T07:08:08.562-07:00Todos hablan de Bukele<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0jddfePvRDFlaMYXTCjw6X6GhStNNNFRBw_zA8Btkn3ESbJoG-oHgVCTsAkh5pzTlmQw4dopd8z70krUk2xvvM6J3s9bRDxBSNWNHgF0cMsCjJz3RAzf35oyLDLbQOBQ1-jQLXxF5_gWny1STxcLPJUdHEh7jp1FCffVhNCOV-BaBI0WU39JOCiBhxg/s1200/nayib-bukele-bitcoin-el-salvador.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1200" data-original-width="1200" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0jddfePvRDFlaMYXTCjw6X6GhStNNNFRBw_zA8Btkn3ESbJoG-oHgVCTsAkh5pzTlmQw4dopd8z70krUk2xvvM6J3s9bRDxBSNWNHgF0cMsCjJz3RAzf35oyLDLbQOBQ1-jQLXxF5_gWny1STxcLPJUdHEh7jp1FCffVhNCOV-BaBI0WU39JOCiBhxg/w320-h320/nayib-bukele-bitcoin-el-salvador.png" width="320" /></a></div><p>El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, ha práctimanete eliminado el pandillerismo y sus secuelas. En cosa de dos años cambió su país de ser uno de los más peligrosos del mundo al más seguro de América Latina. Esto ha llamado la atención, abierto foros de comentaros sobre su gran labor y logrado el apoyo de los beneficiados. Pero también ha sido muy criticado por los criminales, sus familiares, los partidos de oposición y algunas ONG, la OEA y la ONU. ¿Por qué? El cuento es que él no respeta los "derechos humanos" (de los corruptos, obviamente). Pero hay más. Veamos.</p><p>Bukele, para terminar con la criminalidad, a través de sus co-idearios en el congreso, eliminó leyes que imposibilitaban la seguridad nacional, hizo cambios de autoridades cómplices de las pandillas (Mara Salvatrucha y Barrio 18) y acaba de proponer la reducción del número de representates en el congreso a 60 y reducir los 200 y tantos municipios a solo 44. Este gran alivio para las arcas del estado eliminará la burocracia parasitaria, tan común en nuestros países, y creará condiciones ágiles de trabajo para todos. En las últimas semanas se ha informado de un paso nuevo en la lucha anti-delincuencial: apresar a las autoridades y políticos corruptos, gente que lleva años enquistada en el poder e incluye a los cuadros del ultra-derechista partido ARENA, así como a los ladrones y traidores del que fuera hace cuarenta años el glorioso FMLN. Bukele también ha empezado de publicitar su política social y educativa con construcciones de obras de infraestructura y becas para los jóvenes (me llamó la atención que la "beca presidencial" llevara el nombre de un izquierdista, el recordado poeta Roque Dalton, fusilado justamente por su partido, el ERP). Obviamente, todo esto es bienvenido, pero para el salvadoreño común, la simple accción de poder trabajar sin amenezas, dormir en paz o salir a las calles para pasear sin verse asaltado por los criminales es un logro histórico.</p><p>La imagen de Bukele también llama la atención: es un tipo sencillo, directo, sin poses, extremadamente inteligente, bien informado, de fácil y versátil hablar, accesible y rápido en sus respuestas. Claramente, él confirma la imagen que la firmeza no es sinónimo de vulgaridad ni violencia. Devoto creyente y padre de familia, Bukele se ha defendido de los ataques de izquierda y derecha. Sus puntos débiles aún no se muestran, pero se relacionan con su política económica y con decisión de hacer de los bitcoins moneda paralela al dólar, criticar al gobierno de Biden y acercarse a la ultra-derecha fascista y racista de EEUU, como fue evidente en una lamentable entrevista con el hoy despedido periodista de la FOX, Tucker Carlson. </p><p>En la vida política de hoy, y mucho más si hay elecciones en camino, la referencia a Bukele y comparaciones con él son inevitables (la violanecia y la corrupción dominan nuestras repúblicas). Y eso es una estrategia ingenua pero efectiva. Todos se quieren subir a la camioneta Bukele pero sin hacer lo que él ha hecho. Por ejemplo, todos quieren "disminuir la violencia" pero repitiendo lo que no funciona y que solo es maniobra publicitaria: sacar a los militares por dos semanas a "patrullar las calles" (y cero resultados), hacer redadas con previo aviso y en las calles céntricas (no en los escondrijos de los rateros) o visitar las cárceles y hablar con los guardias. Nadie tiene una política de apresamiento y aislamiento permanente contra sicarios y extorsionadores. Nos dicen: No, eso es asunto de los jueces (esos corruptos). No, eso le compete a los organismos de vigilancia de acuerdo a leyes internacionales (los burócratas que cómodamente vieven en otro país). A lo máximo, decomisan unos cuantos cuchillos oxidados, pistolas hechas a mano o garrotes de palo viejo.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjER55DhX_blieE13oS3EiO1YuOeP43P8g1cfGj0GDc-GFRgt628G4YU3-MpD1oOQrRieiiuQ7nFdd-JJCgD5_ejpAZCnC2p-9KBZ5HvSxkeMZYLOJsj_3_xaBCmooiZE5GFBuGT5kSWsoVMTPUgOvTxuu5tlCrUJxIaDGQb58nqrXGlBanIDhXj-z1sg/s3000/el-salvador-1-ano-regimen-excepcion-bukele.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1687" data-original-width="3000" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjER55DhX_blieE13oS3EiO1YuOeP43P8g1cfGj0GDc-GFRgt628G4YU3-MpD1oOQrRieiiuQ7nFdd-JJCgD5_ejpAZCnC2p-9KBZ5HvSxkeMZYLOJsj_3_xaBCmooiZE5GFBuGT5kSWsoVMTPUgOvTxuu5tlCrUJxIaDGQb58nqrXGlBanIDhXj-z1sg/w400-h225/el-salvador-1-ano-regimen-excepcion-bukele.webp" width="400" /></a></div><p>Frente a las cámaras, todos hablan de Bukele. Se le quieren parecer, dicen que harán lo mismo (sin saber lo que el salvadoreño ha hecho, ni cómo lo ha hecho). Y como viven en sus fantasías, creen que el tono amenazante convence, arrastra votos. Se venden como expertos en seguridad, como anti-corruptos, como "de centro", como dispuestos a servir solo al pueblo. Y en ese afán, ya asincerados y con la mano en el pecho, se lanzan algunas perlas, como la de un candidato en Ecuador que dice que la solución al narco-tráfico es subir el costo del transporte de la droga para el país no les resulte competitivo a los Carteles. O, como un candidato en Guatemala, que en su infinita sabiduría descubrió que la solución es apresar a los delicuentes salvadoreños y expatriarlos a El Salvador. O, como un político argentino que hasta se fue él mismo con cámara y micrófono, cual reportero barrial, a El Salvador, "para aprender de Bukele". O, como un político español que, oh fin del colonialismo, quiere aplicar lo de Bukele a España.</p><p>Todos hablan de Bukele. Todos quieren ser como Bukele. Pero, en realidad no les interesan ni Bukele ni sus propios países, solo llegar al poder. Una vez ahí, nos van a decir lo difícil que es todo y la manera en que los boicotean. Así van nuestros países: de burla en burla, de crisis en crisis y de tragedia en tragedia. El resto de esta historia es miseria (Venezuela desde hace años y hoy Argentina, acaso Brasil en el futuro), propaganda (Colombia o Chile) o todo lo malo combinado (Cuba, Nicaragua, Haití, Ecuador).</p><p>Y, como siempre, nunca será culpa de ellos ni de nadie, pero siempre del peligroso "imperialismo norteamericano". </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWKeDKPrqnQFoIJUGZR__HehKkiPj1YKtwFKpo-s162wUGmibjvi51VfgB5w4_UGWkCFLhB2VjxIoET_uE4EtFefYFfKo8Ioe4oFog2TY4xPoGRi3sKppAevtRXZfFWZbvQyhNhOF8JTQIEdPHaKlG_phwbsyt2CxmZJsugErH8EOb-14xYeUjXpSAHw/s630/download%20(1).jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="342" data-original-width="630" height="217" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWKeDKPrqnQFoIJUGZR__HehKkiPj1YKtwFKpo-s162wUGmibjvi51VfgB5w4_UGWkCFLhB2VjxIoET_uE4EtFefYFfKo8Ioe4oFog2TY4xPoGRi3sKppAevtRXZfFWZbvQyhNhOF8JTQIEdPHaKlG_phwbsyt2CxmZJsugErH8EOb-14xYeUjXpSAHw/w400-h217/download%20(1).jpeg" width="400" /></a></div><br /><p><br /></p><p> </p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-21569488216588334372023-04-17T09:42:00.004-07:002023-04-17T09:49:29.981-07:00De Quentin Tarantino y su Cinema Speculation a Fernando Mieles <p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh71PoNN37898TArfeK188Qocoy2vqPmlTB5IMBaH3c0yfkUv79PfwYsmNYwCwa2RK79XXuM93v8sknMzvaKVX4wYVXu-19qnmPXubHXVx8pLeAZ3rCUr2cmefOmn_CwV4iHqaNK_j9JwLueHxWiqVfOUw_qLUDruyTMjDtoj-FEI_4LAIhiloILq1Yuw" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1920" data-original-width="1080" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh71PoNN37898TArfeK188Qocoy2vqPmlTB5IMBaH3c0yfkUv79PfwYsmNYwCwa2RK79XXuM93v8sknMzvaKVX4wYVXu-19qnmPXubHXVx8pLeAZ3rCUr2cmefOmn_CwV4iHqaNK_j9JwLueHxWiqVfOUw_qLUDruyTMjDtoj-FEI_4LAIhiloILq1Yuw=w225-h400" width="225" /></a></div><br /><span style="font-family: times; font-size: medium;">Este es un libro fresco, de rápida lectura y, sin embargo, de difícil seguimiento si el lector no pertenece a la cultura visual popular de los Estados Unidos, más concretamente: a la época de adolescencia del autor (70s). Las películas de acción, de vaqueros, policíacas, de horror, misterio, pornografía dura, artes marciales forman parte del universo formativo del joven Taratino, asiduo asistente a cines de segunda (o tercera), de la época en la cual la "doble función" era la norma.</span><p></p><p><span style="font-family: times; font-size: medium;">Comentarios personales, datos autobiográficos, sumas de títulos y anécdotas de gente de cine son las característica de ese recorrido por su vida. Su lenguaje es sencillo, directo y ameno. Desués de leer el libro, uno entiende mejor sus gustos y preferencias temáticas, así como su punto de vista: abierto, popular, sincero, elaborado. El libro funciona como una larga explicación a las elecciones que él ha hecho en su vida y al tipo de cine que ha generado. Es, al mismo tiempo, una muestra de cómo se puede ser iluminado sin ser pedante, popular sin esforzarse, elaborado sin ser oscuro o abstracto.</span></p><p><span style="font-family: times; font-size: medium;"><span>Este es el universo de <i>Pulp Fiction</i> que, desde su nombre, hace un homenaje a la literatura policíaca de masas, de los 40s y 50s (no ese empeño de clase media latinoamericana que nunca salió del <i>whodunit </i>y a la cual el mismo <i>hardboiled </i>la resulta camino cuesta arriba, no se diga los trabajos de Rubem Fonseca o el humor de los españoles Mendoza, Olmo o Vásquez Montalbán) y se extiende a las imágenes de los <i>comics</i>, tan de moda en los 60s y 70s, a la crónica roja y al mundo del <i>jet set</i> de Hollywood. Así, se entienden mejor sus famosas </span><i>Kill Bill, Inglourious Basterds, Jackie Brown, Django Unchained, Once Upon a Time… in Hollywood, The Hateful Eight </i>y<i> Reservoir Dogs</i>.<br /><br />Mientras leía, como ocurre con todo libro motivador, me pregunté <span style="color: #323232;"><span style="background-color: white;">¿q</span></span><span>ué pasaría si, por ejemplo, Fernando Mieles hiciera una película basada en los comics y las revistas que se leían en Guayaquil en los70s? (Chanok, Hermelinda, Memín Pingín, Tarzán, entre tantas). ¿Qué habría ocurrido si su maravillosa </span><i>Descartes </i><span>estuvira basada no en una película extraviada sino en las escenas de Cartuchito, el famoso, flaco y ocurrido payaso que apareció en </span><i>El pantano de los cuervos </i><span>(1974)</span><span>?</span></span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiDy84EA7MEuwuvV8Q0bzS8XInBQ_9goJ3mCKBkvH7q-hgs8hkf6CAjePWPA_MrVeAYzNhKZUTUZGDhy6F8nfCxuGo3fC0cW2GjhkNknD5iW4YgVfjkVwaFwqrAUtpe7S_hX2Qcu4MRsMMSLMs4kWB8v6ySTgBwS36Na2pWxdR1f3yUfvWR6zR540mNIg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="539" data-original-width="986" height="219" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiDy84EA7MEuwuvV8Q0bzS8XInBQ_9goJ3mCKBkvH7q-hgs8hkf6CAjePWPA_MrVeAYzNhKZUTUZGDhy6F8nfCxuGo3fC0cW2GjhkNknD5iW4YgVfjkVwaFwqrAUtpe7S_hX2Qcu4MRsMMSLMs4kWB8v6ySTgBwS36Na2pWxdR1f3yUfvWR6zR540mNIg=w400-h219" width="400" /></a></div><p><br /></p><span style="font-family: times; font-size: medium;">¿Qué ocurriría si Mieles diera libre albedrío a su imaginación y nos metiera en el túnel del tiempo para recuperar los cines <i>Presidente</i>, <i>Guayaquil</i>, <i>Apolo, </i>acaso también los lugares que se fueron, como el <i>Montreal</i>, la cantina de<i> los mellizos</i> (gente del cerro, allá por la calle Pedro Carbo), <i>El Chuzo Engredído</i> y <i>El Rincón de la Brujas</i>? ¿Qué sería si Mieles se fuera al sur y le diera vida al <i>Barrio del Astillero</i> en imágenes, y los antros del glorioso <i>Barrio Cuba</i>? La reconstrucción de la memoria urbana lo demanda. Ese, creo es también el mérito de Tarantno y su libro: recuperar el tiempo, la gente anónima pero multitudinaria, esos personajes de quien nadie supo, como Floyd Ray Wilson, a quien Tarantino ahora sabe debió didicarle su Oscar.</span><p></p><p><span style="font-family: times; font-size: medium;">Acepto que esta no es la primera vez que este afán se me cruza por la cabeza. Es en realidad una frustración por el Guayaquil ya ido y hoy en manos de la delincuencia, los Carteles de la droga y un presidente al que no saludo ni el pero de su casa. Y esta obra, que exige prontitud y mérito, solo puede ser encargada a quienes respiran el río y el Estero, a los que conocen el pasado (no se lo inventan o lo copian), a los que vivieron y crecieron ahí, no a los turistas internos o externos que, de la noche a la mañana, se multiplican y pescan a río revuelto.</span></p><p><span style="font-size: medium;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: medium;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj6hp0GVmwxRGAfLLqpwdMLmSyylB5rF4HDvPPJDuKen4rSdSVsy92swQtWNhYnOQnKH6TxTrwBMiW3XJhJD3Iz5hVtH5OEqAEs8Vsdn0zEkSd98BDaJREfPRg1BVOwKYeNgAh00Rem6J6n9Z3b6l1Q26NxOegyErIb4f3sKKkzmqeJPDTIisJV0wMHNw" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="183" data-original-width="275" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj6hp0GVmwxRGAfLLqpwdMLmSyylB5rF4HDvPPJDuKen4rSdSVsy92swQtWNhYnOQnKH6TxTrwBMiW3XJhJD3Iz5hVtH5OEqAEs8Vsdn0zEkSd98BDaJREfPRg1BVOwKYeNgAh00Rem6J6n9Z3b6l1Q26NxOegyErIb4f3sKKkzmqeJPDTIisJV0wMHNw=w400-h266" width="400" /></a></span></div><span style="font-size: medium;"><br /><br /></span><p></p><p><span style="font-size: medium;"><br /></span><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-4416480264678619122023-01-23T11:22:00.008-08:002023-01-23T11:57:40.110-08:00Y de pronto, se hizo el cine<p>Ocurrió una noche, cuando fuimos en procesión desde mi casa hasta la zona del Rodillo. La casa esquinera no tenía verja y la amplia pared servía de telón para proyectar las películas. ¿Cuál era? ¿<i>Marcelino, pan y vino</i>? ¿<i>El monstruo de la laguna negra</i>? ¿<i>El pantano de los cuervos</i>? No importaba la película tanto como el rito y la aventura de sentarse a un lado, tirarse en cualquier parte de la calle o mirar desde el fondo las imágenes sucediéndose en la pared.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggZ4gjQ7ZWxJ8e0WHkh1DbHQ7qRxRTmOoyIa9V-BE5gPKR1T72Sej0VKqCjPgOM_xkOd_wvtvSXxp-9JGGvvPGub8WnxHs_uoOy5WirApcBSRL978J2EziGkti2nlBuQsNyuhnLyDwI-nahfLUQQ04jhxawFFmzaihGWzuh8k16uXbPIOKG7Op_IO5Vw/s300/1.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="168" data-original-width="300" height="224" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggZ4gjQ7ZWxJ8e0WHkh1DbHQ7qRxRTmOoyIa9V-BE5gPKR1T72Sej0VKqCjPgOM_xkOd_wvtvSXxp-9JGGvvPGub8WnxHs_uoOy5WirApcBSRL978J2EziGkti2nlBuQsNyuhnLyDwI-nahfLUQQ04jhxawFFmzaihGWzuh8k16uXbPIOKG7Op_IO5Vw/w400-h224/1.jpg" width="400" /></a></div><p><br /></p><p>Esa misma aventura la repetíamos en la sala de casa, en un imaginado cine diminuto en donde los vecinos llegaban con almohadas y se acostaban en el suelo para desde ahí ver la televisión que nos enviaba series en blanco y negro, películas y programas de noticia. </p><p>A la par que esperábamos ansiosos el nuevo episodio semanal de <i>Johnny Yuma, el rebelde</i>, <i>Maverick</i>, <i>La rubia peligrosa</i>, <i>Marcado</i>, <i>Cita con al muerte</i>, <i>Los intocables</i> y los ya viejos capítulos de <i>Cruz Diablo</i>, aplacábamos la espera con los diarios capítulos de las telenovelas mexicanas: <i>Rubí</i>, <i>Renzo el gitano</i>, <i>Muchacha italiana viene a casarse</i>. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjW9sz_vbH3mqPvoedr9hoFQkHEAUmWHqLYt2GxhX3XE2WvY2w12V6RB47kkqpIQ7271o8vxianMmHAYtg5-Qy8N7YlBN5WrIiIP5lMmEjiSXWGossqcJkKC3TSBBzeVZgb8i563mhEDFjKeWMltLZ8CnR4DMaa7W1xt2x8h7nKgsVbM_0V9A5eSVYfWA/s237/2.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="237" data-original-width="196" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjW9sz_vbH3mqPvoedr9hoFQkHEAUmWHqLYt2GxhX3XE2WvY2w12V6RB47kkqpIQ7271o8vxianMmHAYtg5-Qy8N7YlBN5WrIiIP5lMmEjiSXWGossqcJkKC3TSBBzeVZgb8i563mhEDFjKeWMltLZ8CnR4DMaa7W1xt2x8h7nKgsVbM_0V9A5eSVYfWA/w331-h400/2.jpg" width="331" /></a></div><p><br /></p><p>Las películas de Guayaquil eran en realidad los cines de Guayaquil. De ahí tomaban su sello, su importancia, su caché. El <i>Presidente</i>, por ejemplo, era de la vieja oligarquía y gente mayor. El <i>Victoria</i>, en cambio, a pocas cuadras y bordeando la zona candela del centro, era para el pueblo sediento de pornografía. El <i>Guayaquil </i>y su cafetería <i>Pacha </i>eran sinónimo de elegancia. El resto tenía una historia menor ya en los 70s: el gran <i>Olmedo </i>iba desapareciendo poco a poco, igual el <i>Apolo</i>, <i>Metro</i>, <i>Fénix</i> y el <i>9 de Octubre</i>. Al mismo tiempo, otros aparecían, como el cine <i>Inca</i>, al sur de la ciudad.</p><p>El cine era lugar preferido de los enamorados, parejas que tibiamente se tocaban o se besaban esquivando la atenta mirada chaperona o la linterna de los guardias que acababan con el embeleso; rito romántico que pasaba a la carnalidad más brusca, por ejemplo en el <i>Victoria </i>o el <i>Porteño</i>, a veces el <i>Quito</i>.</p><p>Con la adolescencia, el cine se convirtió en regla forzada de la ceremonia de crecimiento urbano. Las películas seguían siendo de EEUU o México, raramente de Europa. Pero no importaba. Uno no iba a realmente a ver la película sino a pasarla bien con los amigos, a gritar, comprar algo para comer, buscarse con chiflidos en la oscuridad cuando se llegaba atrasado. Y hasta para llorar, como ocurría viendo películas largas, tristes y casi absurdas, como <i>Joker</i>, una película hindú que hizo llorar a César Noblecilla y Charles Mayorga en el <i>Fénix </i>mientras yo les veía las lágrimas chorrearles por las mejillas desde la fila de atrás. </p><p>Pero el cine era también interactivo: la gente, contenta o enojada, establecía un diálogo directo con los actores, como si estuviéramos en el estadio viendo un partido de fútbol. Insultos, risas, preguntas, todo aparecía mientras duraba la película. Recuerdo que a causa de la censura contra la pornografía, en un cine porno decidieron pasar <i>Más allá del bien y del mal,</i> de Liliana Cavani. A los pocos minutos, el público frustrado y enardecido comenzó a gritar en trailers trailers trailers y a tirar botellas a la pantalla. Luego, en un momento de respiro, mientras Dominique Sanda se desnudaba frente a su esposo, alcanzaron a verle el no muy pronunciado miembro viril a lo cual alguien gritó: "mira ese huevito" y todos se rieron y otra vez gritaron trailers trailer trailers y a tirar botellas.</p><p>Era en el cine también que encontrábamos a nuestros lejanos, cercanos o imposibles amores, en la complicidad de la penumbra que no revelaba el rostro y fomentaba ilusiones de belleza y coqueteo. Y afuera del cine se sellaba el encuentro con nombres, número de teléfono, con suerte una cita. O también con una pelea contra los del barrio local que había hecho del cine su punto de encuentro: Machucagente sacándole la madre al tristemente célebre Karate, un boxeador enanito belicoso del barrio Cuba que defendía a los aniñados del Centenario.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPeWHCnEnHCYpyuzn-HHtttYtsG_9NDrauEITRoRTgpj2auhOicbXr6NVJIQwBKzGlWkywdeZ1UFHIaKHcGrqp6rmv2xPz_i6rYMJJUBYFAL3c8z52ddz8LRlbLspTOaEnKtx03MeDFszEbEmdBTr2qPVuX19DDp4kSjzQBhHHpkOk40r8rK9ukoteFQ/s281/3.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="281" data-original-width="179" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPeWHCnEnHCYpyuzn-HHtttYtsG_9NDrauEITRoRTgpj2auhOicbXr6NVJIQwBKzGlWkywdeZ1UFHIaKHcGrqp6rmv2xPz_i6rYMJJUBYFAL3c8z52ddz8LRlbLspTOaEnKtx03MeDFszEbEmdBTr2qPVuX19DDp4kSjzQBhHHpkOk40r8rK9ukoteFQ/w255-h400/3.jpg" width="255" /></a></div><p><br /></p><p>Para los solitarios, entrar al cine era entrar a una región de libertad mental interminable. Y así mismo, salir al terminar la función era volver a un mundo caótico y vulgar, con un exceso de luz que no servía para nada. El cine era el espacio para ser auténtico de muchas maneras. (El gran Medardo Angel Silva ha escrito de manera insuperable sobre esos detalles). </p><p>En Guayaquil, ya para fines de los 70s, el cine había dejado de ser punto de reunión principal, aunque se mantenía gracias a los grandes éxitos comerciales. Los gustos habían cambiado. Y en ese cambio la encantadora oscuridad de la sala se fue perdiendo, la costumbre de llegar a tiempo a una función, pensar si los trailers valían o no la pena, si la segunda película sería tan buena como la primera, se vieron desplazados por los temas y contenidos de las películas europeas e independientes que empezaron a llegar en festivales, funciones sabatinas (cine forum, entrada gratuita) o algún programa cultural de consulados o academias de lengua extranjera, como en las noches de verano en el patio de la Alianza Francesa, mientras pasaban <i>L'homme qui aimait les femmes.</i> </p><p>En los 80s, esa reducción o desarticulación de este fundamental espacio urbano en la historia de la cohesión social de Guayaquil, la sucedió la llegada de los videocassettes que ofrecían más variedad pero también obligaban al gran público a desaparecer y reducirse a pequeños grupos. Ya no habría más aquellos gritos desaforados que se oían en los cines, ni las risas o comentarios por algún chiste u ocurrencia del público. No habría intermedios para comprar hamburguesas o sorbetes, canguil o refrescos.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhM6NEvBqY43msaYbUwvafKT0bCo4J_4XfOLJW_Tn2RlUhCfpM8iTQWzAQJxoQjsLnQFC4BqfSg6oy2EfampmJYSxOOuJYlOKrLZwerWsuHvGRQpNhNYq3smJ3_4g9gzdslTSNz3qCuSfS4UI41QWSswlkZlerB9qgU-BFMea8yzqSAvGbNrUr5JLMznw/s300/4.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="168" data-original-width="300" height="224" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhM6NEvBqY43msaYbUwvafKT0bCo4J_4XfOLJW_Tn2RlUhCfpM8iTQWzAQJxoQjsLnQFC4BqfSg6oy2EfampmJYSxOOuJYlOKrLZwerWsuHvGRQpNhNYq3smJ3_4g9gzdslTSNz3qCuSfS4UI41QWSswlkZlerB9qgU-BFMea8yzqSAvGbNrUr5JLMznw/w400-h224/4.jpg" width="400" /></a></div><p><br /></p><p>Lo que se vive hoy es una prolongación de esa dinámica de los 80svía internet, pero de manera más radical y amenazante: hay más recursos para producir y consumir películas de toda índole y desde cualquier lugar del mundo, de gran o pésima calidad, como siempre. Pero no hay el bullicio, el movimiento humano tan propio del siglo anterior. Lo de hoy es más un acto privado que descarta diálogos o comentarios, bromas o risas. Es la muerte de la sala de cine propiamente. Y en ese cambio del gentío al sujeto solitario, sin duda mucho fuimos perdiendo. Hoy, acaso con suerte un fin de semana, la función ocurre en una casa, de manera discreta, entre pocos amigos, en donde, olvidándose de la película propiamente, uno se dedica más a disfrutar de la compañía de otros sin importar el resto. </p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-11386141028183816292023-01-08T08:24:00.005-08:002023-01-08T16:36:08.510-08:00Radiografía del barrio<p>No hay historia más complicada que la de nuestras repúblicas latinoamericanas. Parece ser una pieza de teatro en la cual siempre encontramos la dificultad de definirla como comedia, tragedia o drama, pues sus personajes son muchos, variados, contradictorios y cambian de una escena a otra a lo largo de la represetación. Esas fueron, más o menos, las palabras del padre jesuita e historiador Juan de Velasco en el período colonial tardío.</p><p>Dicha herencia de organizada rencilla y complejidad la heredamos de España y su agobiante sistema de definiciones de castas, razas y condiciones sociales. La podemos verificar en cualquiera de las tantas crónicas de conquista que describen duelos y discriminación entre gente de una comarca y otra, entre regiones del norte versus del centro o del sur. Nosotros, latinoamericanos herederos de bondades y maldades, a lo largo de 400 años le hemos puesto nuestro sello íntimo y personal. El barrio, ese microcosmos del país, es una muestra de lo que digo arriba. Veamos.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhJVKL0wbaulX1YxCmNAlUrvxT8CnI5PmbcJI7ydASLxdup7IAnf-VDNTIXvGfg-TEVULNEr_APTvNf8FaT0ltNZySZjWTxdh-wQmznsc_Srjgf8Es4n6Bjoy3Lzbd2sqjnlfPU7ATRTdHO9LeG5Bry_QdLCcbeLlsVrRq-4cItDc10L_gazjsxPyl-9w" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="628" data-original-width="1200" height="209" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhJVKL0wbaulX1YxCmNAlUrvxT8CnI5PmbcJI7ydASLxdup7IAnf-VDNTIXvGfg-TEVULNEr_APTvNf8FaT0ltNZySZjWTxdh-wQmznsc_Srjgf8Es4n6Bjoy3Lzbd2sqjnlfPU7ATRTdHO9LeG5Bry_QdLCcbeLlsVrRq-4cItDc10L_gazjsxPyl-9w=w400-h209" width="400" /></a></div><br />Soy del sur de Guayaquil, de la Ciudadela 9 de Octubre. Pero, como muchos, nací en el norte, en la meternidad que corresponde al cerro Santa Ana, y llegué a los dos años al otro polo de la pequeña ciudad. Ya he dado cuenta de las aventuras que vivimos en nuestra adolescencia en <i>Los patriotas del sur</i>. Quiero volver en este punteado sobre unas lineas esbozadas en <i>El libro del barrio</i>.<p></p><p>Mi barrio no era un barrio sino muchos barrios. Pero a muchos del barrio no les gustaba que así fuera, así como tampoco les gustaba la chabacanería de la palabra, a la cual desplazaban con "la esquina", "el parque", "de la cuadra", "de la manzana" o con el nombre de la tienda más frecuentada. La gente de mi barrio (que en realidad era solo una parte de la Ciudadela 9 de Octubre) era de la tienda <i>La Gloria</i> (equivalemte a <i>La Favorita</i>, que era la tienda los aniñados de otra zona). Todo eso, sin contar con las decenas de grupos menores que se formaban en cada cuadra y no se reconocieron nunca en ninguna descripción ni de aquí ni de allá, mucho menos los solitarios de cada sector, esos jóvenes que andan por las calles hasta encontrar un nicho en donde los aceptaran y fueran ellos como quisieron siempre ser.</p><p>Pero a la gente de <i>La Gloria</i> no le gustaba que fueran "a parar" otros que no eran del sector. Los miraban con enojo, celo y recelo, a veces hasta con desprecio, según el dinero que tuvieran (lo mismo ocurría en otros lados). La última generación de <i>La Gloria</i>, sin embargo, no recuerda que antes de ellos estuvieron los fundadores: el viejo Pombar, Caballón, Pachequito, Gordillo, Huen Huen, Figurita, Suelazo (por los 60s); y que callejones más allá existieron también Bolita, los Monge, Pollo Enano; y del lado opuesto la gente del <i>Rodillo</i>: el negro Mina, el Conejo y Cachete en las filas de Platense que se enfrentaría al King donde jugaban los Martillo que eran de la Ciudadela pero también del Camal. Y también Leoncio Orellana, la gente del negro Georgi, Zapata, ñañito, la Feria, los hermanos Ron, Galo Ullauri.</p><p>He incluido otras geografías en el mapa barrial no a propósito sino de manera irremediable: mi barrio era la ciudadela, pero la ciudadela no era mi barrio porque no era mi propiedad sino la de todos: de <i>La Gloria</i>, de la plazoleta, del <i>Rodillo </i>y de <i>La Favorita</i>. En mi barrio también había divisiones de clase social, muchas veces traducida en membretes educativos: los de colegios religiosos (Cristóbal, San José, Javier) se reunían solo entre ellos. Pasaban por encima la amistad con el vecino con tal de mantener relaciones con gente de su nivel. Pero dentro de la misma casa había hijos de colegios públicos, a veces de no gran reputación. (Uno de los problemas de la enseñanza privada es que conduce a la discriminación social, uno de los problemas de la enseñanza pública es su radical mediocridad).</p><p>Así, a la falta de memoria y generosidad humana, notoria en los conflictos sociales, no se diga el permanente espíritu de competencia y secretismo propio de la adolescencia, se une el innegociable monopolio de la membresía. Por ejemplo, al fondo de la Calle 7 (sigo en Ciudadela) paraban: Gorilón, Kukuku, Miguel Marino, el negro Ojito, el colorado Benavides, Pajarito, Magoo, el longo Marcelo, el loco Mickey, la Cucufata, Chimbacalle (a veces también el longo Emilio), Frejolito, el flaco Quiroz. Y amigo de ellos era Cucho, que era mucho mayor y en realidad se pegaba más a los fundadores de <i>La Gloria</i> (o sea, la gallada del viejo Pombar). Entrar a cada uno de esos círculos era imposible, salvo afortunadas excepciones.</p><p>Pero la época de Cucho y su generación (poco antes de los 50s) fue a fines de los años 60s-principios de los 70s; la de Gorilón y los otros (nacidos por el 54) a mediados de los 70s. La última generación de <i>La Gloria</i> (nacidos por el 57), siendo la menor de todas, existió desde inicios y mediados de los 70s hasta hoy (aunque ya no queda casi nadie).</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjDGqpCawsv_19Sh9_xQeP_ZaM-myZAV-OiMCTR9aHgiLjCwDtUWALLrpLnB87m_wpI6A8-bIBpEAuSVVBgU5bwmvvStiXMykw6OD9a6xj8zXMaBnkieD6DNH-n_7wBreugXS12kdwWPEErTfYJuphTu-YrGPHFroFgXqQ0zDKV0960UnTI5aUN3v1mTg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="402" data-original-width="700" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjDGqpCawsv_19Sh9_xQeP_ZaM-myZAV-OiMCTR9aHgiLjCwDtUWALLrpLnB87m_wpI6A8-bIBpEAuSVVBgU5bwmvvStiXMykw6OD9a6xj8zXMaBnkieD6DNH-n_7wBreugXS12kdwWPEErTfYJuphTu-YrGPHFroFgXqQ0zDKV0960UnTI5aUN3v1mTg=w400-h230" width="400" /></a></div><br />Si me preguntan cuál era mi barrio, diría los cholos del callejón E. Crecí junto a Manuelón, Monín, Puigoma, Ceviche, el loco Rey, Cuerito, Caimunga, Careplato, Pinina, Mirada de longo, el cholo Cepeda, 15 libras, padre Bazurco, Verruga, Vladi, El Amigo, 5 veces. Debería también decir Pluca, pero Pluca (sí, como la leche) no paraba en la esquina con nosotros. O sea, no era "del barrio". Pero frente a la esquina estaba el parque, en el cual se juntaban los ya desplazados de <i>La Gloria</i> (antes habían parado afuera de la casa de Cachato Jeff, debo enterarme más de los detalles de esos desalojos que los llevó hasta el parque) y algunos de ellos, sobre todo los menores, se juntaban con algunos de nosotros y vice versa. . Nosotros, que éramos menores, de colegios fiscales y callejones con casas pequeñas. Otros, como La Rubia y el Perro Bolivín, don Gachu, desertarían el busca de su propio rumbo popular.<p></p><p>En estas interminables anécdotas de personajes, lugares y aventuras, siempre me he quedado corto con historias ocurridas en otros puntos de la ciudadela (hay tanta vida y tanto por contar), con lo que decían las chicas, cómo vivieron y crecieron puertas adentro. No sé nada de sus amores ni de lo que fue de la hermosa muchacha que vivía junto a la farmacia <i>Atenas</i>, o aquella que andaba en una motoneta y pasaba veloz frente a nosotros. Alguien debería contarnos todo eso.</p><p>Con los años, la gente partió hacia otros rumbos (dentro y fuera de Guayaquil), algunos matuvieron el contacto, otros no. Los que se quedaron, asumieron la responsabilidad de mantener vivo el recuerdo de lo que alguna vez fueron o fuimos (no sé cuál es mi lugar ahora en el barrio, pues mis amigos cercanos ya han muerto o no viven ahí) y no es raro ver que ahora se envistan de una autoridad cultural que jamás tuvieron cuando jóvenes pero que el tiempo y el amor por el terruño les dio con justa razón. Tal es el destino humano: al final, los héroes son los que resisten el paso del tiempo, los últimos valientes. Con los años, de esa gran marejada humana que fueron los muchos amigos del barrio, pocos serán los que queden para siempre, o casi siempre. </p><p>Me informaron hace poco que se van a reunir nuevamente, que enviaron una lista de 60 y pico, que no todos han sido invitados y los que han sido aun no han dado la contribución. No terminan de ponerse de acuerdo sobre quién es o no del barrio (o sea, su barrio, sus cuadras). Siendo del sur se reunirán en el norte, por seguridad y comodidad, asumo. Así se ha fraguado y queda la vida de los que fuimos del sur, allá por los 60s y 70s. No sé quiénes irán finalmente a esa reunión. En todo caso: ¡salud!</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj5Nb6b_6W8gWYX9Rgr25P56ITwAuJFdKLnOZhEC496YJqWG9b36wiSTTdMi1MDerkFIf1Urc9xlk3EWcpEcEJIwkGGu0TFADm1iJlTI0qXJi3aI5SeOGiRjNUoxwxRHuU1xBl3c-qZ3vBsuaDwRG_F-eW-gNETJmMd_MSXlZzkbavrQc5JeL0Ek5HdYg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="519" data-original-width="717" height="290" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj5Nb6b_6W8gWYX9Rgr25P56ITwAuJFdKLnOZhEC496YJqWG9b36wiSTTdMi1MDerkFIf1Urc9xlk3EWcpEcEJIwkGGu0TFADm1iJlTI0qXJi3aI5SeOGiRjNUoxwxRHuU1xBl3c-qZ3vBsuaDwRG_F-eW-gNETJmMd_MSXlZzkbavrQc5JeL0Ek5HdYg=w400-h290" width="400" /></a></div><br /><br /><p></p><p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-79656293205719551542022-12-02T19:19:00.004-08:002022-12-03T13:45:32.566-08:00Medir la vida<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJrNL3gVIQvPgPcYx6ium1aM6fXEzpi6GowsvULp97CBdyQhUiAOYdmgKWPrZEZaii06ASql9sc7jGnkI7lGffeq1tYuvWiKvCCCe6a2Vtopdm-C-s9wD4iljN5_c8EX05QKNXxqDmBIHFx4wndGG0L9iXo_R43AFMqPPMeb36S9E9fVIOJh1weH0mZA/s500/wilson.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="325" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJrNL3gVIQvPgPcYx6ium1aM6fXEzpi6GowsvULp97CBdyQhUiAOYdmgKWPrZEZaii06ASql9sc7jGnkI7lGffeq1tYuvWiKvCCCe6a2Vtopdm-C-s9wD4iljN5_c8EX05QKNXxqDmBIHFx4wndGG0L9iXo_R43AFMqPPMeb36S9E9fVIOJh1weH0mZA/s320/wilson.jpg" width="208" /></a></div><p>Estaba terminando la autobiografía de Brian Wilson, la figura principal de los <i>Beach Boys</i> y, como me ocurre con todo buen libro, sus ideas empezaron a contagiarme y me pregunté: ¿Cómo organizo el recuento de mi vida? En mis clases de América Latina siempre expongo la época pre-europea como si fuera un todo hegemónico de los antiguos habitantes. Luego, la llegada de los "españoles", que eran en realidad de toda Europa y de Africa, período colonial, Independencia, época contemporánea.</p><p>Tanto afanarse en la taxonomía, me digo, para luego darse cuenta de que el asunto es más complejo, que el antes es un futuro y el presente ya se ha ido (aunque muchos digan lo contrario). Y pensando en el libro de Wilson, en mis clases, en las luces sobre las paredes, los anhelos, me pregunté: ¿De qué manera puedo dar cuenta de mí mismo y por qué? </p><p>Me he dedicado efímeramente a poner en páginas aquello que es temor de querer decir mucho (en realidad, lo vengo haciendo a mi manera desde hace más de treinta años) y también temor de alcanzar poco. Y ahora lo sigo pensando.</p><p>Pero, he aquí la versión rasa para medir la vida del hombre del sur que sigo siendo:</p><p>1. Nace y va a la escuela: los 60s</p><p>2. Crece y comete errores (amó mucho y no lo amaron): los 70s</p><p>3. Llama a esta primera etapa "la del Alfaro" y a la segunda "de la Católica": los 80s</p><p>4. Llega a Francia: 84-86</p><p>5. Regresa a Guayaquil y a Alausí, Riobamba y Cuenca: 87-88</p><p>6. Viaja a los EEUU y regresa... 88-90</p><p>7 Viaja a Illinois y Oregon y regresa... 90-93</p><p>8. Regresa a Oregon y va a Nueva York: 95-98</p><p>9. En NY desde el 98 </p><p>10. Luego de 3 años, por unos días regresa a Guayaquil...</p><p>10. Hace lo mismo por los próximos 10 años</p><p>11. En 2005 nace Fabia Matilde y su vida cambia (le teme a Dios y a la muerte)</p><p>12. En 2010 nace Fabiana y su vida cambia más (y le teme más a Dios y a la muerte)</p><p>13. En 2016 compra un casa y trata de vender otra para pagar la que acaba de comprar</p><p>14. No lee mucho, se preocupa del paso del tiempo, las deudas, Fabia que termina la secundaria y el aumento de peso</p><p>15. Temiendo a Dios y amando a sus hijas, soportado por su quejumbrosa mujer, siente una callada dicha.</p><p>16. Rebusca nuevamente en sus papeles algo que pueda recuperarse. Juega a ser Morelli, aun le disgustan los intelectuales farsantes (sobre todo esos que él llama "longos") y sabe que su suerte ya está echada. </p><p>Quizá de esa manera pueda medir mi vida. De a poco. De a capítulo. De retazo en retazo o tranco en tranco, como dijo el cojo.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhE9LkUN_nnC9xzbjGPWemyVU00RxRT_8doQ1ErwqmGnP9EW675cUOqgUj8R5I0bnL8LhX-sE3aetDqRV3IzGiaEmh6x78W7NHelQB9tsqDPbuF3_f_sk8yS6E1u6sjbFPwUCp0Orf_ax5D6PRVxLAveMrFnu0xLfONVkmLDZoXZYyoS7EEuERndceeAQ/s960/blog.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="720" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhE9LkUN_nnC9xzbjGPWemyVU00RxRT_8doQ1ErwqmGnP9EW675cUOqgUj8R5I0bnL8LhX-sE3aetDqRV3IzGiaEmh6x78W7NHelQB9tsqDPbuF3_f_sk8yS6E1u6sjbFPwUCp0Orf_ax5D6PRVxLAveMrFnu0xLfONVkmLDZoXZYyoS7EEuERndceeAQ/s320/blog.jpg" width="240" /></a></div><p>Decía que estaba terminando la biografía de Wilson, el de los <i>Beach Boys</i>, y recordaba mi reproche al libro de Miguel Donoso Pareja, que debía ser su autobiografía pero se convirtió en una recopilación de comentarios periodísticos. Nada de lo cual un hombre pueda a prender de otro hombre. Me quedé pensando en el robo emocional e intelectual que podría cometer. Por ejemplo, robarle a mi Fabia su experiencia, su dolor, su trauma: los niños son seres muy delicados y lo siguen siendo en la adolescencia. Una niña de su escuela, hace cosa de cinco años, se suicidó. Nadie sabe mucho del asunto, nadie ha preguntado. Fabia, me dijo que la niña siempre estaba en la bilblioteca, acompañada de libros y hablando con el bilbliotecario (quien nunca adivinó nada). En este pueblo pequeño y hermoso una niña hermosa y dulce se suicida de la nada. Al menos, nada nunca supimos. Y esa es una historia del trauma de mi hija que la va a perseguir luego, en algunos años, de la misma manera que me persiguen ahora mis muertos. Pero yo no puedo contar esa historia porque es de ella, es su dolor, su sufrimiento. Y eso es sagrado.</p><p>Y está Fabiana también, creciendo, siendo otra e igual a su hermana. Tan dulce y extremadamente inteligente como la mayor, y sin embargo muy diferente. Fuimos una vez a una de las haciendas de la zona, una de esas que aparecen en películas de campo y hay tractores y tienen un almacén grande en donde vende panes, pasteles, frutas, sopas naturales. En el salón de ventas, en otra mesa estaban una niña y una mujer mayor, casi una anciana. Fabiana la vio pero un rubor hizo que ninguna de ellas se saludara. Luego supe que la niña tenía a sus padres en la cárcel, por venta y consumo de drogas. Y la anciana era la señora que la tenía en su casa hasta que las autoridades resolvieran qué hacer con ella. Eso fue hace tres años. Fabiana quizá tenía 9 pero ya se daba cuenta de todo. ¿Qué hacer con ese dolor, ese cosa indecible de mi hija escuchó de labios de la otra niña, de la verguenza, del comportarse raro en clase y frente a otros? Estamos en EEUU, me digo, esas cosas no pueden pasar aquí. Y volviendo a mis fueros de barrio, de hombre del sur, comparo y concluyo que no hay dolor más fuerte ni aquí ni allá, ni hay colores no condiciones sociales cuando, con la luz apagada, el rostro de una niña se enfrenta al silencio de un Dios que no aparece.</p><p>Medir la vida, me digo, medir mi vida con lo que venga. Contarla de a poco. Quizá aquí, quizá en otro lugar, pero contarla porque hay cosas que no pueden morir en el silencio.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5m98rm-YBXq4EOzPNMbc804JYEkm06aI2HgE0CrRNwtSaAj1avHFnSAyNdAYESWfS7uJ0Rx6nCxK6es-tzafKCHcVoa1rXk-6FLw058kmg1WM4ZLJP26-aNmoR9sY5r0ziv-EZOmuROvF15gwhvB47eCVtw4k1KMnbtOpN9WlqQUa5IOfICvFAEorPA/s720/huerta.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="540" data-original-width="720" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5m98rm-YBXq4EOzPNMbc804JYEkm06aI2HgE0CrRNwtSaAj1avHFnSAyNdAYESWfS7uJ0Rx6nCxK6es-tzafKCHcVoa1rXk-6FLw058kmg1WM4ZLJP26-aNmoR9sY5r0ziv-EZOmuROvF15gwhvB47eCVtw4k1KMnbtOpN9WlqQUa5IOfICvFAEorPA/s320/huerta.jpg" width="320" /></a></div><br /><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-81778016551388830082022-11-21T17:46:00.003-08:002022-11-24T17:33:18.491-08:00Esos europeos...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/EOTvglibzws" width="320" youtube-src-id="EOTvglibzws"></iframe></div><p>Esos europeos que llegaron al Nuevo Mundo y que luego llamaron "América", para referirse tanto al continente, a los Estados Unidos o al sur de todos</p><p>Esos italianos que son en Brasil la comunidad más grande y le dieron a Uruguay y a la Argentina un nuevo acento, una voz diferente, un caló que nace y crece entre Napoles y Sicilia</p><p>Esos europeos que salieron de España por el franquismo y dejaron Galicia, Euskadi, Cataluña y Andalucía para regarse por todo el continente más allá del Atlántico</p><p>Esos europeos pobres o perseguidos que dejaron barrio, amigos, familia, sueños, memorias</p><p>Esos que llegaron de otros lados más antiguos, que fueron arrancados de sus geografías para ser esclavos o sirvientes</p><p>Esos que fueron perdiendo poco a poco o de un solo golpe, allá y acá, y que solo se quedaron con unas fotos en blanco y negro, acaso una dirección en un sobre o una imagen en una película sin sonido</p><p>Esos amuletos, tatuajes y rincones del pasado se presentan a veces ante mí y lo hacen de las maneras más descabelladas, en canciones por ejemplo, en páginas de un libro que no avanzo y no sé por qué mismo. Aparecen en las páginas de los "Clásicos Grolier Jackson" que fue la primera colección que leí por entero (temo ahora abrir esas páginas nuevamente)</p><p>Esos europeos con sus libros y sus historias que solo Borges pudo compendiar desde el futuro ya no son solo eso. Ahora buscan afanados el carbón, la macilla, el camino del rebaño en el campo, las talabarterías</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/8wcqV_dnO3U" width="320" youtube-src-id="8wcqV_dnO3U"></iframe></div><p>Los he visto siempre, he crecido con ellos, he hablado con ellos. Muchos no saben quién son ya, si el sonoro canto de los pájaros en la mañana o los mismos pájaros en el funeral de Leon Hi Fong</p><p>Esos europeos se fueron haciendo mandiga sin saberlo, se anclaron en páramos, se escribieron en "cuadernos de bantú" y encontraron sus posesiones en bazares del centro de una ciudad junto al río</p><p>Y siendo por una parte los mismos que eran antes, dejaron de serlo simultáneamente para alegar otras palabras. Redescubrieron el amor que era el mismo amor de sus abuelos, igual de cercano a la tierra, con las mismas imperfecciones y los errores de los adolescentes (no importarles nada, vivir por vivir, reirse de todo, hacer de la rapidez la receta para las enfermedades)</p><p>Esos europeos, por ejemplo, aún se van de sus pueblos, cruzan nuevamente el Atlántico. Con una sonrisa dicen que trabajarán en tal parte, que los esperan. Pero hay otros que se quedan, más que tristes preocupados porque ya no va quedando nadie y es una sensación que desde la antípoda ya vivimos hace mucho: las casas vacías no nos son ajenas</p><p>Esos europeos, generaciones posteriores, de pronto regresan al lugar de donde salieron sus mayores, pero ya son otros, están irreconocibles porque vienen de "las tierras del nuaymás" en donde lo único que crece es el polvo con el sol y la violencia con la incertidumbre</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/84OOTHBuvqM" width="320" youtube-src-id="84OOTHBuvqM"></iframe></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">Carta de León Iturburu (el ancestro) que desde Francia le escribe arrepentido a Veitimilla haber dejado "el Guayaquil", después de vivir allí tantos años y en donde tenía sus amigos y su vida, todo para sentirse extranjero en "la Francia":</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgfqDYoqshNXuWCki-Z4o9ojOi5vnwB0B7C5_H0pixZjSjpZfniy6LZOEKmpuZO59Edj_NJ7ppd-twSTIVT5G7LR1lAOMieq8Cg38S1SSgWcKHG4UXuoPRyZCvjiwwxS1pU8RYthK6NEmy5gy0oMvzOJgmirOl6kbmSX4bcb5dX0sMTkTH6DIMwwDrGWQ" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="722" data-original-width="919" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgfqDYoqshNXuWCki-Z4o9ojOi5vnwB0B7C5_H0pixZjSjpZfniy6LZOEKmpuZO59Edj_NJ7ppd-twSTIVT5G7LR1lAOMieq8Cg38S1SSgWcKHG4UXuoPRyZCvjiwwxS1pU8RYthK6NEmy5gy0oMvzOJgmirOl6kbmSX4bcb5dX0sMTkTH6DIMwwDrGWQ" width="305" /></a></div></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEi78173458cclkMv-swDO7Nwl9WBeGUAVG7hZD_XBRqzZxMu6Pefn_iO8p7RpryNp2D0a1ui3bZ9nLZOmnfRoBQS0NSebh5zMQ__ArBOXxW2Fhk56NNBP3oFJDYUR2hx55GNcTpJmt3c5yQ2i0x714rhhx0nsDrZTXwVXkWLLhzMqZK76HK6M9xQ7qdgA" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="541" data-original-width="734" height="236" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEi78173458cclkMv-swDO7Nwl9WBeGUAVG7hZD_XBRqzZxMu6Pefn_iO8p7RpryNp2D0a1ui3bZ9nLZOmnfRoBQS0NSebh5zMQ__ArBOXxW2Fhk56NNBP3oFJDYUR2hx55GNcTpJmt3c5yQ2i0x714rhhx0nsDrZTXwVXkWLLhzMqZK76HK6M9xQ7qdgA" width="320" /></a></div><br /><br /></div>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-85093079035481022662022-10-30T17:40:00.005-07:002022-10-30T17:40:56.144-07:00Illia Ponomarenko: Corresponsal de guerra de Ucrania <p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjCiCVfq9olTixm4o9ue-I1PIOPJZkmBftsjhfRHNDM1BGBJiSjEMr-IySQgH-5L8yhE6x7lAGNStIYuBp3AfeiPjeT8BITgD_hzP8femC2YU7-EGSWMuNgwmqlKZ5_ACPIUQYyU9yJc4L1qcEMtfgnwIPIlJ5zmFjCPXd4kagD09Nocl9Q6sAl0aG1ng" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="240" data-original-width="241" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjCiCVfq9olTixm4o9ue-I1PIOPJZkmBftsjhfRHNDM1BGBJiSjEMr-IySQgH-5L8yhE6x7lAGNStIYuBp3AfeiPjeT8BITgD_hzP8femC2YU7-EGSWMuNgwmqlKZ5_ACPIUQYyU9yJc4L1qcEMtfgnwIPIlJ5zmFjCPXd4kagD09Nocl9Q6sAl0aG1ng" width="241" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: 14pt; text-align: left;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div><p></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">[Pubicado en el diario <i>Kyiv Independent</i>, Octubre 30, 2022]</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">¡Saludos!</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Hola, y gracias por recibirme esta noche.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Acabo de llegar de Kyiv y fue un viaje bastante largo
que duró 30 horas, así que espero que tengamos una conversación sincera e
íntima sobre las cosas que nos preocupan a todos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">No estoy aquí para sermonear a nadie o decir:
"¡Debes hacer esto y aquello, nos debes!" o algo así.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Estoy aquí para hablar de esperanza y buena fe.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Me alegro de tener la oportunidad de hablar con los
holandeses porque tenemos mucho en común, aunque estamos en lados opuestos del
continente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Hubo una vez en que yo era un estudiante en la ciudad
de Mariupol. Solía trabajar en una terminal de carga. Hubo una vez en que
volví del trabajo a mi dormitorio y abrí mi computadora portátil para ver las
noticias.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Cuando lo vi, me dije una frase en ruso: "Довоевались,
уроды". Lo que puede interpretarse más o menos como: "Mirad lo que
habéis hecho con vuestra guerra, monstruos".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Me refería a las personas que habían derribado el MH17
ese día<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">El derribo del MH17 fue un momento decisivo para
muchas personas en Ucrania en 2014, así como para mí. Abrió un nuevo capítulo
en la guerra. Nos demostró que la barbarie puede no tener límites.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Ya no es un conflicto regional localizado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Han pasado más de ocho años desde ese momento.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Ya no soy estudiante.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Hoy soy periodista representando a mi país en el
mundo. Sin embargo, todavía estamos peleando la misma guerra. En los últimos
ocho años, y especialmente en los últimos ocho meses, han sucedido cosas
increíbles.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Mariupol se convirtió en montones de ruinas. Mi ciudad
natal de Volnovakha acaba de ser arrasada. La ciudad a la que estoy a punto de
mudarme, Bucha, se ha convertido en un símbolo internacional de fosas comunes y
ejecuciones.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y los criminales del MH17 aún no han sido llevados
ante la justicia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Como periodista, he visto cosas increíbles que nunca
olvidaré.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">He visto a Kyiv, el corazón de toda la nación, de pie
a solo dos pasos de su caída ante el avance de los ejércitos rusos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Los soldados de las 72 Brigadas Mecanizadas de Ucrania
se sacrificaban para detener el avance ruso en Kyiv cerca de la ciudad de
Moschun, a pesar del derramamiento de sangre.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">¡A fines de febrero, en los primeros cinco días,
estábamos tan cerca de la caída!<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Ese sería el final de tantas cosas preciosas y
queridas para nosotros, para mi generación: los valores de la Revolución
EuroMaidan, todas las reformas democráticas y la resurrección de la cultura
ucraniana moderna.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">El fin de nuestro mundo como lo conocíamos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y he visto algo increíble. Ucrania logró derrotar la
guerra relámpago rusa, agotar su poder y revertir el curso de la guerra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Ahora no estamos hablando de si Kyiv caerá dentro de
las 72 horas. Estamos hablando de si podemos retomar Kherson en las próximas
seis semanas y qué debemos hacer a continuación en esta guerra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">¿Por qué estamos donde estamos hoy, en contra de todas
las expectativas?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Los muchachos de mi medio de comunicación, <i>Kyiv
Independent</i>, me sugirieron que escribiera un libro sobre esta guerra.
Estaba pensando: ¿cuál es la cosa más esencial de esta guerra, la conclusión
más importante?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Ha habido muchas cosas importantes para los militares
y la política. Pero me di cuenta de que lo más esencial es el aspecto moral.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Esta guerra me ha enseñado una cosa: actuar siempre de
acuerdo con la mejor conciencia en el momento más oscuro. No importa lo difícil
y aterrador que sea. Será difícil, pero al final del día, siempre será la única
solución correcta.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">La forma aparentemente más fácil siempre es
incorrecta. Los tratos con el diablo, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>hechos desde la debilidad y el deseo de
esconder los problemas debajo de la alfombra, nunca terminan bien.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Por supuesto, no estoy descubriendo nada nuevo. Es un
principio muy básico. Pero en la realidad de una guerra catastrófica, donde la
vida normal de millones de personas se está derrumbando, es más fácil decirlo
que hacerlo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero esta es la elección moral que tuvo que hacer la
nación ucraniana en esta guerra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">La nación hizo su elección, y las personas
individuales también lo hicieron.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">El primer día de la invasión, decidí que tenía que
cuidar a mi madre. La hice salir de su ciudad en el este de Ucrania en vísperas
de la invasión. Tuve que llevarla a un lugar seguro en el oeste de Ucrania.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Mi compañero de piso, Iván, tiene coche. Así logramos
salir de Kyiv. La ciudad estaba sumida en el caos: tanques, enormes atascos de
tráfico, sonidos de lucha.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Llegamos a un pequeño pueblo justo en la frontera con
Moldavia, a 600 kilómetros de Kyiv.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Cuando llegamos, estaba tan exhausto que llegué al
sofá más cercano caí y me quedé inconsciente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero luego, por la mañana, surgió la pregunta: ¿qué
sigue? Mi amigo Iván estaba conmocionado y asustado. No podía comer, no podía
dormir, no dejaba de repetir: "Hombre, no voy a volver, nunca,
nunca".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Yo también estaba asustado. Las cosas no pintaban bien
en ese momento. En el mejor de los casos, podría esperar volver a Kyiv solo
para ver la batalla por la ciudad y, con suerte, tratar de huir con vida
mientras la ciudad cae.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Mientras tanto, el 25 de febrero, en Kyiv, los
militares entregaron miles de rifles AK a gente muy normal, a todo el mundo
dispuesto a luchar hasta el final, solo en las calles.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">(Puedes encontrar fácilmente videos de eso en Internet).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Fue un acto desesperado. Todos esperaban un gran
avance ruso en Kyiv desde el norte.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">La gente común en Kyiv, solo civiles sin
entrenamiento, tomaron la decisión de agarrar las armas y luchar en sus calles contra
un ejército regular invasor.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Mi amigo Iván y yo, al ver esto, también tomamos una decision:
“No nos vamos a rendir y no nos importa”. Y esa fue la decisión más correcta de
mi vida. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y regresamos a la ciudad bajo ataque.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Entramos a las calles vacías y oscuras. Los sistemas
de defensa aérea ucranianos intentaban interceptar los misiles rusos entrantes,
sin éxito.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Vivíamos en un piso cerca del campo de batalla de
Bucha e Irpin, compartíamos la comida y nos despertábamos y caíamos con el
sonido de la artillería. Trabajé como periodista de <i>Kyiv Independent</i> y
mi compañero de piso era mi conductor.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Esta fue la batalla de Kyiv.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero no se trataba solo de gente común como yo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Siempre he sido bastante crítico con Volodymyr
Zelensky. Antes de la gran invasión, era bastante desordenado y no se tomaba lo
suficientemente en serio su trabajo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero cuando llegó la hora más oscura, también tuvo que
tomar una decisión importante.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Su propia administración le rogó que huyera de Kyiv
antes de que fuera demasiado tarde. Los líderes occidentales ofrecieron su
ayuda en la evacuación.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero dijo que no. Y decidió quedarse en Kyiv,
diciendo: "Necesito munición, no un aventón".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Lo más probable es que esta frase sea solo una
leyenda.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero, no obstante, ahora conoces a Zelensky como un
destacado líder de guerra de este siglo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">No como otro "presidente en el exilio" bueno
para nada y haciendo declaraciones sin sentido y dando entrevistas en el
extranjero.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y gracias a la unidad nacional en Ucrania y las
fuerzas armadas, estamos donde estamos ahora. Y no hay ninguna bandera rusa
ondeando sobre la plaza Maidan en Kyiv.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y ahora están perdiendo terreno en Ucrania.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y Vladimir Putin está pensando en cómo permanecer en
el Kremlin, cómo evitar una derrota catastrófica en Ucrania. Y ahora mismo, no
está pensando en lo que quiere tragarse a continuación.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">¿Por qué pasó esto? ¿Cómo es que se las arreglaron
para estar tan equivocados acerca de Ucrania?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">A menudo llamo a esta guerra una de las guerras más
tontas y absurdas de la historia humana.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">De hecho, con toda seriedad, los líderes del país más
grande del mundo pensaron que Ucrania simplemente caería en sus manos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">[Los rusos] Mintieron tanto que creyeron sus mentiras.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Estaban delirando y pensaron que nada estaría allí
para detenerlos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Todo el sistema se basó en el hecho de que tienes que
decir lo que tus superiores quieren oír de ti.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Y también se suponía que los superiores siempre les
decían a sus superiores lo que querían escuchar. Es como funciona la cosa en
los pasillos del Kremlin hasta llegar a lo alto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Estaban ciegos. La mentira los cegó.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">No vieron que Ucrania ya no es la misma vieja
república soviética. Durante los últimos 30 años, Ucrania se ha convertido en
una nación independiente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Estaban delirando y pensaron que nada estaría allí
para detenerlos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">El exceso de confianza ruso fue más que espantoso.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Querían afianzarse fácilmente cerca de Kyiv en el
aeródromo de Hostomel y luego aterrizar en el centro de Kyiv. Luego,
simplemente mate o arreste a los líderes ucranianos en la zona del gobierno de
Kyiv.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Convoyes de largo avance se movían a lo largo de
nuestros bosques apenas protegidos.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Lo que terminamos viendo en los campos de batalla de
Ucrania fue un ejército indigente, absolutamente negligente con la vida de sus
soldados. Muy primitivo y sencillo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Al carecer de tácticas sofisticadas, en muchos
sentidos está peor equipado que el ejército ucraniano.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero aún así, este ejército es grande. El legado
soviético les dio miles de tanques, piezas de artillería y rondas de
municiones. Desperdician su mano de obra sin pensarlo dos veces.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Las hordas rusas ingresaron a Ucrania desde nueve
direcciones, con solo 150,000 soldados, lo que definitivamente no fue
suficiente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">El Kremlin sugirió repetidamente que se detuvieran las
hostilidades si Kyiv se rendía incondicionalmente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero el general Zaluzhny, el máximo comandante militar
de Ucrania, también tenía una esperanza.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Sabía que las fuerzas armadas ucranianas deberían
permitir que Rusia se adentrara profundamente en el territorio ucraniano y
luego empantanarse, con su mala logística descarrilada, en un duro combate.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Los convoyes rusos que se desplazaban por las
carreteras de los bosques ucranianos fueron emboscados por unidades ucranianas
de gran movilidad. En muchos casos, las fuerzas ucranianas dejaban pasar los
tanques rusos y luego atacaban los camiones de combustible que seguían a los
blindados pesados.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Muy pronto, los tanques rusos despojados de
combustible tuvieron que detenerse, listos para ser capturados intactos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Para hacer frente al avance de las hordas rusas, el
ejército ucraniano descentralizó el sistema de mando y control y otorgó más
autoridad a los líderes sobre el terreno, que conocen mejor la situación.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Las formaciones ucranianas estaban usando tácticas de
unidades pequeñas y altamente móviles para evitar convertirse en objetivos grandes
y fáciles para Rusia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Las unidades de combate ucranianas estaban mucho más
motivadas, flexibles y efectivas. Porque también tenían esperanza, y sabían que
nada está predestinado, y eso puede y dará pelea a Rusia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Un paso tras otro, este fue el camino hacia la
victoria en la Batalla de Kyiv.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">En algún momento entre mayo y junio, el ejército
ucraniano se había quedado sin munición de artillería estándar soviética.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Sin armamento pesado, Ucrania no tendría ninguna
posibilidad a largo plazo. Pero nuestro ejército, nuevamente, encontró una
salida. En un período de tiempo muy corto, logró cambiar en gran medida al uso
de sistemas OTAN de 105 mm y 155 mm proporcionados por Occidente, abriendo una
nueva página en la historia militar de Ucrania y dando un nuevo aliento para la
guerra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">En este momento, Ucrania sufre los continuos ataques
rusos contra nuestra infraestructura civil crítica. El Kremlin no puede
derrotar a nuestro ejército en los campos de batalla, por lo que quiere
obligarnos a rendirnos despojándonos de calefacción y electricidad en invierno.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Hay una batalla en curso entre los misiles rusos, los
drones kamikaze de fabricación iraní, por un lado, y los trabajadores
ucranianos que reparan la red eléctrica todo el tiempo. El público ucraniano
apoya en gran medida esta campaña: ahora es un buen detalle ahorrar
electricidad y abstenerse de usar lavadoras durante las horas pico.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">En Podil, el epicentro de la diversión y el ocio en
Kyiv, las luces de las calles no están encendidas después del anochecer. Pero
la noche del viernes continúa. Los músicos callejeros tocan versiones de Oasis,
la gente baila y pasa el rato en la oscuridad de la calle.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">¿Sabes lo que hacen nuestros muchachos de <i>Kyiv
Independent</i> durante el tiempo de alerta aérea? Salen de la oficina y se
dirigen a un pub de cerveza artesanal que se encuentra en un sótano. Así que es
un refugio y un bar.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">La vida y la esperanza siempre encuentran un camino.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Los líderes occidentales también tuvieron que hacer
esta elección moral hacia la esperanza y la superación de las dificultades en lugar
de esconderlas debajo de la alfombra.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Occidente se ha abierto camino desde los inciales
intentos de "salvar la cara de Putin" y "encontrar un compromiso
para la paz" hasta este firme apoyo que estamos teniendo ahora.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Hemos hecho nuestra guerra con jabalinas y NLAW para
la resistencia guerrillera bajo la ocupación rusa, luego con sistemas de
artillería para una guerra en toda regla, ahora estamos consiguiendo
instalaciones de defensa aérea.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Más de 10.000 soldados ucranianos tuvieron que morir
para demostrar que la causa ucraniana vale la pena, que la ayuda a la defensa
funciona y que Ucrania puede y ganará esta guerra si Occidente la apoya.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Necesitamos más ayuda, pero nuestra confianza en el
apoyo occidental es ahora más fuerte que nunca.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Al igual que tantos en Ucrania, los líderes
occidentales también tuvieron que tomar decisiones históricas en un momento
histórico y elegir la victoria de Ucrania sobre el apaciguamiento de Rusia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Pero seguimos escuchando voces en Occidente: “¿Por qué
no hay negociaciones? No queremos morir congelados en invierno o morir en un
ataque nuclear, como amenaza Putin. ¿Por qué debería importarnos Ucrania?”<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Estas voces sugieren que vayamos por el camino más
fácil: cerrar los ojos sobre Ucrania a cambio de lo que parece ser olvidar el
problema por un tiempo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Alimentar el apetito de un dictador solo alentará su
expansión y demostrará que el chantaje nuclear y la extorsión funcionan. Y eso
no es solo Vladimir Putin, sino también muchos otros regímenes canallas en el
mundo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">No tomará tiempo emitir nuevas demandas y una guerra
aún mayor.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Como dije al principio, los tratos con el diablo nunca
salen bien.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Si permitimos que Putin devore a Ucrania, obtendría
enormes recursos de esta tierra, como un control aún mayor del mercado mundial
de alimentos, y más confianza en su expansión militar.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">No estamos tratando con líderes razonables que actúan
de buena fe. Nos enfrentamos a una mafia que continuará mientras no encuentre
resistencia. Están fallando y están tratando de disuadir a Occidente de que no nos
ayude.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">No tenemos elección entre la guerra y la paz.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Tenemos que elegir entre un trato vergonzoso con el
diablo que solo empeorará las cosas, y ayudar a Ucrania a detener al Kremlin
ahora.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Rusia ahora bombardea ciudades ucranianas, provocando
nuevas oleadas de refugiados. En este sentido, también hay una opción. Ustedes pueden decir estamos cansados y queremos que esto termine, o pueden ayudar a
Ucrania a adquirir defensas aéreas y proteger sus ciudades.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Espero que nos mantengamos en este camino. Ayudar a
Ucrania funciona. Si no fuera así, ahora mismo estaría en una fosa común con
las manos atadas a la espalda.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Los organizadores del evento me pidieron que dijera
una o dos palabras sobre si creo que la reconciliación entre Ucrania y Rusia es
posible en el futuro. </span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">Todos en Ucrania hicimos nuestra elección, y los rusos
también tendrán que hacerlo, si quieren seguir siendo una nación. </span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">También enfrentarán esta elección moral de si van por
el camino fácil, diciendo "Solo estaba cumpliendo órdenes", buscando
excusas, acusando al mundo de lo que sucedió, o reevaluando su historia, su
vida, su culpa y cambiando su país para bien.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Si lo hacen bien, en un futuro lejano quizá haya una
oportunidad también para ellos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Entonces, que haya esperanza y buena fe en lo que
hacemos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><b><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Nota del autor</span></b><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">¡Hola! Mi nombre es Illia Ponomarenko, el tipo que
escribió este artículo para ti.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Espero que te haya resultado útil e interesante.
Trabajo día y noche para traerte historias de calidad de Ucrania, donde Rusia
está librando la mayor guerra en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Mi
pequeña patria, Donbas, es ahora el escenario de los peores combates. Estamos
ayudando a mantener al mundo informado sobre la agresión rusa. Pero también
necesito la ayuda de cada uno de ustedes: para apoyar el periodismo ucraniano
en tiempos de guerra haciendo una donación al <i>Kyiv Independent</i> y
convirtiéndose en nuestro patrocinador.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">Juntos, podemos ayudar a traer la paz a Ucrania.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><b><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Autor</span></b><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14.0pt; line-height: 107%;">Illia Ponomarenko es reportero de defensa y seguridad
del <i>Kyiv Independent</i>. Ha informado sobre la guerra en el Este de Ucrania
desde los primeros días del conflicto. Cubre temas de seguridad nacional, así
como tecnologías militares, producción y reformas de defensa en Ucrania.
Además, se despliega en la zona de guerra de Donbas con formaciones de combate
ucranianas. También ha tenido despliegues en Palestina y la República
Democrática del Congo como reportero integrado en las fuerzas de mantenimiento
de la paz de la ONU. Illia ganó la beca <i>Alfred Friendly Press Partners</i> y
fue seleccionado para trabajar como reportero invitado de <i>USA Today</i> en
el Departamento de Defensa de EE. UU.<o:p></o:p></span></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-20743286233677454052022-08-08T17:02:00.003-07:002022-08-08T20:13:48.566-07:00Hay un árbol en Guayaquil<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgYSbm9MDEv93bcDqXtOhI-vsf1MR0DFYeLpw7i3fjJTwAl4ZtCQ4_9Z-pw1r1DVsX0OndxkVTldUaj0GNuDK3WyJLAEJKDnKofqV-M_EG9HBecijCkfuuXQN8K6oQ3-SlcUdtgVIcEgUbAUz15JabQQjyAkTmTkPRh_AD4BtQ6Lo8dGwpmJjjE6tQn5g" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="448" data-original-width="451" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgYSbm9MDEv93bcDqXtOhI-vsf1MR0DFYeLpw7i3fjJTwAl4ZtCQ4_9Z-pw1r1DVsX0OndxkVTldUaj0GNuDK3WyJLAEJKDnKofqV-M_EG9HBecijCkfuuXQN8K6oQ3-SlcUdtgVIcEgUbAUz15JabQQjyAkTmTkPRh_AD4BtQ6Lo8dGwpmJjjE6tQn5g" width="242" /></a></div><br /><p></p><p><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">[De Google Earth]</span></p><p><span style="font-family: Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 18.6667px;">Hay un árbol en Guayaquil</span></span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;"> que crece en el parque del barrio o en la vereda
resquebrajada de la esquina, en las cuartas que dividen el cemento y donde los
niños juegan a la raya, junto a la yerba que aparece en el invierno tropical. Es
el mismo árbol de las canciones y las borracheras, el que desaparece agobiado
por casas y construcciones pero vuelve a surgir heroico cuadras más adelante.
Lo he visto irremediable detrás del estadio Capwell y luego por la zona de
Ayacucho y Tungurahua, frente a una ventana que sirve de clandestina tienda de
abarrotes mientras rompe con raíces lo que se le vaya poniendo por delante.</span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjB1BumvDOOaG2he3OI3jEgVzRJh9q3viUHijQfcSzORn_L8CwAs_jA2zLEYMYJQKHBp16nFnM8whD-FM_kFiXKdsSLz5692A7J2Cs8Xmvne4UK4IBLgCW3CRNm_WdZvWX7DGXtCf-oTUcaU-RxkED2MQkdVH_CvCJLg40HvYQBWbxNNJeY_z9HeOlhBg/s750/arboles%202.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="750" data-original-width="600" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjB1BumvDOOaG2he3OI3jEgVzRJh9q3viUHijQfcSzORn_L8CwAs_jA2zLEYMYJQKHBp16nFnM8whD-FM_kFiXKdsSLz5692A7J2Cs8Xmvne4UK4IBLgCW3CRNm_WdZvWX7DGXtCf-oTUcaU-RxkED2MQkdVH_CvCJLg40HvYQBWbxNNJeY_z9HeOlhBg/w256-h320/arboles%202.jpg" width="256" /></a></div><p></p><p><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">[En: </span><span style="font-family: Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 18.6667px;">https://fundacionlaiguana.org/arboles-patrimoniales-guayaquil/]</span></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">Ese árbol es el único cuadro que pinta Servio Zapata,
una y otra vez, como ese loco que hace mucho garabateaba paredes y veredas en
el desaparecido malecón de Guayaquil (vivía en un almendro, recuerdo, y colgaba
ollas y ropa de las ramas). Es el árbol infinito, me dijo el pintor en su estudio,
como si hablara del universo o de la arena. Nunca se pinta el mismo árbol dos
veces, solo basta cambiarse de lugar, juntarlo con otro y solito se van
reproduciendo. Mientras hablaba yo pensaba en el <i>Pierre Menard, autor del
Quijote</i> y en <i>Funes, el memorioso</i> ambos empeñados en reproducir el mismo
objeto en tiempos diferentes porque, si a Zapata de verdad le interesara pintar
un bosque (que es lo que muchos piensan) no estaría siempre pintando el mismo
árbol, ese desafío de la razón y el equilibrio emocional. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">A Zapata no le perdonan que pintando el mismo árbol
gane dinero, y más aún que ese árbol siendo uno sea también otros. Lo he
invitado a propósito a pintar los árboles de los Adirondacks, al norte del
estado de Nueva York, para que siga haciendo dinero y conocimiento de la
mismidad que lo apura.</span></p><p class="MsoNormal"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCNBFJmbTROxOltsNA7b8FsJYs8yk7NyUGLX8kcd7aJn3MGnlJqQgkNQUGGBzLG6r3RW3tA9OyUlweFgWMvrVQ8FN7u7By7eUEHBq87UExUS4fVpv_GZ6gAW4_aaDMayjJJbxfEp9ZMOez4NMBuil7AuietHkr5pt3AZvatQjwBZN79CK4XtTM7G8Ahw/s3200/arbol%204.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2823" data-original-width="3200" height="282" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCNBFJmbTROxOltsNA7b8FsJYs8yk7NyUGLX8kcd7aJn3MGnlJqQgkNQUGGBzLG6r3RW3tA9OyUlweFgWMvrVQ8FN7u7By7eUEHBq87UExUS4fVpv_GZ6gAW4_aaDMayjJJbxfEp9ZMOez4NMBuil7AuietHkr5pt3AZvatQjwBZN79CK4XtTM7G8Ahw/s320/arbol%204.jpg" width="320" /></a></div><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">[Un cuadro de Zapata]</span><p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">A mí los árboles nunca me interesaron porque crecí con
ellos en el sur. Eran laureles, ceibos, pinos, almendros, acacias convertidos en
residencias de iguanas, nidos y panales. Pero sirvieron también de andarivel a
una muchacha que se afanaba en coger guayabas y acaso ser la musa del poeta treinta y pico de años antes morir el siglo. Los árboles estaban a la mano o los teníamos que ir a cazar en
diciembre a la hacienda el <i>Guasmo</i> y decorarlo con metales brillosos y
falsos regalos para lucir en la esquina. (Si los árboles hablaran nos habrían
pegado algunas puteadas hace mucho por las orquetas que hicimos de sus ramas). Su
presencia está atada a la vegetación del trópico, tan nuestra en nuestra
infancia, corriendo hacia la ría, saltando entre troncos derrumbados
para ganar la orilla. Pero ¿Por qué entonces ahora tanta alaraca? Porque, de
pronto, lo sobreentendido no resulta suficiente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">Mi primer supuesto acto de conciencia del árbol nace en
el norte de California, allá por el 92, cuando estuve frente a los monumentales
secuoyas. (El hombre es un ser diminuto, se nota a todas luces, pero puede
causar tanta destrucción en un instante). El segundo, quizá cuando una mujer me
contó que su madre abrazaba árboles para recuperar energía. Me pareció raro,
casi invento, pero tenía sentido, después de todo, los árboles anteceden al
género humano. El tercero ocurrió leyendo la trilogía de <i>El señor de los
anillos</i>, cuando uno de los árboles gigantes aclara que los <i>ents</i> son
árboles con memoria. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">Pero, en realidad, no existe tal caer en conciencia de
las cosas, como nos decían en los 70s. Hay solamente un recuerdo aplazado, un
hecho negado por conveniencia o una ignorancia tremenda que usualmente esconde el
infaltable temor. Porque, si de los árboles venimos y a los árboles regresamos,
¿para qué empeñarnos en una lección de aprendizaje? <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">La misma realidad y preocupación por el árbol es la que
tenemos por el río y el mar, pues el árbol simbólico de los manglares se
transforma en el golfo, abriéndose al océano y, en una mirada interior, deviene en el
eucalipto andino (Alausí y Cuenca en el corazón) y las olorosas campanillas que
son su fruto. Y ese mismo árbol <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>está más
allá también, siendo arbusto, madera que devuelven las olas y la marejada en la playa. Así, a la
inimitable amazonía que se apodera de efímeros países latinoamericanos la sucede el
fondo del mar con sus desconocidos arrecifes y criaturas de las profundidades. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;">He desvariado a propósito en las líneas anteriores
porque el árbol del pasado efímero subsiste junto a otras realidades naturales.
Y no hay ser humano que escape a su amor o furia. Ahora lo sabemos. Ahora, solo
nos va quedando el recuerdo privado o la imaginación del pintor que con tristeza ve que
aquella distopía escuchada en su infancia se va haciendo nefasta realidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiiSN-c8uJeBA87Qi75CHquvRKNnpXlGfF6vwsC5wT2rsNRYdn5ju-xxoBQQOeIVOq9hPUFDZSG6kaJbsiEtQj6SfriEyRStcIqGmqDF4sN1YaN2O16f_pvjyT_bHu37ELzjOw75ldhpCuJNZd8F1V0KjD58WVTIHw8WXyguIXpUzwhUV1UUqzzWurr-A/s750/arboles%203.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="750" data-original-width="600" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiiSN-c8uJeBA87Qi75CHquvRKNnpXlGfF6vwsC5wT2rsNRYdn5ju-xxoBQQOeIVOq9hPUFDZSG6kaJbsiEtQj6SfriEyRStcIqGmqDF4sN1YaN2O16f_pvjyT_bHu37ELzjOw75ldhpCuJNZd8F1V0KjD58WVTIHw8WXyguIXpUzwhUV1UUqzzWurr-A/s320/arboles%203.jpg" width="256" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 14pt; line-height: 107%;"><o:p>[</o:p></span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 14pt;">En: </span><span style="font-family: Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 18.6667px;">https://fundacionlaiguana.org/arboles-patrimoniales-guayaquil/]</span></span></p><div><span style="font-family: Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 18.6667px;"><br /></span></span></div>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-72745992521451709072022-07-26T15:58:00.005-07:002022-08-08T06:16:44.883-07:00Guayaquil: Ida y vuelta <p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh_ybXiEIJc8EVKiNolHFZ2ySiYXkKV86gL2avxfb7tU8etjLJwL_GrUNZ14PCVwxPAEgU5Ltoigz8en2nQvxVjyzMI7O2WzMCh1l74fZaYGPH6TKARYbheJSdDjmw-vn5AwZHn-W85E1KCmF_chHRuLJaXX_G481MKeggBR3HIbpGz_IKO6XaA9crcAg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh_ybXiEIJc8EVKiNolHFZ2ySiYXkKV86gL2avxfb7tU8etjLJwL_GrUNZ14PCVwxPAEgU5Ltoigz8en2nQvxVjyzMI7O2WzMCh1l74fZaYGPH6TKARYbheJSdDjmw-vn5AwZHn-W85E1KCmF_chHRuLJaXX_G481MKeggBR3HIbpGz_IKO6XaA9crcAg=w300-h400" width="300" /></a></div><br />[Portales del norte, calles Pedro Carbo y Urdaneta]<div><br /><div>Luego de siete años de no visitar Guayaquil, hicimos un viaje de poco menos de tres semanas. Esta vez (y por primera vez) no tuve tiempo para ver la ciudad, amigos y parientes, como antes. En las pocas ocasiones que salí, me vi convertido, de la mano de un personaje de cuento francés que leí por esos días, en una especie de turista que regresaba a la escena de viejas historias, como testigo presencial de los hechos. Veía calles, edificios y gente a la distancia, como si viajara en un coche decimonónico, buscando sin lograr una sensación firme, un sentimiento concreto del entorno, que me dijera algo. Pero era solo un nivel de sensibilidad.<p></p><p>En esos días no le tomé el pulso a la vida ni me integré a ninguna reunión. ¿Cómo es Guayaquil en semejantes circunstancias? Muy diferente. ¿Cómo encontraba la ciudad? Me preguntaron varias veces. Respondí esto: Calles limpias pero casas y edificios sucios, descuidados, confiados al desorden y a la poca gana de hacer la limpieza. Encontré menos ruido también, a pesar de los perros del vecino ladrando por cualquier cosa y a cualquier hora, o los conductores usando el pito como forma de comunicación. Encontré un Guayaquil hasta cierto punto paralizado, quizá por los tantos problemas que aquejan la ciudad, empezando por el Covid y los errores del Municipio, o por la improductiva huelga nacional, la falta de seguridad y el cambio de la administración del tiempo diario (mis amigos me comentan que ya no salen por la noche), o quizá por la desesperanza de tener otro gobierno mediocre que ni la derecha ni la izquierda quieren. </p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjQskTrH88fskjseQj-HDhHePLEpRuoA5P4dcngU-e4lPhbgEA-liCtzl7ZOG2v9z_WrJd9g6ffvCyWo1jQmWnGaGBaBUbcxVua9whRJI7nGdgQu4U2ovotUm_2gjRqPiotoHFOyANCb_llayd3u1C6m4a6lN0JfFxh28ibxLt1B2MfSWcnSwysswjU2A" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjQskTrH88fskjseQj-HDhHePLEpRuoA5P4dcngU-e4lPhbgEA-liCtzl7ZOG2v9z_WrJd9g6ffvCyWo1jQmWnGaGBaBUbcxVua9whRJI7nGdgQu4U2ovotUm_2gjRqPiotoHFOyANCb_llayd3u1C6m4a6lN0JfFxh28ibxLt1B2MfSWcnSwysswjU2A=w320-h240" width="320" /></a></div><p>[Arbol en vereda detrás del estadio Capwell]</p><p>Pero vi también el otro Guayaquil, el olvidado y querido que mantiene su dignidad y su árbol viejo en la esquina y a rajatabla, vi ese Guayaquil de <i>Samborondón </i>y <i>Puerto Santa Ana</i>. Me gustó encontrar sus cafés, bares y restaurantes de buen gusto, limpios, con clientes agradables que pueden pagar y disfrutar esas comodidades. Me pareció admirable que las siempre atacadas burguesía y oligarquía nativas den muestra de pujanza y sentido del futuro. (En sociedades como las nuestras, imaginar el futuro no es cosa fácil). A pesar de sus innegables errores, el único sentido de futuro que ha existido en la humanidad, históricamente hablando, es de estas clases. (El resto es tiempo circular). Y es hacia allá que debería apuntar la ciudadanía. No a ser todos pobres, ni siquera de clase de media, sino a ser gente con dinero, oportunidades, buena educación y acceso a una sofisticada cultura urbana de deberes y derechos (mi suegra Rucha y mi cuñado Jaime están conmigo en esto). Obviamente, las ideas que anoto son resultado de los dieciocho días que pasé en Guayaquil. </p><p>Mi estadía fue corta pero hubo dos momentos en los cuales pude ser, a mi manera, "<i>le promeneur solitaire</i>" que escribía Rousseau hace más de doscientos años. </p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhLWwoKEP8-v_lnt3j5hY4SaFyZDWyOl41h4syWUmMQlePDk93p3kIFn7pfKbpD7xK22fyFedZN7RlEfbhZ0k3mDQVk5VY7fJLebwDuH9ZBVjiJXOfnU5_qVjPfoMhd4LVMbZ7jbNWoYz6qLAcbqwxv5F4cUZ_WfV9csZmQYyERk3fN7pEtzrnSjfshCw" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhLWwoKEP8-v_lnt3j5hY4SaFyZDWyOl41h4syWUmMQlePDk93p3kIFn7pfKbpD7xK22fyFedZN7RlEfbhZ0k3mDQVk5VY7fJLebwDuH9ZBVjiJXOfnU5_qVjPfoMhd4LVMbZ7jbNWoYz6qLAcbqwxv5F4cUZ_WfV9csZmQYyERk3fN7pEtzrnSjfshCw=w240-h320" width="240" /></a></div><div><br /></div>[Conde Martillo en <i>Puerto Santa Ana</i>]<br /><br /><p></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjRgcSK5cdOUfuN1cVd7S35zxDvEsikx6zxP5z04ZSJdj59iZwSEFhoNNhYC2ueYurnOea3yGerJE1am3YIy5YSHUUawsj9zCMSH2fZVudCvkVmqVOECqDGk7RuI97QWPau38nazZSr9Iq-dfj3ZJzHjHkLKPDCy78uiCR98s5hFx6EjF01-GwJttajbg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjRgcSK5cdOUfuN1cVd7S35zxDvEsikx6zxP5z04ZSJdj59iZwSEFhoNNhYC2ueYurnOea3yGerJE1am3YIy5YSHUUawsj9zCMSH2fZVudCvkVmqVOECqDGk7RuI97QWPau38nazZSr9Iq-dfj3ZJzHjHkLKPDCy78uiCR98s5hFx6EjF01-GwJttajbg" width="320" /></a></div><p></p><p>[Miguel Donoso Gutiérrez y Conde Martillo en <i>Puerto Santa Ana</i>]</p><p>El primero es una caminata que ocurre en el<i> Barrio del astillero.</i> </p><p>Como hombre que se debe a la geografía emocional del sur, siempre siento una deuda con esa parte de la ciudad (allí vivieron mi familia y mis amigos, se forjaron las tradiciones y las canciones, tangos, pasillos y boleros por más señas) y recaigo en el paseo a pie. Pero ahora estaba solo. No había cholo Cepeda ni sobrinos para acompañarme. Tomé un taxi desde <i>Urdesa Norte </i>hasta El Oro y Eloy Alfaro. El taxista era esmeraldeño y me contó su vida mientras esquivaba vehículos y transeúntes. Un buen tipo, me dije cuando dejaba el carro y compraba una mascarilla en la esquina. </p><p>Empecé por el <i>parque Calderón</i> y vi lo que quedaba del <i>Teatro Arsenal</i> al que fui un par de veces con mi viejo (o acaso mi hermana Lupe). Luego seguí por esa calle sin nombre que pospone el malecón de la ría, tomando fotos, saludando con la gente, imaginando si aún el cabezón Medina (compañero del <i>Alfaro</i>) trabajaría por ahí (de Posorja, navegante, venido de gente brava). Y en esa lenta caminata no ausente de dudas y temores, pasé también por la <i>Empresa Eléctrica</i> y los pocos kioskos con comida típica y cerveza helada, lugares que cuarenta años atrás eran rincones para celebrar el amor con besos y caricias.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhX5sscDUY2b0PWO2bZ6ex01Xm2lrUTxl15H4Ho9jGcZW5AayQHGRdIpFZ3pZuu7K0Oyvgcx3n5LR_82xuRAIJt1f-1RNXrpajbf-yk7cBXbo1nLV6lVFTjv3G5AVDqem-hZ8RUjHj0nlv4uEjixT4YpQ1sSuTnxYUnpMpuF6Ro9r2fXqStdcq0-DaWTA" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhX5sscDUY2b0PWO2bZ6ex01Xm2lrUTxl15H4Ho9jGcZW5AayQHGRdIpFZ3pZuu7K0Oyvgcx3n5LR_82xuRAIJt1f-1RNXrpajbf-yk7cBXbo1nLV6lVFTjv3G5AVDqem-hZ8RUjHj0nlv4uEjixT4YpQ1sSuTnxYUnpMpuF6Ro9r2fXqStdcq0-DaWTA=w320-h240" width="320" /></a></div><br />[Una calle que en el recuerdo no tiene nombre]<br /><p></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgcN8Nf-yCinRdQ4xcQjEkEx2fidkwvFoLGRK9KHYZahhm4G7U8HOZ3duPeF8yDuK5uT0g_hUoM_lWB8wpsROnmdjtswAwyy7V0jpH0-a5OGPE_wK69hTEcS79hZcULr_fmrVu_8205BDQQXOGHIN8T4ZIDAI1mSlYX40SEIRPPK77XppX6Tq_KdyFv1g" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgcN8Nf-yCinRdQ4xcQjEkEx2fidkwvFoLGRK9KHYZahhm4G7U8HOZ3duPeF8yDuK5uT0g_hUoM_lWB8wpsROnmdjtswAwyy7V0jpH0-a5OGPE_wK69hTEcS79hZcULr_fmrVu_8205BDQQXOGHIN8T4ZIDAI1mSlYX40SEIRPPK77XppX6Tq_KdyFv1g=w240-h320" width="240" /></a></div><br />[Viejos astilleros]<br /><p></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjhZ05-AL8TfbW2LcSPzVLZe_gmyBUYIU1gnCM1eW5_7qRsYVtbga4W2X_7PmwpW0BqxciIP_IcAor6W1E06Wd9XsLMt2TQofvtEWkPcGfWcCRPfq1Q8i6nVTEOT_UsMvT6NEejvEjnapXUabDNsJrjZ1nZuTw2Vbt_BfUg5Bkj3q43MEvrxUfUAw3XPg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjhZ05-AL8TfbW2LcSPzVLZe_gmyBUYIU1gnCM1eW5_7qRsYVtbga4W2X_7PmwpW0BqxciIP_IcAor6W1E06Wd9XsLMt2TQofvtEWkPcGfWcCRPfq1Q8i6nVTEOT_UsMvT6NEejvEjnapXUabDNsJrjZ1nZuTw2Vbt_BfUg5Bkj3q43MEvrxUfUAw3XPg=w240-h320" width="240" /></a></div>[Parque cerrado]<br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgIhT-xhJkNhAVcnnMe3rr8YC5ld8pLyQnOnU-a8gndgD4XTQt4PlY6_IVbbalBe73MHdhRwVthAEOgB-nvokYWgdkYjnND2qqHuih2J6nTHff6677hIGXBsjGTt9nvS4mWEDHZn7ebLm5pokGEMcZjpCYEo18XwsjzUOA1TZaKTDWAMRycLYwhf2p_2g" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgIhT-xhJkNhAVcnnMe3rr8YC5ld8pLyQnOnU-a8gndgD4XTQt4PlY6_IVbbalBe73MHdhRwVthAEOgB-nvokYWgdkYjnND2qqHuih2J6nTHff6677hIGXBsjGTt9nvS4mWEDHZn7ebLm5pokGEMcZjpCYEo18XwsjzUOA1TZaKTDWAMRycLYwhf2p_2g" width="320" /></a></div><div><br /></div>[Al fondo, la ría]<br /><p></p><p>Llegué luego hasta Letamendi. Ya había tomado varias fotos pero era aún temprano (no cuento ahora la historia del marino con el que hablé antes de empezar el recorrido, otra vez será). Yendo hacia el fondo de la calle, de pronto vi la puerta del <i>Instituto Nacional de Pesca</i>, que había olvidado por completo. Allí investigué y escribí mi tesis colegial sobre exportación de camarones (un <i>boom</i>, por el 77). Vi la puerta del INP y me puse triste. Pero no fue por mis investigaciones ni las conversaciones con un estudiante de biología marina que se iba a las Galápagos, que por esos días frecuentaba la biblioteca (yo había viajado a <i>Las Encantadas</i> el año anterior). No. Fue por el tiempo vencido, caído, muerto y pasado que me había dado el lujo de perder y me hablaba desde ese lugar. Yo, que con tanto afán he tratado de cultivar de arte de la memoria, simplemente lo había olvidado. </p><p>El resto del recuento es similar a su inicio pero ausente de conversaciones. Hay solo sentimientos que no viene al caso mencionar. En ese final, entro por la zona aledaña a la <i>Urna de Cristal</i> y, de pronto, me veo frente al magnífico Guayas, ambos siempre solos. Yo, sentado en una banca que mostraba la isla Santay (una película debe filmarse ahí, al estilo de los franceses o Tarkovsky; la debe hacer Fernando Mieles cuando deje de ocuparse en lo secundario), miré por enésima vez el sur, los <i>Molinos del Ecuador</i> interrumpidos por un puente peatonal ahora inservible. Caminé por el <i>Malecón 2000</i> hasta llegar al Municipio. Traté de encontrarme en su vegetación cercada, en la gente que pasaba, en sus chistes y bullicio. Y, por suerte, algo de mí fue recuperado.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEg_TI71O2EDBH_1U5VaFD0ElNwUkJjEgQJJ1cXpnUfyauPtrzw5iOxmRxOIvJ5gmDYT59A89eZo-av4xrkH9vCt-hxXYDxU_rhK3G-7mjsMWyqbhX8v8CVhc-w02MWIRh-DqPfILCpPC_VDiZ5lycw_pGd-JZmEPnYZCS201F2b2MpqddGr83sKEHIX0g" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEg_TI71O2EDBH_1U5VaFD0ElNwUkJjEgQJJ1cXpnUfyauPtrzw5iOxmRxOIvJ5gmDYT59A89eZo-av4xrkH9vCt-hxXYDxU_rhK3G-7mjsMWyqbhX8v8CVhc-w02MWIRh-DqPfILCpPC_VDiZ5lycw_pGd-JZmEPnYZCS201F2b2MpqddGr83sKEHIX0g=w320-h240" width="320" /></a></div><br />[Sur del <i>Malecón 2000</i>]<br /><p></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhQmRgUyY4zwGeIRw0UJN1cElGAVYIHsFZyb2d8AlwW8Xxcbg4m8unTZubKwMqtHxleSun9SfDhY0TcT0ysez4uQsXZ_l1zqPUuD6qx2TeZ1au-DTzcpoVT_3Jn8NfX0MpvN6Gb6j7EUGz1SCoja9NczBnAXSrDnEEDu9Ug711czLmZ9nq3CUhr141aQg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhQmRgUyY4zwGeIRw0UJN1cElGAVYIHsFZyb2d8AlwW8Xxcbg4m8unTZubKwMqtHxleSun9SfDhY0TcT0ysez4uQsXZ_l1zqPUuD6qx2TeZ1au-DTzcpoVT_3Jn8NfX0MpvN6Gb6j7EUGz1SCoja9NczBnAXSrDnEEDu9Ug711czLmZ9nq3CUhr141aQg=w240-h320" width="240" /></a></div><div><br /></div>[Un gran árbol también cercado]<br /><p></p><p>El segundo momento ocurre junto a mis ladies, en <i>General Villamil, Playas</i>.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj70tbz1xp-0CuGDyNyVkUrSGbLPxd0j2OkfszqNF8BNnVj5RrKOl4wpm37P8GEE6RQa5PstYR-wBwrAtFRDa96iTLaWDw9SqbyFQAunUcOrtZyCMX5fmnMpinfEnEyULuwPkXh9CLDEugaEr4cECwjyyJ8rGl0J8z88V1tA8GgTFLLB3aXf2BP1-RWtg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="701" data-original-width="526" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj70tbz1xp-0CuGDyNyVkUrSGbLPxd0j2OkfszqNF8BNnVj5RrKOl4wpm37P8GEE6RQa5PstYR-wBwrAtFRDa96iTLaWDw9SqbyFQAunUcOrtZyCMX5fmnMpinfEnEyULuwPkXh9CLDEugaEr4cECwjyyJ8rGl0J8z88V1tA8GgTFLLB3aXf2BP1-RWtg=w240-h320" width="240" /></a></div><div><br /></div>[Ladies afanadas buscando el mar]<br /><p></p><p>Conduje Guayaquil-Playas-Guayaquil. Al segundo día, tratando de recordar la última vez que estuve en <i>Playas</i>, acaso 7, 10, 15 años atrás, noté que por esos rumbos estaba la casa que mi hermano Iván (Kukuku) rentó por tres o cuatro años, a fines de los 80s e inicios de los 90s, y que marca el fin de una época para mi familia y amigos (ese deber ser el segundo tomo de una trilogía barrial, luego de "los patriotas del sur", debe llamarse: "de la ría al mar" y ser copletada por: "del mar y el tiempo"). Al llegar al hotel, el día estaba nublado. Luego de la normal tormenta en paseos familiares, Fabiana quiso ir al mar. Estaba encantada con la arena, la brisa, los cangrejos escondiéndose en las conchas y la furia de las olas que arrastraban mar adentro. Yo me sentía enfermo de tiempo pero supe que mi cura eran mis hijas. Desde el mar vimos a Fabia y Fabiola sentadas en la arena y una caminoneta cargada de redes y pescadores. Era una mañana hermosa y llena de vida. Luego, Fabiana quiso quedarse en la piscina, bailando música chichera mientras la mama filmaba, tomaba fotos y nosotros nos reíamos. No había nadie en el hotel.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiUhi-ikYvA_xQEa2RZfwP6Vbu_FGWgQo1V7sh8rTsp6YZbYDTSDLkbiPOr_svrmbzrmOR6jZr_fUbCz5ps4E60VTFfRWvYY8umCjdhv-PEPjp4X6mGHV2pB5kt67HyoBybZmT8leJPa83KZb-muGYRfpQiV_ee8-Cjktg5GpJHYJL7UUGqGB3Qy_O_yA" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="701" data-original-width="526" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiUhi-ikYvA_xQEa2RZfwP6Vbu_FGWgQo1V7sh8rTsp6YZbYDTSDLkbiPOr_svrmbzrmOR6jZr_fUbCz5ps4E60VTFfRWvYY8umCjdhv-PEPjp4X6mGHV2pB5kt67HyoBybZmT8leJPa83KZb-muGYRfpQiV_ee8-Cjktg5GpJHYJL7UUGqGB3Qy_O_yA=w240-h320" width="240" /></a></div><br />[foto de Fabiola]<p></p><p>A la mañana siguiente, el calor humano del personal se notaba en un desayuno delicado, agradable y reparador. Las cosas auguraban buen tiempo. Sentimos otra vez alegría y sosiego. La madre estaba más tranquila y las hijas contentas. Hacia la tarde, mientras esperaba un taxi para comprar la cena, de sorpresa me vi frente a la casa que mi hermano alquilaba. Era real. Frente a esa casa, antes solitaria, al borde del pueblo y con el gran mar al frente y una playa en la que todos jugaban fútbol, ahora estaba el hotel y muchas casas que se habían llevado el paisaje natural. Tomé una foto y consternado le conté eso a Fabiola. Me dijo que mi madre, padre o hermano o todos ellos me habían enviado ahí, que no era coincidencia. Yo, un hombre solitario hacía más de treinta años, ahora estaba frente a la misma casa, la misma arena y el mismo mar pero con mis hijas, como diciendo oh tiempo oh mar éstos son tus frutos.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiA12XxdghlhL21eHUMEEZb9Z_kVtNbeT_AsJaj69FzTv3WIrth-wnM915qnxI5zfWn2LrJSYAOTlp0F0ZCBgY53Wnr7GLrw4usyjC-EZRWpmrHH1tkeyUtoON-9EhFNcErRAAe4HVv32MrUCrU021ICFyiyTB5rU7ui0ltI1Zxb_pigt4QR-XmZ-DGiA" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="501" data-original-width="526" height="305" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiA12XxdghlhL21eHUMEEZb9Z_kVtNbeT_AsJaj69FzTv3WIrth-wnM915qnxI5zfWn2LrJSYAOTlp0F0ZCBgY53Wnr7GLrw4usyjC-EZRWpmrHH1tkeyUtoON-9EhFNcErRAAe4HVv32MrUCrU021ICFyiyTB5rU7ui0ltI1Zxb_pigt4QR-XmZ-DGiA=w320-h305" width="320" /></a></div><br /><p></p><p>[Casa de vacaciones en <i>Playas</i>]</p><p>Regresamos a Guayaquil, pero no del todo. Algo de nosotros, acaso olvidado, salió a flote. En realidad nunca nos fuimos. "Decir adiós es jugar a despedirse", anota Borges. Y Brama Kumaris Cocojox me recuerda que hace mucho advertí nunca volvería a Guayaquil. Puedo declarar hoy con confianza que mejor no decir nunca ni tampoco "ahora la suerte ya está echada". Puede que sí, puede que no. Pero no lo sabemos.</p><p>Así ocurre con los guayaquileños, tenemos nuestro propio lenguaje y también nuestras propias maneras de vencer el tiempo a través del recuerdo, de recuperar geografías de las cuales fuimos parte, no importa aunque solo sea imaginariamente. (La gente de Alausí y del barrio <i>San Blas</i> de Cuenca saben a qué me refiero). </p><p>[Participaron en este viaje, también y a su manera: Ruth Poggi, Miguelito Donoso Gutierrez, Jorge Martillo, Elsa Iturburu, German Simisterra, Verónica Pombar -la Chocota- Helga Ayala Poggi -la Satanasa- , Servio Zapata, el cacho Bardales, Galleta, Nina y Camacho, las hijas de todos y etcs].</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiK2mdc4F5riGdVXZ4HnoVeAPtFczMqZywW75Fx0-0ckjYbpB26laqXmgzKY7hFpERkuurqXOWHBQjf6BR2TskEq2xa6jK9A5GWtdvqSn1FEhsnUScfHoawWQoivMkJhwuqCq0ZDtVMv1naPJPEsF98lHRCl2oNVJuRh4r6SgtZkOUBa8LrUlklX07BXg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="935" data-original-width="526" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiK2mdc4F5riGdVXZ4HnoVeAPtFczMqZywW75Fx0-0ckjYbpB26laqXmgzKY7hFpERkuurqXOWHBQjf6BR2TskEq2xa6jK9A5GWtdvqSn1FEhsnUScfHoawWQoivMkJhwuqCq0ZDtVMv1naPJPEsF98lHRCl2oNVJuRh4r6SgtZkOUBa8LrUlklX07BXg=w225-h400" width="225" /></a></div><br />[Fabiana y el mar]<br /><p></p><p><br /></p><p><br /></p></div></div>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-44420251620226133982022-04-08T07:50:00.001-07:002022-04-08T07:50:07.635-07:00Prolegómenos para hablar de la selección ecuatoriana de fútbol<p>Recordar cuántas veces ha clasificado Ecuador al mundial de fútbol es posiblemente el inicio de una conversación interminable. En ocasiones, todo empieza por un comentario mordaz, una crítica rápida o una alegría y orgullo que imaginariamente nos llevan al cielo.</p><p>Sin embargo, hay una historia detrás de cada evento, y en los detalles de la crónica se esconden las razones, los bemoles y los temores. El caso que ocupa el imaginario de los ecuatorianos es hoy la selección de fútbol que clasificó con tropiezos al mundial. Para hablar del tema pongo a consideración los siguientes puntos:</p><p>1- No olvidar el pasado "glorioso" de cuando jugaba Spencer en Peñarol, Vinicio Ron en la UC Católica, el "pato" Echeverría en la heorica defensa del desaparecido América, los inconquistables del Nacional con "cielito" Villafuerte armando la jugada, Nieves dejando en el piso a todos y "el bacán" Delgado en el arco. Recuperar ese pasado que con tanto énfasis escribe desde siempre el cronista Ricardo Vasconcelos y dejar que los lejanos recuerdos de Bolaños, "pereque" Lasso, el Jechu Cárdenas y Luisito Lamberck nos distraigan nuevamente como lo hicieron en nuestra infancia y adolescencia. Acaso Gavica y luego Holger Quiñonez y el resto de los que aparecen en la imposible selección ideal:</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj2NH0vw5JRG3ySVg1P--201X-IjdT78Rworo8U_Q23D_3yzEPquv1IRGuQVlrJxrmK8kPt9QnYkO1l88sYNqsUKt_Ya9uXwCpVfk5pPBopG1SLgXEKqh6d6sOKUCR7pDOZhGQkBW0NE6Xp1t4bdEwxMuh-fFMN9KsgNxpdSe9OuxLQnICmzFUvqvo7gg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="527" data-original-width="320" height="454" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj2NH0vw5JRG3ySVg1P--201X-IjdT78Rworo8U_Q23D_3yzEPquv1IRGuQVlrJxrmK8kPt9QnYkO1l88sYNqsUKt_Ya9uXwCpVfk5pPBopG1SLgXEKqh6d6sOKUCR7pDOZhGQkBW0NE6Xp1t4bdEwxMuh-fFMN9KsgNxpdSe9OuxLQnICmzFUvqvo7gg=w337-h454" width="337" /></a></div><br />2- Tener presente el origen de sus jugadores, apabulladoramente de clase social baja y etnias fuente interminable de ataques racistas que afloran en la medida en que se pierde el partido. Y, en la misma linea, las dificultades y falta de apoyo que los jugadores deben vivir en su camino a un triunfo atlético, acaso económico, que solo muestra las excepciones de la regla.<p></p><p>3- Introducir el complicado tema de la técnica (o falta de ella) con la que juegan. y el claro retroceso en "el tratamiento del cuero", así como lo escandaloso que resulta que no sepan parar un balón o dar pase a ras de terreno porque les rebota como si fuera pelota de hule en cancha de cemento. O lo triste que es verlos patear solo una pierna, cuando el resto del mundo, sobre todo en los países de las grandes ligas, todos son ambidestros. </p><p>4- No olvidar inestabilidad, oportunismo y corrupción de los dirigentes a cargo de la selección, lo cual es sintomático de la corrupción estructural, mundialmente conocida, de Ecuador. Son estos dirigentes quienes llevan gran parte de la culpa del retroceso técnico; con sus planes de corto plazo que los avalados siempre por la macro estructura de la mafia deportiva que llaman FIFA. A ello, súmese el estrambótico proceso para contratar a cualquiera DT que vean por ahí y puedan mangonear, alguien de segunda quien, aunque no lo fuera, dada la incapacidad organizativa del medio, termina volviéndose irremediablemente mediocre. (Asunto similar se ilustra si comparamos a Independiente del Valle con Emelec: no es un problema solo de contratar un buen DT sino de que la estructura laboral funcione. Los del Valle les dan cátedra empresarial a los intrascendentes de Neme y compañía).</p><p>5- darse un baño de realidad y ubicarse en el tiempo y en el espacio: que Ecuador haya clasificado es, en gran parte, porque el nivel del fútbol sudamericano de hoy es deplorable; y ellos resultaron ser los menos malos. Por lo tanto, que pase de la primera ronda en el Mundial será solo producto de un milagro o de elementos externos. Así que, aquello de rezos y de que "la fe es lo último que se pierde" lastimosamente no cuentan a la hora de los hechos. Estos siguen su propia dinámica.</p><p>6- Con la mano en el pecho, reconocer que "esto es lo que hay". Y por ahí seguimos, como sea, peleados o agarrados de la mano. De esta camioneta nadie se baja. No por patriotismo sino por realismo: esa selección, públicamente, somos todos nosotros con lo bueno y lo malo, con sus retrocesos y la necesidad irremediable de seguir caminando. A Ecuador no lo venció el mortal COVID, ni la corrupción galopante, ni los viejos o improvisados políticos, ni las derrotas históricas que son más que la de Alfaro. No lo venció nada ni nadie, pero sí nos dejaron lastimados. Y, por eso, sin dudas y urgentemente, hay que seguir. Ley de la vida.</p><p>7- Olvidarse entonces de "la siguiente ronda". Ver lo ocurrido con calma y madurez. Desearle buena suerte a los muchachos porque sus limitaciones son las nuestras, aunque sus aciertos solo sus aciertos pero el resultado es resultado para todos.</p><p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiy6vbdvuvsHRhR79-DVLafVfwsZqCqlKWyKqb_XS7jY530mNdckB8MuerAO3Mcuap6cK9zGedJEWE9Z1MMTSOnMNrb3EqX1joaNonWS7lPQEo3vT93sNGIOCJTJjpsyvDq0q3okKKbQZ2jvoHSrFGK4S0mEP9Pa3DjVmf2sTGn5NjBhAQFiccRQspJVA" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="479" data-original-width="845" height="296" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiy6vbdvuvsHRhR79-DVLafVfwsZqCqlKWyKqb_XS7jY530mNdckB8MuerAO3Mcuap6cK9zGedJEWE9Z1MMTSOnMNrb3EqX1joaNonWS7lPQEo3vT93sNGIOCJTJjpsyvDq0q3okKKbQZ2jvoHSrFGK4S0mEP9Pa3DjVmf2sTGn5NjBhAQFiccRQspJVA=w446-h296" width="446" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><br /><p></p><p><br /><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-3445004400607499022022-03-11T18:42:00.004-08:002022-03-14T13:17:31.624-07:00el hombre que caminaba junto a su mujer y el celular con música country<br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhXpE_yOuMQstq5P-Rlsj_WHskLQeEA0w5xpWQFCSRtvomzE7dH0yX774lIeEE05BLVNWZq2_sKXFMeR8_m06PL3JSG2qkIga0Kf1xw7hxnrWhDlj0KJFx6_5UojpeF-YnHTYrnD_mQjdCELAtQEXJu9mlY-z0EBR0IwBxUqdqotot4C1-dyTO4FpSw6w" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhXpE_yOuMQstq5P-Rlsj_WHskLQeEA0w5xpWQFCSRtvomzE7dH0yX774lIeEE05BLVNWZq2_sKXFMeR8_m06PL3JSG2qkIga0Kf1xw7hxnrWhDlj0KJFx6_5UojpeF-YnHTYrnD_mQjdCELAtQEXJu9mlY-z0EBR0IwBxUqdqotot4C1-dyTO4FpSw6w=w240-h320" width="240" /></a></div><br /><br /><div>el hombre que caminaba junto a su mujer y el celular con música country, <br /><br />se entusiasmó cuando le pregunté quién cantaba.<br /><br />elvis presley, contestó. <br /><br />¿no es ray charles? <br /><br />la esposa, que avanzaba delante de nosotros<br /><br /><div>afirmando con la cabeza exclamó: ese no es presley, suena más a ray charles. <br /><br />el hombre revisó la lista y confirmó que era el pianista y me conversó<br /><br />de las canciones que su hija le ponía en la lista.<br /><br />mientras caminábamos me hablaba de su dieta, <br /><br />de que antes hacían ejercicios en casa pero que les resultaba aburrido. <br /><br />abajo, en las improvisadas canchas de raqueta, jugaban con entusiasmo. <br /><br />eran los mismos desde que abrieron el gimnasio luego de dos largos años de epidemia<br /><br />parejas que se reían y desafiaban con los golpes.<br /><br />el hombre al despedirse me dijo: disculpe, yo sé que hablo mucho. <br /><br />sonreímos y nos hicimos adiós con las manos mientras bajaban las escaleras.<br /><br />me quedaba mucho aún.<br /><br />la mujer obesa que iba delante de mí levantaba los brazos<br /><br />y hacía movimientos circulares con las muñecas <br /><br />tenía el pelo corto y rubio, ojos azules diminutos y una mirada tímida.<br /><br />saludé también con otro caminante del tiempo ido<br /><br />un hombre delgado y bajo, acaso mayor que yo, pero veloz <br /><br />que a veces daba vueltas conversando con larry. <br /><br />larry, el que tiene un hijo que vivió en guayaquil y luego se fue a puerto rico <br /><br />y ahora está en new orleans. solo espero que consiga algún título universitario. <br /><br />es lo único que le pido, me confesó <br /><br />mientras su esposa nos dejaba atrás, preparándose para la maratón de la primavera.<br /><br />éramos los últimos sobrevivientes del siglo de las máquinas<br /><br />ellos y yo y los que jugaban raqueta y el hombre negro que nos pasó callado<br /><br />con su gorra de veterano de guerra de vietnam.<br /><br />y también las dos mujeres mayores que siempre conversan y saludan <br /><br />y parece que viven su mejor edad.<br /><br />por la tarde, en casa ya, esperamos a edgar<br /><br />que vino para lo de la cocina. <br /><br />todo era asunto de saludos, medidas de anaqueles y consejos para que luciera mejor <br /><br />hasta que, sin darnos cuenta, nos empezó a conversar de su hija <br /><br />que había fallecido al poco de dar a luz y ahora ellos cuidaban al niño.<br /><br />un amigo que sabía lo ocurrido le dijo que si quería dejar de trabajar,<div><br /></div><div>dejar las cosas a medio talle, podía hacerlo<br /><br />abandonarlo todo en ese momento e irse a casa, si le daba la gana<br /><br />porque necesitaba tiempo para pensar en lo que había ocurrido.<br /><br />lo escuchamos callados y un dolor se me fue armando en el pecho<br /><br />uno de esos dolores rebeldes que aprietan desde adentro y desde adentro llaman<br /><br />un dolor de voces y sollozos que solamente oyen los sordos.<br /><br />he pensado en todo lo que nos contó y recordado a la gente que va al gimnasio<br /><br />a sacarle tiempo al tiempo y el último soplo a la vida.<br /><br />es como si todo se estuviera cayendo, me digo <br /><br />(de alguna manera el mundo siempre se anda cayendo)<br /><br />porque las muertes no cesan y el temor crece y también la sonrisa y la incredulidad.<br /><br />por suerte, me digo, por costumbre o por pereza frente a la derrota.<br /><br />¿qué hago escribiendo un poema? (yo que dije que ya no escribiría poemas).<br /><br />no es un poema, me contesto, es solo una llamada de atención<br /><br />la postal en blanco y negro de una ciudad que no conocí <br /><br />que me acaba de llegar en el correo de la tarde.<p><span style="color: #050505;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="color: #050505;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/BsNFkvuLonA" width="320" youtube-src-id="BsNFkvuLonA"></iframe></span></div><span style="color: #050505;"><br /><span style="background-color: white; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><br /></span></span><p></p><p><br /></p><p><span style="color: #050505;"><span style="background-color: white; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><br /></span></span></p><p><span style="color: #050505;"><span style="background-color: white; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><br /></span></span></p><p><span style="color: #050505;"><span style="background-color: white; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><br /></span></span></p><p><span style="color: #050505;"><span style="background-color: white; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"><br /></span></span></p></div></div></div>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-87549940733407692962022-03-06T07:25:00.005-08:002022-03-06T08:27:39.328-08:00¿A favor o en contra de Ucrania?<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/S7m8xpZk2qs" width="320" youtube-src-id="S7m8xpZk2qs"></iframe></div><br /><p><span style="font-size: medium;">Estados Unidos vive una división más sobre si apoyar a Putin y su estúpida invasión o a los ucranianos que la resisten. El resto del mundo también está dividido.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Por un lado, el argumento que se escucha es que si tanto nos importa la destrucción de Ucrania deberían importarnos por igual las que ocurren en Africa o el Medio Oriente. A este radicalismo infantil (todo radicalismo lo es) subyace la dicotomía del todo o nada, del blanco o negro, o como diría el siempre desacertado Bush: "están a favor de Estados Unidos o en contra de Estados Unidos". Sálvense los que puedan si están rodeados de gente así, pues la realidad es más compleja y los matices cambian cualquier conclusión apresurada.</span></p><p><span style="font-size: medium;">Por otro lado, en la misma zona de guerra, los ciudadanos rusos, bombardeados por años acerca de supuestas masacres de los ucranianos contra las poblaciones ruso-parlantes que viven en Ucrania- se hacen de la vista gorda y apoyan a Putin en la heroica defensa de sus compatriotas que viven en otro país (aunque ya empiezan a sentir el error en sus bolsillos). Al mismo tiempo, más de millón y medio de ucranianos -mujeres y niños en su gran mayoría- huyen de Ucrania a países vecinos mientras las tropas rusas bombardean ciudades y poblados en el sur. </span></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgpxb-uS_8sADX5nMPj9t0ubuCClssUq_werTr8eNsbN8uZP48zFltrKQ14s5u9VaEvA6zettHA6XJkSEw3QumYjORE17pEutB3QiKo8k3I_Hpcd503flK7C4s02Tbi1FU6csn-4ch_EAwZtClDTtZ6bniNrQYpd4FKS9MgCocgPrhH7Jm0BW__k2MQ1g=s1800" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1800" data-original-width="1800" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgpxb-uS_8sADX5nMPj9t0ubuCClssUq_werTr8eNsbN8uZP48zFltrKQ14s5u9VaEvA6zettHA6XJkSEw3QumYjORE17pEutB3QiKo8k3I_Hpcd503flK7C4s02Tbi1FU6csn-4ch_EAwZtClDTtZ6bniNrQYpd4FKS9MgCocgPrhH7Jm0BW__k2MQ1g=s320" width="320" /></a></div><span style="font-size: large;"><p><span style="font-size: large;"><br /></span></p>Como siempre, calamidades como ésta hacen que la gente saque lo mejor y lo peor de sí misma, de lado y lado y en todas las latitudes del planeta. Una pobre Rusia, cuyo GDP es extremadamente inferior al de China, cree que China es su aliada incondicional (los ecuatorianos sabemos cómo son los negocios y "las inversiones" de China) mientras ésta, poco a poco, se va dando cuenta de que un vecino pobre no es el mejor aliado cuanto un sirviente rebelde. La India juega a la diplomacia de la conveniencia, en parte por supervivencia (sus vecinos China y Pakistán no le permiten otra cosa), en parte por fidelidad a Rusia y en parte por pescar a rio revuelto. Europa, Japón y EEUU están firmes en el boicot económico y militar a Putin. El resto del mundo se mueve en las coordenadas de América Latina, en donde Cuba, Nicaragua y Venezuela apoyan fieramente al reptilineo dictador aspirante a zar. Brasil con Bolsonaro y México con esa flor de mediocridad de presidente se debaten entre jugar a ser duros y sonar inteligentes mientras le hacen el juego a Putin. ¿Y Lasso? Ese no cuenta ni para lavar los platos de los de sicarios de las cárceles de Ecuador.</span><p></p><p><span style="font-size: medium;">La primera pregunta frente a este panorama es ¿cuán bien informado está el público para opinar y tomar una posición? Hay la falsa creencia tercerista de que "hay que escuchar los dos lados", como si hiciera falta escuchar a Hitler para concluir que las 6 millones de judíos que mató de alguna manera, aunque sea en un mínimo porcentaje, son culpables de su destino. Ese tercerismo de que la verdad está en el medio es un invento de los perdedores que promueven mala información para generar un equilibrio de fuerzas. </span></p><p><span style="font-size: medium;">Hoy por hoy hay una sola realidad: un ejército de casi 200 mil soldados ha invadido un país que no lo ha atacado ni puede defenderse. Disparan a civiles, bombardean sus casas y destruyen la infraestructura para que nadie pueda vivir ahí o les cueste mucho reconstruirla. Como siempre, lo hacen en nombre de las causas más nobles, esas que cree cualquiera o se pueden escuchar en labios de Rafael Correa, el que deja que sus amigos roben. Sí, Correa, el cómico que anda contando chistes amargos en TikTok. </span></p><p><span style="font-size: medium;">En Estados Unidos quienes apoyan a Putin y están en contra de los ucranianos (que deben rendirse, que no son valientes, que ellos tienen la culpa, que nunca van a ganar) son Trump, los republicanos, los neo-Nazis y la ultra-derecha en general. El resto apoya al pequeño país, sin esconder sus propios errores, como el dejar que el neo-Nazismo haya crecido, pero sin olvidar tampoco que el presidente de Ucrania es judío (para desgracia de Putin). </span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/5otWuXHUH80" width="320" youtube-src-id="5otWuXHUH80"></iframe></div><br /><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-45052885275238482092022-02-27T08:43:00.005-08:002022-02-27T14:42:21.297-08:00Un toque de bembé para Fernando Nieto Cadena<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhq4uX4u5YjBdAehd09N0wJUbbzaKqX2ZYvoSBq-l5WMmOsRkmqH_Eb6OB5QSxo5l0eoHfMxIQbxbtQ6Lkde2_W2FvDgjHT-gPFPoUe9QqguRTsVvKgJg9VVmDKtqeCEb3SGbbF3xf-Or-wohCOLj_FORz8RGXaXndy8WlqikRhlp0mzQE5-b54ClPOjQ" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="436" data-original-width="395" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhq4uX4u5YjBdAehd09N0wJUbbzaKqX2ZYvoSBq-l5WMmOsRkmqH_Eb6OB5QSxo5l0eoHfMxIQbxbtQ6Lkde2_W2FvDgjHT-gPFPoUe9QqguRTsVvKgJg9VVmDKtqeCEb3SGbbF3xf-Or-wohCOLj_FORz8RGXaXndy8WlqikRhlp0mzQE5-b54ClPOjQ=w362-h400" width="362" /></a></div><br /><p></p><p><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 16pt; line-height: 107%; text-indent: -0.5in;">I.<span style="font-family: "Times New Roman"; font-size: 7pt; font-stretch: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; line-height: normal;">
</span></span><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 16pt; line-height: 107%; text-indent: -0.5in;">“Nieto, dales algo de leer a los
muchachos”</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: medium;">A fines de los setenta Ecuador vivía los últimos años
de la dictadura militar. Estábamos por terminar la secundaria cuando apareció
Gaitán Villavicencio a dictar un seminario de Metodología. Gaitán había llegado
recién de Louvain y su tio, que contradictoriamente era el rector del colegio
puesto por la dictadura con un sobrino comunista, tuvo el acierto de confiar
más en los beneficios académicos que en sectarismo político.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Gaitán, que había leído nuestros poemas en el
periódico mural del curso, nos invitó a una reunión de <i>Sicoseo</i>, taller
literario del que él formaba parte. Yo tenía dieciseis años y empezaba a vivir
el fascinante mundo de las letras. Contentos pero con temor, esperamos
pacientemente el sábado para ir a <i>Sicoseo</i>. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Cuando llegamos nos presentaron a los integrantes. El
mayor era Hugo Salazar Tamariz, hombre de gran experiencia política,
inteligente y de sorprendente calidez, con una voz baja y profunda que
impactaba a cualquiera, uno de los mejores poetas de su generación (podría
ahora mismo recitar muchos de sus versos). <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Entre los demás, la memoria destaca con afecto
a Solón Villavicencio, “un hombre hermoso”, como lo describían las mujeres, muy
diestro en el comentario y el humor. Gaitán, su hermano y anfitrión. Jorge
Velasco, a quien ya había conocido en el colegio Eloy Alfaro, cuando reemplazó
al profesor de literatura y vendió con nuestra ayuda algunos ejemplares de su
primoso libro de cuentos <i>De vuelta al paraiso</i>. Fernando Artieda y Edwin
Ulloa, que escribían usando un lenguaje literario con fuerte basamento en el
habla guayaquileña; Héctor Alvarado, cuyo humor y chispa en la conversación contagiaban
a cualquiera. Estaba ese día, creo, también uno de los tantos visitantes que aparecían
intermitentes por <i>Sicoseo</i>: Hipólito Alvarado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Sentado en una esquina de la sala se encontraba
Fernando Nieto Cadena, el gordo, como le decían. Usaba ya gruesos lentes y un
poco de melena. Era rápido, sencillo y creativo en la conversación. Habló brevemente
con nosotros algo que ya no recuerdo y preguntó, concitando el interés de todos
por la respuesta, qué escritores leíamos. Nos pusimos pálidos, nos quedamos
callados y desde la derrota inquisitorial contestamos casi aullando: David
Ledesma, <i>El Conde de Montecristo</i>, <i>Los que se van</i>. Gaitán, que se
dio cuenta de por dónde iba la cosa, solamente dijo: “Nieto, dales algo de leer
a los muchachos”. Y, partir de ese momento, empezaron a caernos libros nunca
imaginados que devoraba con impaciencia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Las reuniones de <i>Sicoseo</i>, del cual ya era
miembro, ocurrían cada sábado, a las 6 de la tarde. Luego de conversaciones, debates
y planes para el siguiente número de la revista, caminábamos todos hacia la
Casa de la Cultura y el pequeño bar que quedaba junto al parqueadero. El
notable impacto que tuvieron esas reuniones, la amistad iniciada con aquellos escritores
que nos dieron fraternalmente su mano y el acceso a un mundo letrado diferente,
cambiaron mi vida. En cada una de esas conversaciones, reuniones, fiestas y
tertulias que ocurrían con frecuencia, siempre estaba Fernando Nieto Cadena. Era
él quien realmente articulaba a <i>Sicoseo</i> y le daba filosofía, identidad,
organicidad. Su poesía y personalidad imponían el estilo pero de manera
callada, sutil, sin proclamas ni vanguardismos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Siendo Hugo Salazar Tamariz el mayor y poeta más
consolidado de <i>Sicoseo</i>, era tratado por Nieto y todos con admiración,
cariño y respeto. Seguíamos su dirección afectiva, la cual nunca fue en
desmedro de la orientación del grupo ni de las expresiones poéticas más diversas,
privadas y personales que se mostraban en las reuniones. Pero era Nieto el que
con su poesía, calidad humana, ideas y empatía concentraba al grupo. Y por eso
mismo, resultaba aleccionadora su tranquilidad y sencillez, su gran sentido de
humor y su profundo conocimiento literario, siempre a la mano, ausente de poses
y de la vanidad que tanto daño le han hecho a escritores e intelectuales de
América Latina.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Los “demonios interiores” de Nieto, acaso secretos o
privados, aparecían no obstante con furor en el mundo construido en su poesía,
en ese Guayaquil que tanto amaba y conocía y que nutría su palabra. Sus
dilemas, crisis y esperanzas se contextualizaban socialmente en sus obras. De
alguna manera, para mí, el Nieto de los 70s era la continuación de la leyenda
del Medardo Angel Silva de arrabales, tugurios y lecturas abundantes. Por
ejemplo, sus libros <i>a la muerte a la muerte a la muerte</i> y <i>de buenas a
primeras</i> no solo abrieron el lenguaje de los guayaquileños a la poesía (y
viceversa) sino que le dieron a Ecuador un gran empuje en términos del
desarrollo de la lengua poética de ese país y región (es sabido que el habla tropical
de Guayaquil se nutre de varios contribuyentes nacionales e internacionales) y
la ponía al día con sus similares latinoamericanas. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjmyb49sni_EPqKx8qO8VqxFKb4CTkjqczEZW0wcaNKcxsXZ86qGIsOymuM8v62OxLFsWjtGJhEQLhjvhec0QLvFWDOMCo2JjvSS23Tzd8vmjsSjYd61KSAbS-GP_bOXOaXwJ-x75XSnJd3iy2jxlNQFBPsYRVF04_1OQqWl8lW3Ue_60WZH5z0sPTECw" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="360" data-original-width="500" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjmyb49sni_EPqKx8qO8VqxFKb4CTkjqczEZW0wcaNKcxsXZ86qGIsOymuM8v62OxLFsWjtGJhEQLhjvhec0QLvFWDOMCo2JjvSS23Tzd8vmjsSjYd61KSAbS-GP_bOXOaXwJ-x75XSnJd3iy2jxlNQFBPsYRVF04_1OQqWl8lW3Ue_60WZH5z0sPTECw" width="320" /></a></div><br /><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Ya he publicado varias páginas sobre la poesía de
Nieto, a la cual siempre consideré de la más alta calidad expresiva, emocional,
intelectual y humana. Y no creo equivocarme ahora al decir que su valor como
artesano del lenguaje va de la mano con su valor como amigo y maestro (los
buenos amigos siempre son nuestros maestros a su manera). De hecho, de su
generación hasta el presente, no conozco en poesía otra voz más original, mejor,
más sincera y real que la suya, acaso compitan con él los llorados Agustín
Vulgarín o Hipólito Alvarado. Pero volvamos a <i>Sicoseo</i> y a los 70s para
ilustrar esta afirmación.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Trabajamos mucho en esos meses contra la dictadura y
en puertas a las nuevas elecciones. Pintamos carteles y escribimos poemas
cuando asesinaron a los indios en el ingenio azucarero <i>Aztra</i>. Empecé,
sin el permiso de Nieto, una militancia de izquierda que ahora la veo como un
tiempo perdido. Pero seguí leyendo y escribiendo lo que salía del alma. Personalmente,
me sentía un Fernando Nieto Cadena a mi manera, haciendo poemas que buscaban el
lenguaje de la calle, aunque a veces eso terminaba en panfleto por la
interferencia del izquierdismo en arte. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Yo
quería ser él. Era a lo mejor el mismo romántico colegial, pero esta vez estaba
más cerca de mí mismo. Y andaba con sus libros por todos lados. Me sabía de
memoria sus poemas. Puedo decir que otros empezaron también el juego de
escribir como Nieto pero sin leerlo, solo porque tenía su público. Pero puedo
decir también que otros sí se encontraban, se reconocían en sus líneas. Mi
hermano, por ejemplo, tan alejado de las letras como yo del cielo, andaba enamorado
de una hermosa mulata de Esmeraldas y cada viernes se llevaba mi librito de
poemas de Nieto para leerlo en el autobus mientras iba a los brazos de su amada.
El primer amor que tuve fuera del colegio leía conmigo los poemas de amor de
Nieto (tengo una novela inacabada sobre el tema). Un amigo, que ahora vive en
Puerto Rico, en el colegio se salvó de repetir el año gracias a haber declamado
en público uno de sus poemas. O sea, Nieto se iba regando de a poco en momentos
concretos de la vida de la gente, casi como los santos, para satisfacer deseos
concretos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Mas, a esa etapa de ilusión en pos de la democracia
ecuatoriana, la siguió el vacío. El Guayaquil de esos años -que acaso la
película <i>Roma</i> (Cuarón) reproduce con fidelidad aunque se deba a otra
geografía- empezó a cambiar, es decir a morir en muchos sentidos. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Después de haber compartido conversaciones y recitales
con Nieto (hay uno muy gracioso que ocurrió en Yaguachi: cuando él leía sus
poemas de putas y cantinas, en una sala llena de gente del campo, al fondo uno
de los asistentes, semioculto, decía: “esha e la plena, esha e la plena”
mientras hacía amagues y fintas de fútbol), después de haber conocido el <i>Villa
Cariño</i> y sus vedettes y sentir que pertenecía a un grupo, que tenía amigos,
hermanos mayores en la poesía, de repente ese mundo desapareció: Nieto se fue a
México y <i>Sicoseo</i> se acabó.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Recuerdo con extrema claridad el día en que lo hizo.
El durante y el después. Me veo aun corriendo con Martillo, Ulloa y Alvarado hacia
la terraza del aeropuerto, a ver el avión que se llevaba al que tanto
queríamos. Ahora que lo escribo, siento que quien se fue era nuestro hermano
mayor. Así, nos quedamos solos. Imagino ahora el mismo avión, la misma mañana de
sábado y el mismo aeropuerto que ya no existen.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">A esa pérdida que no entendía y para la cual estaba
muy ocupado (recordar: un militante nunca tiene tiempo), la sucedió, de pronto,
un descanso, una sorpresa: Nieto regresaría por breves días a Guayaquil a un
encuentro de escritores. Mi hermano (el que leía sus poemas en el bus) tenía ya
funcionando la primera salsoteca de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Guayaquil, <i>El pez que fuma</i>, en homenaje
a la película venezolana. Cuando nos vimos nuevamente con Nieto, nos fuimos
allá a beber y a escuchar salsa dura. Luego de las primeras cervezas y chismes,
me preguntó, como retándome: ¿a qué hora vas a poner a los clásicos? Lo cual me
obligó a hacer sonar <i>Para componer un son</i>, <i>Yiri Yiri Bom</i>, <i>Todo
tiene su final</i>, entre tantas otras que bebimos con cariño y entusiasmo.
Esta anécdota se cierra de dos maneras: cuando mi hermano (el dueño de la
salsoteca) entró y le presenté al gordo y se abrazaron como si se hubieran
conocido toda la vida; y cuando regresamos al centro de la ciudad -él tenía que
asistir a una mesa redonda- solo para que Nieto, mientras se mecía detrás de una
mesa, le preguntara a Fernando Artieda: “¿Ronco, en dónde la seguimos?”.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">En ese regreso de pocos días, Nieto fue el mismo de
siempre. Navegó <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>vestido de blanco una
noche en los bravos barrios del sur. Bailó y enamoró a una negra alta y hermosa
en el cabaret <i>El King</i>, y grabó el último cassette para alguno de sus
amigos con música de Bola de Nieve. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Pero hay otro tiempo y espacio, a lo mejor imaginario
para muchos, en el cual siguió transcurriendo su existencia intelectual.
Veamos.</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEibE6wtSQZV_pz3IK53hR0cFhOhtYJuSgiKgFI_HsVgjgVYc4g-ADc3Q6avH4yHm7EiNC98P_PIvVt-jl5kiFlZjFQYKcyzOU4x4jR4rf3WxXZ_sV2gEkNK3oqW4_wHa3DGpVOffm4gadQaW1jXaRpqY20-N46Tvdr7m1oEqlmEHcaFc6Oecd-VMXekmg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="260" data-original-width="194" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEibE6wtSQZV_pz3IK53hR0cFhOhtYJuSgiKgFI_HsVgjgVYc4g-ADc3Q6avH4yHm7EiNC98P_PIvVt-jl5kiFlZjFQYKcyzOU4x4jR4rf3WxXZ_sV2gEkNK3oqW4_wHa3DGpVOffm4gadQaW1jXaRpqY20-N46Tvdr7m1oEqlmEHcaFc6Oecd-VMXekmg" width="179" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 16pt; line-height: 107%; text-align: center; text-indent: -0.5in;">II.<span style="font-family: "Times New Roman"; font-size: 7pt; font-stretch: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; line-height: normal;">
</span></span><i style="text-align: center; text-indent: -0.5in;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 16pt; line-height: 107%;">Castellano, qué bueno baila usté</span></i><span style="font-family: "Times New Roman", serif; font-size: 16pt;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Celebrado en ausencia, tanto Nieto como su poesía se
hicieron famosos en el medio. En Quito, ciudad irremediablemente centralista y polo
opuesto a Guayaquil, lo miraban con recelo, a la distancia, derrotados por su creatividad
y originalidad. A veces, para no ser apabullados, solo decían que Nieto había
nacido en la capital, cosa que él detestaba porque lo entendía como un mero
accidente (como decir que Calvino era cubano) ya que, varias veces lo comentó:
su fuero de hombre era de guayaquileño, del trópico, del Caribe y, luego,
obviamente mexicano, pero de Villahermos o ciudad del Carmen, que es también
una isla.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Entre amigos, en Guayaquil su poesía era citada, sus
libros nombrados, pasados de mano en mano porque ya no había dónde encontrarlos.
Se los fotocopiaba. Los literatos hablaban de Nieto como si lo conocieran. Contaban
anédotas ciertas, inventadas o modificadas, cual Julio Jaramillo barrial y
poeta. Yo me seguía valiendo de sus poemas para enamorar damas de clase media.
Y entre tanta lectura a la que estaba <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sometido, Nieto se me iba pareciendo cada vez
más a Cabrera Infante. Así, pasé de su poesía a la militancia política ida y vuelta,
cosa que él no veía con buenos ojos aunque la respetaba. A veces, en el fragor
del activismo, pintábamos carteles mientras escuchábamos la voz de Cortázar en
la <i>Rayuela</i> y los poemas de Nieto en un LP de la Universidad de Babahoyo.
Ambos eran de ambientación perfecta para el activismo y los afanes amatorios
con las compañeras. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">En una larga aunque desconocida entrevista que le hice
en mi casa, ya estando de U Católica (1981 acaso), desarrolló ampliamente sus
conceptos sobre literatura y habla popular. Mientras su poesía ganaba adeptos,
su discurso teórico propiamente era una incógnita, salvo generalidades
referidas a la política. Hasta hoy, no se conoce un texto ejemplar que él haya
escrito al respecto. La razón quizá es que sus líneas teóricas se funden y
confunden con las poéticas, sobre todo a partir de los 90s, en que hay frases,
definiciones e interpretaciones metalinguísticas incrustadas en sus poemas o
asumidas por su hablante lírico, muchas veces para burlarse de ellas o mantenerlas
como referencias importantes de su<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>identidad. Así, nombres como Lacan o Marx aparecen junto a Celia Cruz o
la <i>Fania</i>. Menciones a Ezra Pound o Allen Ginsberg no se contradicen con comentarios
sobre Olimpo Cárdenas o Benny Moré, pues son lo que los eruditos llaman “unión
de alta y baja cultura”, tan solo que en el caso de Nieto se trata de un solo
signo, unidad indisoluble, imagen fundida en la moneda.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Una vez que Nieto puso en contacto e intercambio todas
sus voces poéticas, llegó al lugar que tanto había buscado. Desde ese momento,
su sólida y muy personal base filosófica para interrogarse sobre otras áreas
del acontecer humano, estarán maduras y con sello de estabilidad enciclopédica
junto a una saludable duda metódica. Nieto será un maestro, a su manera y desde
su sitial, para seguir entendiendo el <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mundo.
¿El resultado? Sus nuevos poemas comienzan a parecerse a los poemas que ya había
escrito y publicado. Se repite a propósito, sin verguenza. Su obra va
conviertiéndose en un largo poema. Busca los entornos del mismo tema, hurga en
algunos detalles, acaso posibles dudas sobre sí mismo (esa vieja manía), a lo mejor
un intento de reafirmación, pues el sentido de la vida debe ser más allá de lo
que uno vive o se imagina. Nieto, cual agnóstico terrenal, explicará este
momento cumbre de su vida y su persona de la manera siguiente:</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-left: 0.5in; text-align: left;"><span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; line-height: 107%;">“La verdad es que desde <i>Los
des(entierros)</i> lo que escribo es un solo texto con algunas estaciones para
hacer una pausa en pos de apoyo logístico. Quienes dicen que me repito tienen
razón; sí, me repito, ¿y qué?”.</span><span style="font-family: "Times New Roman", serif;"> </span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Para fines de 1984 yo estaba en Paris. Nos escribimos
varias veces para ponernos al día, siempre con el mismo tono y la misma
frescura del inicio. Sus cartas eran deliciosas, agradables, chispeantes,
sentimentales. En ellas respondía mis preguntas y aclaraba incógnitas (evito repetición
de mucho de este material pues ya lo he publicado y es de libre acceso en el
internet). <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Nieto siempre estaba escribiendo un libro, siempre.
Ahora sabemos que esos varios libros, incluyendo los que quedaron inéditos, son
en realidad la unidad de su vida literaria, acaso la única que vivió a plenitud.
Su caso es como el de otros artistas (pintores, directores de cine) que siempre
giran en torno al mismo cuadro y a los mismos actores. La primera parte de su poesía
(hasta fines de los 80s) es un proceso vertical, por así decirlo, de su
búsqueda, y va desde sus primeros poemas hasta <i>Los (des)entierros del
caminante</i>. La segunda etapa, es un proceso horizontal de escritura, pues para
ese momento él ya tiene el dominio artesanal de la palabra que trabajó y la
erudición almacenada de tanta vida y lectura. Nieto es ya, para ese libro y los
posteriores, una especie de Zaratustra de sí mismo (Nieto-Nietszche),
contemplando desde lo alto la vida que yace.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Desde la despedida en Guayaquil, allá por 1982, nunca
más volví a ver a Fernando Nieto. Estuve a punto de visitarlo por el 2003, pues
tenía dinero, tiempo y papeles en regla para ir a México (cosa que siempre he querido hacer; además, ya prometí que nacería mexicano en mi próxima
reencarnación), pero el destino me llevó por otros rumbos y luego ya las cosas
cambiaron.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Me escribí siempre con él. Cuando no lo hice fue por
esos olvidos o distanciamientos, también frecuentes entre los amigos. Hasta el
día en que supe nos había dejado para siempre. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">De manera íntima, si le abro las puertas al recuerdo, me
duele su muerte. Pero me alegro más de haberlo conocido, haber leído y vivido
su poesía, tenerlo aún como una gran influencia. Me molesta que él siempre haya
estado abierto a todos, al menos en Ecuador, pues la burocracia literaria extrae
todo lo que puede de los artistas sin nunca dar nada. Y a él nunca lo trataron
como se merecía. Por ejemplo, debería ser un escándalo que todavía no exista
una re-edición de su poesía completa, ni en Quito ni en Guayaquil. (He visto hace poco una antología de la PUCE, antojadiza en comentarios, sesgada, queriendo meter gato por liebre). Pero nada pasa. Nadie
dice nada en <i>tierras del nuaymás</i>. Me molesta que quienes no lo conocieron, ahora se
llenen la boca nombrándolo y publiquen sus obras (no las de Nieto) refiriéndose a él. Los mismos
que viven del usufructuo literario que él tanto aborreció, se aprovechan de
su imagen y su nombre. Me molesta no tener dinero y publicar yo mismo una
edición completa de su poesía (yo, que ahora tengo prioridades familiares). <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: left;"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;">Pero lo que es hoy, digo firme: Fernando Nieto Cadena,
presente en mi mente y mi corazón.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: medium; line-height: 107%;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh7zHrjd5RRJ0FPJLjuwd0o-ZpnBSwm7TqttRR44yD3HwlOwEBcqePK7PG702QIc6cY-y8oefPWjJAnlVMT21jzp2jN5CSLj3AjsqyIy8MCO1Ot7K46Idgp7ctk0ztREdNougN596WbjZEq8LqvIVAJDWP8ywv6cE4X5-OvwuXXdIaNQ7cylaumco50Nw" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="569" data-original-width="420" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh7zHrjd5RRJ0FPJLjuwd0o-ZpnBSwm7TqttRR44yD3HwlOwEBcqePK7PG702QIc6cY-y8oefPWjJAnlVMT21jzp2jN5CSLj3AjsqyIy8MCO1Ot7K46Idgp7ctk0ztREdNougN596WbjZEq8LqvIVAJDWP8ywv6cE4X5-OvwuXXdIaNQ7cylaumco50Nw" width="177" /></a></div><br /><br /><p></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 16pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Times New Roman",serif; font-size: 16pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-3970767201706344922022-01-06T08:26:00.004-08:002022-01-06T09:54:47.342-08:00¿Qué pasó hace un año en Estados Unidos?<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggnKzYnrcZ1JCjhytIq-v35jpBg9BOk3ZPVKdGXAftYa4VN0ntyikWJOq5xARtjtGDyXnhb7z8eOdLvSwHgU_7NOYPnjyiShBX7PmSwvMsQv6jrvAB3e8nH3ojEWnURK900wER_GV5Y_jF/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="573" data-original-width="860" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggnKzYnrcZ1JCjhytIq-v35jpBg9BOk3ZPVKdGXAftYa4VN0ntyikWJOq5xARtjtGDyXnhb7z8eOdLvSwHgU_7NOYPnjyiShBX7PmSwvMsQv6jrvAB3e8nH3ojEWnURK900wER_GV5Y_jF/" width="320" /></a></div><br />Trump perdió las elecciones, pero organizó a sus huestes para un conato de golpe que le permitiera quedarse en el poder. Para ello, el lema más repetido era que las elecciones presidenciales fueron fraudulentas, solo las presidenciales. Las demás, que ocurrieron el mismo día y que los republicanos también perdieron, no importaban. (El culto personal es tan evidente y vulgar que no hace falta repetirlo). Obviamente, no importó que nunca se haya demostrado fraude, a pesar de los desafíos legales y recuentos (inclusive en zonas en las que ganó Trump) que se atendieron. En Estados Unidos, desde que Trump llegó al poder, la mentira se ha institucionalizado. De hecho, el descaro se ha convertido en virtud y los insultos en forma de valentía.<p></p><p>Así, los fanáticos se tomaron el Congreso, sacaron en quema y bajo amenazas a los congresistas, se tomaron fotos, saquearon oficinas, defecaron, ocasionaron las muerte de varios policías y se llevaron de botín algunos recuerdos. La policía y la guardia del lugar no estaban preparadas y poco le importó a la oficialidad poner cosas en orden desde el principio (sí, algo ya olía mal). Quizá, aunque lo hubieran querido, la multitud los habría de todos modos arrasado. </p><p>De un año a hoy se han divulgado cientos de imágenes del fatídico día, y cientos más puestas por los mismos golpistas en sus páginas personales de facebook, twitter, etc. De un año a hoy, el FBI ha apresado a más de 600 personas, pero solo con la invalorable ayuda de anónimos expertos en computación que, de manera gratuita, se dedican a rastrear a los más de dos mil enmascarados y encubiertos agentes del desorden.</p><p>Para estándares latinoamericanos, lo que ocurrió fue solo un conato de golpe, pues no contaban con el necesario aparato militar que garantiza el poder a quien lo arrebata. Para parámetros estadounidenses, esto ha sido una advertencia de lo que se puede venir. La comisión del Congreso que investiga los pormenores del fallido golpe, ha descubierto a los organizadores, y éstos van desde el mismo Trump y congresistas republicanos hasta profesionales y gente común, fanática, ignorante y reacia a aceptar la derrota. Se espera, sin embargo, que ni Trump ni sus congresistas y agentes vayan a la cárcel. </p><p>En términos de la lección histórica, vemos cómo la polarización de los apoyan a Trump y los que votaron por Biden se ha ampliado a otros segmentos de la vida nacional, como la vacuna contra el Covid. A pesar de la apabullante evidencia científica y empírica a favor de las vacunas, los trumpistas rehusan a ponérsela. Si se trata de deportes, las carreras de carros y las peleas de MMA son baluartes del gusto de la ultra-derecha. Si de debate intelectual se trata, enarbolar la ignorancia y la irracionalidad son las herramientas de ataque más útiles y comunes (el no dejar hablar, como decimos en el barrio). </p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWah9aAr8No-S-fP0xICBvs_kEMKS7plMWASKoGNDTVQCmd4kb8Uzh5ug-7FoioyBfzTRw3c5N-MrTDJqDtY-YHqfD3NVtgcVOFRNJDZ4YVukZNGlmZeA9EeVGYxLd5OhJqKIbk7FsHRcV/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="168" data-original-width="300" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWah9aAr8No-S-fP0xICBvs_kEMKS7plMWASKoGNDTVQCmd4kb8Uzh5ug-7FoioyBfzTRw3c5N-MrTDJqDtY-YHqfD3NVtgcVOFRNJDZ4YVukZNGlmZeA9EeVGYxLd5OhJqKIbk7FsHRcV/" width="320" /></a></div><br /><p></p><p>Torpedear y minar la función del estado nacional hoy, en lucha con opositores locales, como los gobernadores DeSantis de la Florida y Abbort de Texas, subordinar el partido republicano al "movimiento" populista de Trump (sus seguidores, no necesariamente afiliados al partido), sobre todo de sus congresistas, y presionar a las hasta ahora neutrales Fuerzas Armadas de EEEUU, son tres elementos que van a determinar el tipo de democracia que se vivirá en los próximos años en este país. ¿Se impondrá el modelo fascistoide pan-europeista, anti-judío, anti-hispano, anti-negro y anti-femenino de Trump, o se volverá a la "democracia representativa" de los últimos 40 años? (No voy más lejos porque antes la historia es claramente diferente). Esta es la pregunta del año, pues se vienen elecciones seccionales que afectarán notablemente el panorama. Y, hasta hoy, no hay una sola persona que crea que los demócratas ganarán. Ni una sola.</p><p>En lo personal, los niveles de irracionalidad, normales en los republicanos y trumpistas de hoy, me recuerdan los momentos de fervor del peor nacionalismo y anti-comunismo en Ecuador, cuando solo bastaba insultar a alguien de "resentido social" o "peruano" (en tiempos de guerra) para ser atacado con burlas por los amigos o con golpes por los enemigos. La agresividad en la vida diaria y los altos niveles de confrontación en todas las esferas de la vida pública y privada, junto a los estragos de la epidemia, han convertido estos últimos años en una inédita pesadilla con la que nadie contaba. </p><p>Ahora que las fuerzas del oscurantismo y el racismo han sido desatadas y están en claro proceso de apoderarse del mundo, para entender mejor las cosas es necesario informarse, votar, ser mejor profesional y ciudadano, decir lo que uno piensa. Mucho me temo que de no hacerlo, por cansancio o falta de interés, el costo será muy alto, y no habrá manera de volver. Esto no es cíclico. Esto es una crisis que viene ocurriendo desde hace 70 años, con nombres y apellidos: Hitler, Mussolini, Stalin, Franco, Castro, Maduro, Putin, Bolsonaro y tantos otros que mejor no recordar. </p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhEWyZJUgPLFGDCfVOzZY30_JGL1HRcCtmBeovzM0zHpPDvY319MDemcbtjJICLS4K44Y1KLz_PQ3AiYeTDgtX1lIAvQnuu9HMyZWSfhhGzgPxq31Noc7PNhXJf9mMKd5vnav_daBNl11Ht/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="500" data-original-width="332" height="314" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhEWyZJUgPLFGDCfVOzZY30_JGL1HRcCtmBeovzM0zHpPDvY319MDemcbtjJICLS4K44Y1KLz_PQ3AiYeTDgtX1lIAvQnuu9HMyZWSfhhGzgPxq31Noc7PNhXJf9mMKd5vnav_daBNl11Ht/w273-h314/image.png" width="273" /></a></div><br /><br /><p></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-10487761785474507962021-10-30T13:19:00.000-07:002021-10-30T13:19:03.645-07:00Kafka y lo que hacemos al regreso<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdYG7hRd55dkw78zpnFk5A0sIu6ywWq80X7D_1SHTvuo0gLVe0hAMCYZY23IddtZyZYynS2IvxOz5Z_Htp6R6e6VS6a7bcgJCYkr5UL8Mt8I2f0AjB8pG7GOtgI_vZXonWTu78Wu6VLgTf/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="537" data-original-width="715" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdYG7hRd55dkw78zpnFk5A0sIu6ywWq80X7D_1SHTvuo0gLVe0hAMCYZY23IddtZyZYynS2IvxOz5Z_Htp6R6e6VS6a7bcgJCYkr5UL8Mt8I2f0AjB8pG7GOtgI_vZXonWTu78Wu6VLgTf/" width="320" /></a></div><br />Beber, a veces desconsoladamente, por el tiempo que ya se fue o por los amigos que nunca más volveremos a ver. Llorar por los familiares que se nos adelantaron. Visitarlos quizá en donde duermen sin temor a molestarlos, poco menos que deseando despertarlos. Conversar con ellos nuevamente, seguir ese diálogo que se quedó trunco la última vez que se vieron. <p></p><p>Cuando uno regresa, en verdad no regresa. Solo visita. Se sabe con un pie aquí y otro allá por unos días. Escucha a veces las voces de los otros como distantes, como si las dijeran desde el otro lado de la calle, a lo mejor más lejos aún, como si fuera un eco.</p><p>Uno trata de ponerse el día y van saliendo chismes, anécdotas, recuerdos, ocurrencias, alguna imagen se reactiva en la mente. A veces un dato nuevo reafirma lo sabido, otras veces lo cambia y altera la percepción de las cosas, porque siempre se puede cambiar el pasado.</p><p>Las formas de volver y hundirse en la geografía original que uno ya perdió ocurre de varias formas: Unos van a su casa (o lo que queda de ella) o a la de sus parientes o amigos, que son con quienes vivió un gran tramo de su vida. Otros se pierden en aventuras de cantinas o pueblos lejanos, en vecindarios clandestinos que los demás ignoraban o simplemente se van de viaje a alguna localidad pequeña en pos del descanso o las alegres vacaciones. </p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDFp1kgG_-Twvio7RbkyRFbaxR3LTbF6jBuHTtJUL8taJ1IWdTA3spDQDalufxTonSOXzeMhyphenhyphenDTYtdbaF15jv1_dAvzqT1PTRcUlrOuJjcf8nM6hxDBoO7z0NQzcrUW2CoM8jUt-NglXw6/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="598" data-original-width="768" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDFp1kgG_-Twvio7RbkyRFbaxR3LTbF6jBuHTtJUL8taJ1IWdTA3spDQDalufxTonSOXzeMhyphenhyphenDTYtdbaF15jv1_dAvzqT1PTRcUlrOuJjcf8nM6hxDBoO7z0NQzcrUW2CoM8jUt-NglXw6/" width="308" /></a></div><br />A veces, los que regresan esconden esa llamada del pasado en la excusa de fiestas patrias o un cumpleaños familiar, el aniversario del fallecimiento de un ser querido o el tan dulce y cruel mes de diciembre, con la calidez de las luces de colores, el arbolito del barrio, los muñecos gigantes que replican desde España, los cohetes y el nuevo año que pronto llega.<p></p><p>Y a veces, esa llegada es también una implosión de muchos sentimientos, tantos que cualquier vocabulario queda corto para describirlo. Acompañan la ceremonia comidas típicas, cervezas heladas, bailes, gritos, abrazos y llanto.</p><p>El regreso al otro lugar es siempre callado, quizá de calmado respiro, y posiblemente cerrado con la promesa de volver. Tal es el vaivén de los millones que dejaron sus tierras y se fueron a otro lado. </p><p>Oro por aquellos que nunca pudieron volver al lugar donde nacieron para cerrar el libro de sus días.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg03kScjOcDj_Tz0j3RGKNVNYn6qV79-slIx1uslmbjyR93-Cz4ZFXW43qcb1U2LZh7LW9-f5v91QYhJURK5tbl2Z3Xcd76XyOXeFiZTYQN7e0xyda4W4jaG_Tny7TnBvftxRw0TlDGoS-A/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="600" data-original-width="764" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg03kScjOcDj_Tz0j3RGKNVNYn6qV79-slIx1uslmbjyR93-Cz4ZFXW43qcb1U2LZh7LW9-f5v91QYhJURK5tbl2Z3Xcd76XyOXeFiZTYQN7e0xyda4W4jaG_Tny7TnBvftxRw0TlDGoS-A/" width="306" /></a></div><br /><br /><p></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-62420067648357422622021-10-12T05:46:00.004-07:002021-10-12T08:03:44.377-07:00Crítica del libro "Galápagos. Imaginarios de la evolución textual en las islas encantadas" de Esteban Mayorga<p><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">[Publicada en </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Revista Iberoamericana</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">. Vol. LXXXVII, Núm. 276, julio-septiembre 2021]</span></p><p><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHmP_er4UJAG2u1mxIKP2ZPIKezFIOJMguVFPDzWL8UsXJEVsAZKnJHtUn3FKkbCNe_ow2JveuaAyl34r2BWlB4CB9GXDSkGu85TUQ87n3IUM4a250R9KsNS1deR266PHkk6tcIEha5YVw/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="630" data-original-width="419" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHmP_er4UJAG2u1mxIKP2ZPIKezFIOJMguVFPDzWL8UsXJEVsAZKnJHtUn3FKkbCNe_ow2JveuaAyl34r2BWlB4CB9GXDSkGu85TUQ87n3IUM4a250R9KsNS1deR266PHkk6tcIEha5YVw/w213-h320/image.png" width="213" /></a></div><br /><br /><p></p><span id="docs-internal-guid-0661fd0d-7fff-ec5b-c521-c1786a87e163"><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Este libro de 208 páginas es originalmente una tesis doctoral. Consta de una introducción llamada “Narrativas insulares”, siete capítulos, conclusión, anexo, notas, obras citadas, índice alfabético y dos páginas en inglés y español acerca de la publicación y su autor.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Las preocupaciones centrales son la manera en la que se han construído diferentes percepciones de la islas Galápagos y el lugar que éstas ocupan en “el imaginario” internacional y ecuatoriano. Son recurrentes las nociones de modernidad, </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">nation</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">building</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> e identidad nacional en la relación archipiélago-Ecuador y viajeros. El libro “propone que los textos que intentan representarlas responden a intereses que no se manifiestan de modo evidente en una primera lectura. La intención no es mostrar estas relaciones, sino trazar vínculos entre ellas y los textos que viajeros, exploradores y escritores compusieron” (1). Este libro es fundacional dentro y fuera de Ecuador y, como es lógico, está expuesto a falencias e inacabados aciertos propios de todo debate nuevo y rico en variaciones.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Para “trazar vínculos” se analizan obras de varios períodos, géneros y objetivos; colonial: </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Cartas a su majestad</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Tomás de Berlanga (c. 1535) e </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Historia de los Incas</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Sarmiento de Gamboa (c. 1572); siglo XIX: </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">The Voyage of the Beagle</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Charles Darwin (1839), </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">The Encantadas, or</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">The Enchanted Isles</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Herman Melville (1854) y </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">El pirata del Guayas</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Manuel Bilbao (1855); siglo XX: </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Galápagos a la vista</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Bolívar Naveda (1952); siglo XXI: </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Galápagos: huellas en el paraiso</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> del cantautor Hugo Idrovo (2005). Esta variedad extrema en los textos seleccionados pondrá a prueba la destreza en la aplicación teórica desplegada en el libro. </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">El punto de vista analítico se desprende, principalmente, de algunos conceptos provenientes de los “estudios culturales”. El lenguaje utilizado se caracteriza por abstracciones y elucubraciones metatextuales que, sobre todo en los primeros tres capítulos generan una sintaxis hermética que desvirtúa el propósito original de mostrar lo que no es evidente en el diálogo que se busca entre textos canónicos y locales sobre las Galápagos. Por lo tanto, este rasgo estilístico, familiar en publicaciones de teoría postmoderna, en </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Galápagos Imaginarios de la evolución textual en las islas encantadas</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> será una virtud y una limitación.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Como virtud tenemos: a- la inclusión de un tema inexistente en la crítica ecuatoriana y poco estudiado en la literatura internacional, b- el esfuerzo por hacer uso de teorías y críticos relevantes en la investigación académica contemporánea, c- la heterogenidad de los textos comentados que claman por un abordaje interdisciplinario, d- el deseo de establecer un diálogo entre escritura literaria y la importancia geopolítica de las Galápagos y el ecoturismo, e- el esfuerzo por darle coherencia y sistematización a la contrucción imaginaria de las Galápagos en situaciones discursivas que desafían los límites entre ficción y realidad, tiempo pasado y tiempo presente, nacional e internacional, f- medir los alcances y la recepción de textos sobre las Galápagos, establecidos internacionalmente (los de Darwin y Melville) que se oponen a textos menores, coincidentemente escritos en español. </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">La primera limitación del libro es la falta de descripciones detalladas de los textos y autores que analiza, lo cual dificulta lo que se trata de establecer. Esto, a ratos se quiere compensar con citas que, en realidad refuerzan estratégicamente las tesis del autor mas no ayudan con la comprensión del análisis.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">La preferencia por el lenguaje abstracto, acaso vago, que domina la primera parte del libro y pasa a segundo plano en la segunda, reaparece en la larga conclusión. Un ejemplo: “La enunciación del postulado evolutivo sugiere más de una conexión a considerarse con la filosofía de Berkeley, especialmente con relación a la cualidad primaria como grado de diferenciación en cuanto a la posibilidad de describir un objeto que se deba a la impresición de, por dar ejemplos, el sentido de la vista confrontado con el del tacto, o el auditivo con el olfativo, en cuyo caso la experiencia vuelve a configurarse” (51). El mensaje cifrado y la autoreferencialidad reducen el número de lectores potenciales del libro y desvía la atención de las ideas centrales.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">La orientación teórica y el afán investigativo del libro se hacen sobre dos grandes ausencias. La primera es del corpus literario y las convenciones retóricas del período renacentista y sus estudiosos (</span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Siglo de Oro</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">, sobre todo) que es el macrocosmos de la literatura colonial, pues temas como utopía, diastopía, el salvaje, viajes hacia lo desconocido, naufragios, nunca son puestos con contacto con la tradición a la que se deben. Se omite también la novela </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Robinson Crusoe</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Daniel Defoe (publicada en 1719) referencia necesaria en todo relato de viajes, así como se ignora la voluminosa bibliografía sobre las obras de Darwin y de Melville. Algo similar ocurre con la obra de Julio Verne. No queda claro tampoco por qué, por ejemplo, la novela </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Galapagos</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> de Kurt Vonnegut, no es analizada, siendo un referente literario mundial sobre las islas y cuyo argumento y estilo están en coordenadas de la globalización, y corresponden directamente a la preocupación del libro de dar cuenta de cómo viajeros internacionales han impuesto su visión de las Galápagos.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">La segunda gran ausencia es la información histórica, tan necesaria en el mundo hispano cuando se estudia obras anteriores al siglo XX. Esto se desprende del uso meramente táctico de las citas bibliográficas y conceptos -que se confirma la lista final utilizada- algunos sacados de fuentes secundarias (como ocurre con de Certeau, Derrida y Kristeva). El libro menciona a algunos historiadores de Quito que han publicado sobre las islas, pero se ignora por completo la obra de especialistas en los períodos analizados, como </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Las ambiciones internacionales por las islas Galápagos</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> (1985) de Jorge W. Villacrés Moscoso. Se incluye el nombre de Margret Witmer en la bibliografía (¡en alemán!), pero no se analiza su libro </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Floreana, lista de correos. Una familia Robinson en las islas Galápagos</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">”, publicado en 1976, referencia frecuente en la información del archipiélago. Los límites de la información histórica se explican también en la falta de investigación en archivos, bibliotecas y hemerotecas de Guayaquil (el mayor puerto ecuatoriano de intercambio con el archipiélago) o de archivos de Quito, abundantes en datos marinos e información sobre el intercambio entre el continente y las islas. </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">La conclusión del libro recoge algunos aciertos del análisis, pero introduce nuevos nombres y citas de críticos y abraza el estilo de metaescritura de los capítulos iniciales: “la diferenciación entre la impostada estabilidad o su ausencia, tanto en el nivel imaginario como en el de la identidad política, está asociada a varios de los niveles discursivos que subyacen al discurso hegemónico dominante” (141). </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh47TJ4km1QGK2-BPMSGdyH0n_eqlKW6Rph9LD3kdDy9oLO3SgpGBFsKmn5U2oOWGRNbTvMEPIxWyhlewTMDk_CO7sY1WuzefpnnpDHUf6ht263RbXAi52k9RNBu1j-3LrGVUsw8ijS26vE/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="201" data-original-width="128" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh47TJ4km1QGK2-BPMSGdyH0n_eqlKW6Rph9LD3kdDy9oLO3SgpGBFsKmn5U2oOWGRNbTvMEPIxWyhlewTMDk_CO7sY1WuzefpnnpDHUf6ht263RbXAi52k9RNBu1j-3LrGVUsw8ijS26vE/w204-h320/image.png" width="204" /></a></div><br /></span><p></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Galápagos. Imaginarios de la evolución textual en las islas encantadas</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">, como todo nuevo esfuerzo, abre camino para una discusión más detallada y con mayor conocimiento tanto de las tradiciones literarias y sus “imitaciones” (de </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">imitatio</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">), como del contexto histórico en las que fueron producidas. Así, ese deseo de “trazar vínculos”, anunciado en la introducción (“Narrativas insulares”), unido a un sistema teórico menos atomizado, podría traducir en el texto la madurez intelectual que el objeto de estudio reclama. </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline;">[MAYORGA, ESTEBAN. </span><span style="font-size: 14pt; font-style: italic; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline;">Galápagos. Imaginarios de la evolución textual en las islas encantadas</span><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline;">. West Lafayette, Purdue UP, 2019].</span></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline;"></span></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi23A3BmIs1pJjO3sqQ2wXt5oiF6WZiS3-86c7X3b5Ld17783nQF0yCwfCvQtlhcAVPhoVpuCkwM8KlAUmpnR3j85TOEjkwAyvvVw1YOY1BTZPdusKjJ7BueMXDbRTaaR-D2sMW8ggRQ0-j/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="840" data-original-width="519" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi23A3BmIs1pJjO3sqQ2wXt5oiF6WZiS3-86c7X3b5Ld17783nQF0yCwfCvQtlhcAVPhoVpuCkwM8KlAUmpnR3j85TOEjkwAyvvVw1YOY1BTZPdusKjJ7BueMXDbRTaaR-D2sMW8ggRQ0-j/w197-h320/image.png" width="197" /></a></div><br /><br /><p></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.295; margin-bottom: 8pt; margin-top: 0pt;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><span style="font-size: 14pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline;"><br /></span></span></p><br />Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-51379204685672230202021-10-09T16:11:00.008-07:002021-10-10T04:51:43.447-07:00Opciones para escribir<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiufuwc-Q_UTP1umFQPFqoN0Grt8eEZI2DGGdljz5NDZAxh7lahMxJGWqS_E0eIddwMLkrOhaHIUbJlfCkw2yNNf2nPtCgGIqX6rG-1PSLr5wdTaHc8G4B7kC71Pesc_nUegsyewMGBpCJZ/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="400" data-original-width="488" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiufuwc-Q_UTP1umFQPFqoN0Grt8eEZI2DGGdljz5NDZAxh7lahMxJGWqS_E0eIddwMLkrOhaHIUbJlfCkw2yNNf2nPtCgGIqX6rG-1PSLr5wdTaHc8G4B7kC71Pesc_nUegsyewMGBpCJZ/" width="293" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><p></p><p>Hay muchas, casi infinitas.</p><p>Uno puede optar por el diario (intimista o no), cualquier otro género literario, o publicar lo que investiga o se le cruza por cabeza. Para hacerlo puede, igualmente, acudir a incontables tácticas: ser serio, ser payaso, decir la verdad, decir una mentira, fabricarse una verdad (solo el que fabrica su verdad tiene miedo de su propia realidad), creer que propone algo, etc. ¿Por qué hacerlo? Esta pregunta es, en realidad, el filtro del empeño. Me explico abajo.</p><p>Las razones muestran por qué una persona hace algo. No hay nada más. El resto es invento o, como decía mi querido Fernando Nieto: "paja a dos manos". ¿Qué hace que uno escriba de una u otra manera? ¿Qué hace que uno elija tal o cual material? Los réditos personales. Nada más. Si estos son económicos, psicológicos, espirituales, políticos, etcétera, es lo de menos. Aquella idea que tanto venden los artistas, sobre todo los escritores, esa frase manida y estúpida que repiten siempre: "es lo único que sé hacer", solo demuestra su pobre y muy bajo nivel de desarrollo mental. ¡Es mentira! Uno hace lo que hace porque recibe a cambio algo que necesita. En nuestras repúblicas tercermundistas, puesto que allí un artista siempre vive en la poquedad, ese algo se llama seguridad personal, reconocimiento, sentido según los otros o, como diría algún bolero: que me quieran un poquito.</p><p>No conozco a un solo escritor, a un solo artista que, siendo sincero y maduro, niegue esto que digo. Obviamente, la mayoría de los actuales, jóvenes que copan redes sociales, creen que han descubierto el oro de los alquimistas, viven mareados en la gloria conseguida con amarres personales y mediáticos. Asumen con sinceridad que son diferentes, mejores que los demás porque escriben de lo que nunca se escribió (risas aquí). ¿Y qué es aquello nuevo? Nada. Literalmente, nada. Lo que se hace en arte desde hace muchos años, quizá desde que Kafka, Joyce y Borges (y similares) dejaron de existir, es prescindible, aburridos afanes por bailar en una fiesta a la que llegaron tarde. </p><p>Peco de injusto, dirían algunos, porque no estuve ni aquí ni allá, ni entre los grandes ni entre los chicos, ni entre los de antes ni los de ahora. Tienen razón. Pero ni la injusticia es ciega ni lo que digo es de ahora. De hecho, si me preguntan o presionaran a la voz de a ver, qué mismo escribes, muestra, les diría que no escribo nada, que ya me aburrí, que no tengo tiempo, que mis inseguridades han sido satisfechas con la vida que llevo (que en realidad no da tiempo para perder). Así, me perdono de mis caídas y mala calidad literaria (si es que algo queda). Nunca de una inseguridad que no existió pues desde siempre pagué el precio de no ser conectado, ni lameculo de periódicos, peor de presidentes. No he andado vendiéndome en Ecuador como extranjero y ni en el extranjero como ecuatoriano.</p><p>Respeto aún a los que quedan. Me aburren los nuevos. No los leo. A lo mejor un par de poemas hace años de una mujer talentosa de la cual su nombre ya no recuerdo. Me aburren tanto que se llenen la boca de poses y discursos sobre lo buenos/as que son, tanto como las palancas y los amarres de los que viven.</p><p>En música: dos hermanos del Carchi que tocan pasillos (un requinto bárbaro), Okan Yoré en salsa y la gran Karla Kanora. </p><p>En pintura rescato a un joven negro que me gustó hace algunos años, lo que hacía Velarde y los cientos de árboles que son uno solo de Servio Zapata, de quien asumo tiene la película clara.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiuiy-Nbkc2cI1uui3TH_bUfdqUx55S8w0uMq316OlfzwOivCpTsRaMuln2HRDOM0pzTdyTGSKhTeZE-tq42A8n_FUXdZ0tsLobV8VSkW7HjiZgw_bQqF2wXfmyHsa0PNYeeJB4OPSDR4Vc/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="566" data-original-width="1200" height="151" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiuiy-Nbkc2cI1uui3TH_bUfdqUx55S8w0uMq316OlfzwOivCpTsRaMuln2HRDOM0pzTdyTGSKhTeZE-tq42A8n_FUXdZ0tsLobV8VSkW7HjiZgw_bQqF2wXfmyHsa0PNYeeJB4OPSDR4Vc/" width="320" /></a></div><br /><br /><p></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6084915219564430805.post-10212023515449445612021-08-11T12:09:00.005-07:002022-08-05T21:59:11.225-07:00La fortuna de una familia<p> </p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgooLFx4rttusc2AiG27tT23bAthfv8e64cfFN5GsJoA1Ly6Ok6XU99CmzrqX6JWYXPqjDqJYVLy8DyJNI3MLZ1Hx6w3TImaDDmg0txxCEqQGPQODsR8HT_Ckze6MN2O9MatBziyH21ufim/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="745" data-original-width="1024" height="233" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgooLFx4rttusc2AiG27tT23bAthfv8e64cfFN5GsJoA1Ly6Ok6XU99CmzrqX6JWYXPqjDqJYVLy8DyJNI3MLZ1Hx6w3TImaDDmg0txxCEqQGPQODsR8HT_Ckze6MN2O9MatBziyH21ufim/" width="320" /></a></div><br /><p></p><p>Me refiero al dinero y a la riqueza que una familia puede acumular durante generaciones.</p><p>El dinero es una cosa, la riqueza es otra mayor y mejor. El dinero entra y sale, generalmente, en la vida de la clase media y de los pobres. Pero en manos del 1% crece, se multiplica, se solidifica y es celosamente resguardado para que siga creciendo de manera segura. Esto segundo es la riqueza.</p><p>El comediante y actor Chris Rock explica la diferencia entre millonario y billonario (rico, wealthy): "Shaq O'Neil es millonario. Pero su jefe, el dueño de los Miami Heats, es billonario". Así mismo, una cosa es tener dinero y otra es tener riqueza. Obviamente, a lo que se apunta dentro del Capitalismo es a la concentración de dinero y a su uso bajo diferentes formas de poder. Para lograrlo hay que perseverar durante toda la vida y durante varias generaciones (dos o tres, al menos) pues se necesitan formas de negociación y transacción consistentes y permanentes para entrar al círculo de los "ricos" (de riqueza), aquellos que los viejos llaman "oligarquía". </p><p>En ese afán, los "nuevos ricos" siempre se marean, pues se pierden en lo que es la rápida adquisición y despilfarro de dinero durante su vida, en detrimento del ahorro, disciplina e inversión y control que demanda la riqueza (suponiendo que se quiera ser rico de verdad, ser parte del 1%). A lo más, tienen algunas propiedades que, al final, deben rematar para pagar deudas acumuladas de esas inversiones chuecas o por despilfarros personales. (Ojo: no me refiero a los siendo de clase media luchan, consiguen un capital y siguen luchando diariamente por mejorar su vida y la de sus hijos. Para esos: mi respeto). </p><p>Una diferencia entre ricos y adinerados es que los primeros nunca invierten su dinero: invierten el dinero de los otros y se quedan con la mayor parte de las ganancias. Y cuando hay pérdida, pues esa nunca la absorben ellos sino los otros inversionistas: Miles de ecuatorianos perdieron sus ahorros e inversiones y se volvieron pobres de la noche a la mañana, pero los Isaías se hicieron más ricos, pues no era su riqueza la que estuvo en juego. De hecho, ahora tienen más dinero y riqueza que antes.</p><p>Anoto estos comentarios porque he visto a varios tener mucho dinero (millones de dólares) y hacerlos picadillo de la manera más aborrecible, dejando a su familia en la pobreza extrema. He visto a muchos partirse el lomo toda la vida y a duras penas lograr una vida mínimamente decente, quizá tranquila, pero no alegre, rozando penurias. Y sé de otros que han trabajado duro en todos los frentes posible de manera simultanea, todo para que su nueva generación no se interese en transformar ese dinero en riqueza. Asunto lamentable pero incontrolable, y quizá con mucho sentido desde otro punto de vista.</p><p>He visto cómo el dinero acumulado, en vías de consolidar una riqueza, pasa a segundas manos por alguna tragedia familiar (ah, esas viejas cuentas que nunca se terminan de pagar), y deja de ser de aquél que tanto se esforzó en dejar algo para su familia. He visto cómo los gallinazos vuelan bajo y despedazan, roban lo que se pueda, al menor descuido, y luego siguen campantes como si no hubieran hecho nada. He visto, en la misma circunstancia, nuevos amigos que nunca fueron amigos, solo ladrones del momento. </p><p>¿Qué le deja uno a su familia luego de una vida trabajo? ¿Se debe esperar que otros tomen la posta? Esos son dilemas de "nuevos ricos". En cambio, los que tienen la riqueza, ese 1%, sabe siempre cómo hacer que las cosas marchen, para bien o para mal, sin que a ellos les afecte. A esos les da igual que la gente muera de COVID o de despecho, en un accidente de tránsito o de viejos, simplemente no les afecta.</p><p>En ese 1% se encuentran las familias "famosas", de reigambre y estirpe, de pedigrée o títulos comprados, aquellos que se inventan algún ancestro o patrimonio nacional de su propiedad, esos grupos de castas o estamentos que pululan en las instancias estatales y del risible Congreso. Son los mismos que escriben la historia nacional y pagan (siempre hay alguien que se vende, alguna fundación, universidad, grupo de investigación) para que escriban desde su punto de vista (incluyo en estas líneas a los intelectuales centralistas de Quito y de otros lugares, generalmente pagados por ese 1%) y le den sentido orgánico, de destino divino, a ese asunto de tener riqueza. De la misma manera, ellos son también los que fomentan y sostienen un gusto según sus necesidades, en la vida diaria como en la alta cultura (libros, por ejemplo, en los cuales se critica lo casual, no se ataca el mal en sus raíces), en las noticias de la prensa o en las oleadas de rumores y desinformación que ahora son la última frontera de control del 1%, acaso mucho más peligrosa que antes porque se viste justamente de contestataria, de anti-control. (Así empezaron Hitler y sus asesinos).</p><p>La fortuna de una familia es un tema común en la literatura del siglo XIX, pero no recuerdo haber leído que la dinámica de su obtención sea diferente dos siglos después. Lo que sí he visto es una profunda ignorancia sobre el tema, no se diga sobre la magna empresa que significa empezar desde cero y mantenerse en alto, de haber acumulado riqueza y poder ser hoy del 1%, es decir de los que controlan y deciden cómo deben vivir los demás.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPQZEVSxTkEFQN6g23_x2NW97zCn7YG6EZP40dxV0ZCXhn5_M7LLWq-m5RyfBcsFSVT8C1uNClWtCuvQJq5Ox-Jhxiyaxi6LJsofE5EZr3jnG6jY9hHfOXwCHnoewzQYq2GSrXw9F7x8QY/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="159" data-original-width="317" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPQZEVSxTkEFQN6g23_x2NW97zCn7YG6EZP40dxV0ZCXhn5_M7LLWq-m5RyfBcsFSVT8C1uNClWtCuvQJq5Ox-Jhxiyaxi6LJsofE5EZr3jnG6jY9hHfOXwCHnoewzQYq2GSrXw9F7x8QY/" width="320" /></a></div><br /><br /><p></p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p>Fernando Iturburuhttp://www.blogger.com/profile/06494684246125197818noreply@blogger.com